Cantabria, a favor de retrasar la implantación de la nueva EBAU

En estos momentos, casi 250.000 alumnos españoles comenzarán a partir del 7 de septiembre el curso en segundo año de Bachillerato y no saben todavía como será la prueba. Si continuará con el formato actual o se introducirán los cambios que marca la nueva ley de Educación, aprobada por el PSOE y sus socios. Desde Cantabria, el Gobierno es partidario de «hacer las cosas con prudencia» y no cambiar los modelos hasta que «estén lo suficientemente contrastados para que no se generen esas tensiones que pueden ser muy perjudiciales», aseguró ayer Silva. Y es que el consejero entendía que «no se iban a tomar decisiones» a la vista de la valoración que hacían las universidades y algunos territorios que trasladaban que «no era el momento de implementar el cambio de modelo».

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El consejero hizo estas declaraciones a los medios tras mantener una reunión con el rector de la Universidad de Cantabria (UC), Ángel Pazos, quien también se pronunció al respecto señalando que no le ha llegado «ninguna novedad» sobre la EBAU más allá de lo publicado en los medios. «No sé si finalmente la EBAU del próximo año va a ser exactamente como la de años anteriores o si ya se va a iniciar el primer paso de lo que estaba previsto de transición hacia el nuevo modelo», respondió Pazos, quien aseguró que no tiene conocimiento porque con la convocatoria de las elecciones «hubo un cierto movimiento de frenar todo lo que tenía que ver con el nuevo modelo».

En el encuentro, Silva confirmó al rector el compromiso del Gobierno con un escenario de financiación «estable y plurianual» para la institución académica, siguiendo el planteamiento de la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga.