Cantabria prevé comenzar a vacunar a nuevos colectivos a partir del 15 de febrero

Zuloaga ha explicado que durante la presente semana se prevé inocular la segunda dosis vacunas de Pfizer en más de 75 residencias y centros de salud, con más de 6.000 dosis. Y la semana próxima se completará la segunda dosis en «la práctica totalidad de las residencias» y en los centros sanitarios, con otras 5.000 dosis.

El vicepresidente ha reivindicado que la comunidad autónoma tiene «capacidad de sobra» para administrar las dosis que recibe (ha inoculado ya el 95,2% de las disponibles) y ha explicado que «el cuello de botella» para poder seguir avanzando en la vacunación está en la «escasez de vacunas» por los «problemas de suministro» de los laboratorios que han obligado a «reprogramar» el calendario de vacunación previsto.

Respecto a Pfizer, ha señalado que, según les ha trasladado el Ministerio de Sanidad, las vacunas se irán regularizando a partir del 15 de febrero, con lo que, si esto ocurre, se podría abordar la vacunación de nuevos grupos, siguiendo las indicaciones que vaya estableciendo el Ministerio. Y en cuanto a las de Moderna, Zuloaga ha explicado que todos los países de la UE, también España -y con ello Cantabria- verán reducidas el número de dosis prevista en la siguiente entrega.

En el caso de Cantabria, ha indicado que en esta tercera entrega estaba previsto recibir 1.900 dosis -en la primera fueron 500 y en la segunda llegaron, aunque con retraso, 800- pero finalmente llegarán 1.600, lo que supone una reducción del 20%. Según Zuloaga, al parecer la empresa Moderna ha justificado esta rebaja de dosis en un «problema temporal de rendimiento y retraso en la entrada en funcionamiento de nuevas líneas de producción».

El vicepresidente regional ha señalado que, con las dosis de Moderna, se prevé completar la primera dosis de los trabajadores del transporte sanitario urgente e iniciar la vacuna de profesionales «de primera línea» de centros sanitarios privados, y de dentistas.

Además, con la llegada de las vacunas de Moderna -para la que no hay fecha concreta, aunque podrían llegar este mismo mes-, se prevé vacunar a los profesionales de los centros sanitarios públicos que no pudieron recibir la dosis en un primer momento por diferentes motivos, como ausencia o enfermedad, entre otros.

Y en cuanto a la vacuna de AstraZeneca, Zuloaga ha indicado que tampoco se sabe la fecha ni la cantidad de dosis que podrían comenzar a recibirse en Cantabria. Sin embargo, ha indicado que si está previsto que lleguen este mes 1,8 millones de vacunas de AstraZeneca a España y Cantabria viene a recibir habitualmente un 1,2% de las dosis, se podría hablar de unas 20.000 para Cantabria si se cumplen las previsiones. Respecto a esta vacuna, Zuloaga ha recordado que, en el caso de AstraZeneca, hay una limitación, ya que se prevé que solo la puedan recibir menores de 65 años.

En Cantabria, además de a los usuarios y trabajadores de residencias de mayores y a personal de los centros sanitarios, se incluyó dentro de la primera fase de vacunación a la plantilla y los internos del centro penitenciario de El Dueso (Santoña), algo que suscitó ciertas críticas por parte de algunos partidos políticos.

Allí se administraron 524 primeras dosis de la vacuna de Pfizer y ahora Zuloaga ha confirmado este jueves, a preguntas de los medios de comunicación, que recibirán de forma «inminente» la segunda, dentro del plazo establecido de 21 a 28 días.

Con datos cerrados hasta la pasada medianoche, en Cantabria se han administrado 35.033 vacunas. De ellas 16.284 se han puesto en residencias, con 6.363 pautas de vacunación completadas; 18.225 en instituciones sanitarias, con 7.479 completadas; y las 524 ya mencionadas en El Dueso. Esto hace que el 3,8 por ciento de la población cántabra esté vacunada contra el covid.

Hasta ahora, el porcentaje de aceptación de la vacuna entre los integrantes de los colectivos incluidos en esta primera fase es del 97,7%, es decir, poco más del 2% la ha rechazado. Así, Zuloaga ha afirmado que el porcentaje de negativas es «ínfimo», aunque ha recordado que es un «derecho» del ciudadano el decidir vacunarse o no.

Sin embargo, cree que hay que «concienciar» en favor de la necesidad de vacunarse contra el covid puesto que, a su juicio, constituye una «buena garantía para salir adelante».