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La Consejería de Desarrollo Rural mantendrá operativo, durante la vigencia del estado de alarma decretado por el Gobierno de España por el coronavirus, su servicio de lucha contra los incendios forestales, así como el de vigilancia del medio natural.
En el caso del operativo de lucha contra incendios forestales, considerado servicio estratégico por el Gobierno de Cantabria, el 100 % del personal estará disponible para intervenir en caso de incendios forestales, de tal manera que permanece activo el operativo del nivel 1, que actúa durante las 24 horas del día de los 365 días del año y está integrado por 1 técnico de guardia, 1 emisorista, 13 agentes del medio natural, y 3 cuadrillas forestales.
En caso de que las condiciones meteorológicas lo precisen, el operativo del nivel 2 de este servicio podrá ser activado como viene siendo habitual cuando se dan este tipo de casos en Cantabria, lo que supondrá que los cerca de 400 empleados públicos que conforman este operativo estarán a disposición para intervenir allá donde sea necesario.
Al igual que hace habitualmente, y en esta ocasión agravada por las circunstancias extraordinarias que ha provocado la propagación del coronavirus, el Ejecutivo quiere llamar a la responsabilidad de los ciudadanos para evitar prácticas de riesgo y colaborar con las autoridades para avisar de cualquier indicio de fuego o de sus posibles causantes contactando con el 112, con la guardería de la Consejería o con la Guardia Civil.
En este sentido, el consejero de Desarrollo Rural, Guillermo Blanco, ha insistido en la importancia de que los ciudadanos colaboren en seguir las instrucciones de las autoridades para evitar poner en riesgo, tanto a las personas que trabajan en este servicio, declarado estratégico durante el estado de alarma, como para el conjunto del medio natural.
Por otro lado, la Consejería va a mantener como servicio esencial la vigilancia del medio natural con su plantilla de agentes del medio natural, que seguirán realizando servicios itinerantes en las diferentes comarcas forestales con el fin de detectar prácticas ilegales que afecten al medio natural, así como para atender a trabajos inaplazables como los informes por daños provocados por la fauna silvestre.
Asimismo, recuerda que los desplazamientos de ganaderos, agricultores, forestales o pescadores para realizar sus actividades económicas están permitidos por tratarse de »sectores de gran relevancia y que, especialmente en la situación que vivimos, son fundamentales para garantizar el suministro de alimentos de calidad al conjunto de la población».
Por último, ha anunciado que en los próximos días su departamento, en función de la evolución de la pandemia y de las decisiones que se adopten por el Gobierno central respecto al estado de alarma, valorará la adopción de las medidas que considere necesarias en relación con las actividades cinegéticas y de pesca fluvial cuyas campañas tienen previsto iniciarse el próximo 1 de abril.
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