Cancelados todos los vuelos de hoy entre Madrid y Santander por las placas de hielo en Barajas

«Esto es un poco desastre porque entendemos que el temporal está causando estragos y era muy difícil de prever lo que iba a venir;pero llevamos ya varios días con ello y esto está muy mal organizado», criticó Valerio Romano. Un joven italiano que pretendía regresar a su país haciendo escala en la capital de España tras pasar unos días en Santander.

«Ahora tendré que mirar a ver si no hay problema con el cambio del billete que me iba a llevar de Madrid a Roma, porque el seguro no se hace cargo. Llamas a un teléfono al que nadie hace caso. No sé para qué están los seguros. Y todo esto, después de tres días que llevamos de temporal, ¿de verdad que no se podía haber organizado mejor? ¿Cómo lo hacen en los países donde esto pasa cada invierno?», criticó enfadado.

Fue uno de los 62 viajeros que se quedaron sin volar en la mañana en el Seve Ballesteros. Entre todos, los que no salieron de Madrid y los que se quedaron en Santander, tanto en el vuelo de la mañana como en el de la tarde –con llegada prevista a Cantabria a las 17.10 horas–, fueron 129 las personas que no pudieron volar en este itinerario de ida y vuelta.

El trastorno no se midió sólo en el tiempo perdido, también supuso dinero. «No sabemos si las compañías nos van a cobrar por el cambio de fechas y horas», aclaró Daniel Capodicasa. Él trabaja en Dublín y el viaje a Madrid era parte del transbordo obligado para llegar a la capital de la República de Irlanda. «Lo más complicado es que trabajo allí y no sé si voy a perder días de labor por todos estos problemas. No sé, en otros países nórdicos donde nieva así no tienen tantos problemas durante tantos días», reflexionó tras hablar con la agente de la compañía para cambiar su vuelo a este miércoles.

Ninguno fue ubicado en el avión que tiene prevista su llegada en la tarde de este martes a Santander procedente de Madrid. «Todo apunta a que lo van a cancelar también, porque me extrañaría mucho que estuviese lleno», afirmó este joven. A la hora de cierre de este periódico, Iberia todavía no había confirmado oficialmente su cancelación.

Lo más complicado fue reubicarlos a todos. De ahí que muchos pasaran largo rato frente a la ventanilla, negociando el mejor avión y horario para la alternativa al vuelo. «Algunos tendrán fácil cambiarlo pero para nosotros es un trastorno muy gordo», sentenció Leozander Merán. Cargó con hasta 12 maletas junto a toda su familia –siete miembros en total– rumbo a Madrid para volar desde allí a Santo Domingo, para pasar unos meses con la familia. «Ahora vamos a tener que subirlas a casa otra vez y es un quinto piso sin ascensor, porque no nos enteramos que estaba cancelado», lamentó. Además, entre la ida y la vuelta son 120 euros en taxis. Es un trastorno que seguro que se podía haber evitado porque no saben cómo arreglar este tipo de problemas y reaccionan tarde». En su caso, además, al ser un grupo de siete, encontraron problemas para reubicarse juntos en otro vuelo.

Por otro lado, el Gobierno de Cantabria ha desactivado el Plan Territorial de Emergencias de Cantabria (Platercant), ante la mejora de las previsiones y la finalización de las alertas meteorológicas en vigor en toda la comunidad autónoma por el paso de la borrasca 'Filomena'.

Así lo ha informado hoy el Ejecutivo en un comunicado, en el que ha recordado que el plan permanecía activado en su fase de preemergencia desde el pasado viernes por la tarde, lo que ha implicado el mantenimiento de los sistemas de vigilancia y alerta y el seguimiento intenso de la información meteorológica e hidrológica, medidas preventivas por parte de la población y la movilización de los servicios operativos.

Desde el comienzo de esta alerta, el Centro de Atención de Emergencias 112 ha recibido cerca de un centenar de llamadas asociadas a este episodio, en su mayor parte por nieve, y de las que se ha coordinado 59 intervenciones de los servicios de emergencia.

La borrasca 'Filomena', a su paso por Cantabria, ha afectado principalmente a la vialidad en las carreteras, lo que ha intensificado los trabajos de los servicios de mantenimiento de todas las administraciones públicas.

Los mayores problemas ayer se dieron en la zona de Campoo, con varios coches parados por una ventisca en Campoo de Yuso en la CA-171 entre Reinosa y Corconte. Esta carretera requiere actualmente de cadenas por la presencia de nieve y hielo.

Otras siete vías de la red autonómica están cerradas o son necesarias las cadenas para circular. En concreto, continúan cerrados el puerto de Palombera (CA-280), La Sía (CA-665), Estacas de Trueba (CA-631) y Lunada (CA-643), así como La Matanela (CA-633), según informa la web de Carreteras de Cantabria, dependiente del Gobierno regional.

Además, la nieve y el hielo hacen obligatorio utilizar cadenas para circular por tres tramos: Alto Campoo, en la CA-183 Reinosa-Brañavieja, CA-181, Reinosa-Corconte; y Collado de Hoz, en la CA-282, Puentenansa-La Hermida.

Por su parte, la estación de Alto Campoo ha registrado a las 8.30 horas de este lunes una temperatura de -6,7 grados, la mínima de la comunidad autónoma aunque alejada de los -17,6 que había a la misma hora en la de Molina de Aragón (Guadalajara).

El resto de temperaturas más bajas en Cantabria en el inicio de la jornada se han producido en Fuente Dé (-4,3), Tresviso (-1,2), Reinosa (-0,8) y Cubillo de Ebro (0 grados).

También el viento ha soplado con fuerza esta madrugada en la región, alcanzando 82 kilómetros por hora en Castro Urdiales, 66 en Alto Campoo, 44 en Santander y Reinosa y 37 en San Vicente de la Barquera.