Cantabria libera siete camas UCI en una semana

Esta fase de decadencia de la quinta ola ya es una realidad en los hospitales de Cantabria. El retroceso fue visible primero en los contagios, después en los ingresos en planta y ahora parece haber llegado a las unidades de críticos (el último escalón donde se puede ver el comportamiento del virus). Con cinco olas a las espaldas, no hay que descartar ningún escenario porque el virus puede volver a apretar en cualquier momento. No obstante, los datos del último informe de la situación sanitaria ofrecido por Sanidad siguen evidenciando una mejora de la mayoría de los indicadores.

En la última semana se han liberado siete camas de la UCI de Valdecilla, pasando de los 18 pacientes del viernes pasado a los 11 actuales. De hecho, es la cifra más baja desde el último mes y medio (19 de julio), justo antes de que la quinta onda empezará a empujar con fuerza hacia su peor escenario. En total (planta y UCI), son 46 los hospitalizados por covid en la región (los mismo que el día anterior y 36 menos que hace justo una semana). El grupo de edad con más hospitalizados por covid corresponde al de 60 a 69, con 14 pacientes; seguido por el de 80 a 89, con 9 pacientes, y los de 50 a 59 y 70 a 79 años con siete respectivamente.

Con la disminución de la presión hospitalaria, la ocupación en planta se mantiene en nivel bajo y la de críticos en nivel medio, lo que consolida la entrada de Cantabria en nivel de alerta 2.

Por sexto día consecutivo, la región apunta menos de un centenar de positivos con 84 casos nuevos (diez más que el día anterior y ocho menos que hace una semana). La positividad también sigue cayendo y alcanza ya el 8,6% (riesgo medio), dos puntos por debajo respecto al viernes pasado, cuando rozaba el 11%. Santander sigue acumulando el grueso de los nuevos positivos (37) seguido de Torrelavega, que tras el cierre del balance de este jueves suma 14.

La incidencia acumulada a 14 días cae 27 puntos en una jornada hasta alcanzar los 259 casos por cada cien mil habitantes (hace una semana se situaba en 329), mientras que la de la última semana también desciende hasta los 108 casos (el viernes pasado superaba los 150).

También en la parte buena de los datos, la casilla de fallecidos vuelve a aparecer este viernes en blanco tras no registrar muertes derivadas del virus en las últimas horas. Así, el número de decesos por el virus en Cantabria desde que comenzó la crisis sanitaria se mantiene en 607.

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