El calor, la sequía y el viento sur ponen a Cantabria en máximo riesgo de incendios

Las altas temperaturas y la sequía que acusa Cantabria son los dos factores que se confabulan para que todo el territorio (las trece comarcas) se encuentre este jueves en situación de máximo riesgo por incendios forestales. El último balance del Gobierno regional dice que, en la actualidad, tres activos si bien dos de ellos pueden considerarse controlados. El peor se localiza en los Collados del Asón, donde está trabajando un operativo. En Hazas de Cesto ya se está refrescando la zona y en alto Soba -fuera del parque natural de los Collados del Asón- el tercero también está en vías de control.

El consejero de Desarrollo Rural Guillermo Blanco se ha mostrado preocupado esta mañana por la situación: «El calor va a estar acompañado de viento sur y además hay combustible en los montes, con lo cual estamos en máximo riesgo», ha explicado, «desde la rasa costera hasta la alta montaña». El titular del departamento ha hecho su habitual llamamiento a la ciudadanía, para que todo el mundo sea consciente «de que los fuegos los apagamos entre todos y también los pagamos entre todos», en referencia a los recursos públicos que consume los efectivos destinados a luchar contra los incendios, que cuestan «unos cuantos millones de euros».

También ha recordado que Cantabria cuenta con casi 400 efectivos en la prevención y lucha contra incendios forestales -entre técnicos emisoristas, bomberos forestales y agentes de Medio Natural-, y ha pedido a la población que permanezca vigilante y colabore con la Administración «al menor atisbo» de sospecha de incendio para poner a los autores «en manos de la justicia».

Blanco ha asegurado que «el 99%» de los incendios forestales de Cantabria son provocados, algo que también ocurre con los tres en los que se está trabajando actualmente en la zona oriental de Cantabria.

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