Cantabria entra en riesgo alto por covid mientras la octava ola suma ocho muertes

El último dato oficial -de ayer- fija la acumulada a 14 días en los 1.528 casos, con lo que Cantabria ha entrado en riesgo alto de transmisión de coronavirus en este parámetro (ya estaba en riesgo alto la acumulada a siete días) y se coloca en niveles del pasado febrero. Reinhard Wallmann, director general de Salud Pública, ha señalado que, «ahora mismo, el avance del virus está siendo exponencial», pero que Cantabria no está demasiado por encima de la media española.

Según sus datos, en comparación con España, se está dando el fenómeno que se ha constatado en olas anteriores: «No hemos arrancado tan pronto como los demás pero, como siempre, al ser Cantabria un territorio pequeño, reacciona mucho más rápido (al subir la incidencia)». Aquí también sigue la misma línea en el momento en que la ola empieza a desactivarse, «que también bajamos más deprisa», ha ilustrado.

Los porcentajes correspondientes a hospitalizaciones en los últimos días poco resisten en Cantabria la comparación con la media española. Mientras en España el número de ingresos ha subido un 21% en una semana, en Cantabria ha subido el doble (un 40%, según los datos de este lunes). No obstante, en esta Comunidad la ocupación de camas por covid está todavía en el 4,2% frente a un promedio en el conjunto de España de casi el 10%. Es decir, la ocupación hospitalaria todavía está en la región muy por debajo del promedio pese a la velocidad que lleva.

Este martes la cifra de ingresados descendió puntualmente respecto al día precedente en los hospitales de la región. En la actualidad hay 61 pacientes repartidos entre los cuatro hospitales (el lunes eran 64). Y la UCI de Valdecilla, por su parte, atiende a dos personas más (en total cinco) en las últimas horas.

Las autoridades sanitarias ven con preocupación el avance de esta octava ola y tanto Carolina Darias (ministra de Sanidad) como los gobiernos autonómicos del País Vasco y Asturias, por ejemplo, han hecho llamadas a la prudencia (sobre todo para que se vuelva a usar la mascarilla) desde que se constató que el virus avanza otra vez a gran velocidad. En Asturias, la Administración ha pedido «responsabilidad» tras multiplicarse por cuatro los contagios de covid en un mes.

Aunque, debido a la nueva forma de contabilizarse los contagios -solo se apuntan los de los mayores de 60 años, con lo cual es de suponer que la mayoría de los que existen realmente se quedan fuera de la contabilidad oficial- los ciudadanos no tienen muy claro si recuperar o no el uso de la mascarilla como medida preventiva y se debaten entre la preocupación y la tranquilidad ante el repunte de contagios. El consejero de Sanidad de Cantabria Raúl Pesquera se limitó a finales de la semana pasada a mostrar preocupación por los posibles contagios entre sanitarios ahora que en la red pública sanitaria un importante número de profesionales disfruta de sus vacaciones y a confirmar que está creciendo la velocidad de la transmisión.

Este martes, el número de contagios se contuvo ligeramente respecto al lunes, al registrarse 350 frente a los 361 que se habían contabilizado un día antes. Pero en la última semana se han contabilizado 1.671 positivos en el grupo de mayores de 60 años, que se elevan a 2.676 si se tiene en cuenta también la semana anterior.