Cantabria se queda sin descuentos en los trenes tras la derrota del Gobierno en el Congreso

Ese fue el compromiso de Transportes en febrero de 2023. Lo firmó la por aquel entonces ministra Raquel Sánchez con los presidentes autonómicos de Cantabria y Asturias. Entre las contraprestaciones que incluía el documento para resarcir a los usuarios asturianos y cántabros por el fiasco destapado por El Diario Montañés y El Comercio, entre otras cosas, que esa gratuidad se extendería en ambos territorios hasta que llegaran los nuevos trenes en 2027. Esta circunstancia especial que tenían Cantabria y Asturias cae ahora, ya que estaba incluida dentro del Real Decreto que han tumbado PP y Junts, según confirma a El Diario Montañés la Delegación del Gobierno en Cantabria, que insiste en la idea de que esta singularidad está recogida en el decreto que ahora queda sin efecto.

El Gobierno regional no tardó en salir al paso y amenazó este miércoles con ir a los tribunales si no se cumple el «acuerdo de obligado cumplimiento»: «No nos temblará el pulso para exigirlo con contundencia, no vamos a permitir que Sánchez y sus ministros se rían de los cántabros», aseguró el consejero de Fomento, Roberto Media. Eso sí, tanto los abonos gratuitos de Cercanías como los de Media Distancia ya emitidos se podrán seguir utilizando hasta que finalice su vigencia en abril.

«Se extenderá la aportación económica actual para la gratuidad de las Cercanías ferroviarias en Asturias y Cantabria hasta la entrega de las unidades de trenes pendientes en el contrato en curso», decía literalmente el convenio firmado. De hecho, se estableció que, aunque los abonos gratuitos para los usuarios de las Cercanías puestos en marcha a mitad de 2022 se eliminaran en el conjunto nacional, Cantabria y su vecina Asturias no se verían afectadas y mantendrían su compensación por el error en las dimensiones de los trenes.

Cabe recordar que estas medidas fueron impulsadas por primera vez por el Gobierno central por la inflación desbocada tras la invasión rusa de Ucrania y prorrogadas en los años sucesivos mientras la escalada del IPC se moderaba poco a poco. La no convalidación del decreto se traduce en la práctica en que a partir de este jueves, cualquier usuario que acuda a la ventanilla o máquina para comprar un billete de tren deberá pagar el precio establecido por las tarifas aplicadas antes de los descuentos. Y desde este jueves, tampoco se podrán adquirir abonos ferroviarios de media y larga distancia con rebaja. Eso sí, el fin de las ayudas no afectará a aquellos que ya tengan en vigor su abono, ya que seguirán vigentes hasta su caducidad. De la misma forma, los abonos gratuitos de las líneas de autobús estatal seguirán vigentes hasta abril, cuando finaliza su validez.

La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, Ha lamentado que no podrá aplicarse la gratuidad de los Cercanías para Cantabria en 2025, una iniciativa que «estaba beneficiando a miles de cántabros». En este sentido, ha denunciado que «una vez más, el PP da la espalda a los ciudadanos, demostrando que no está comprometido ni con la movilidad ni con el progreso de nuestra región».

Lo que no está tan claro es que ocurrirá con el descuento en los autobuses urbanos y los que unen los pueblos cántabros, también incluidos en este decreto en el que se bonificaba el 30% subvencionado por el Gobierno central y el 20% asumido por ayuntamientos o comunidades autónomas, según el caso, y que sobre el papel estaban asegurados hasta el 30 de junio. A los Consistorios, el cambio repentino también les cogió este miércoles por sorpresa, pero todos ellos tomaron decisiones temporales para tener margen y esperar a ver qué ocurre en Madrid, si hay algún cambio y, a partir de entonces, decidir si pueden asumir las rebajas o quedan anuladas y el precio completo repercute sobre los usuarios del transporte público.

En Santander, el Ayuntamiento ha decidido congelar desde este jueves los precios actuales del transporte urbano (TUS), con el descuento del 50% aplicado, y con los mismas tarifas para los abonos: 25,50 euros para el trimestral joven y 8,50 euros para las personas con discapacidad. Además, el viaje simple con la tarjeta estándar recargable también costará 33 céntimos como hasta ahora. Es decir, además del 20% aportado en este tiempo, el Ayuntamiento asume de «forma cautelar» la subvención ahora eliminada del Ejecutivo central y el viaje queda a la mitad de precio que en 2022. Desde el Consistorio apuntan también a que en los próximos días decidirán si retiran la subvención o no definitivamente.

Misma situación en Torrelavega, donde este miércoles por la tarde decidieron que el Torrebús mantendrá sus descuentos en los abonos multiviajes, de momento, «hasta final de mes» y a la espera de tomar una decisión definitiva. En Castro Urdiales, los precios tampoco se tocarán y el Ayuntamiento pondrá la parte que hasta ahora correspondía al Gobierno central.

En cuanto a los autobuses interurbanos que unen los pueblos cántabros, el Ejecutivo de Buruaga confirmó que seguirá subvencionando su parte, el 20%, aunque en la práctica, el billete será más caro para los usuarios, ya que Cantabria no asumirá la parte que hasta ahora corría a cargo del Gobierno de Pedro Sánchez.