Cantabria recibe a sus 'embajadores' en el mundo

Una pequeña parte del grupo de los presidentes de las Casas de Cantabria se trasladó ayer desde Santander en autobús hasta Potes y el resto lo hizo por su cuenta. Después, los representantes de las diferentes Casas de Cantabria se desplazaron desde el Hotel Valdecoro, donde se alojan, hasta el restaurante El Bodegón, donde les dio la bienvenida la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, y cenaron, además de disfrutar de una actuación folclórica ofrecida por el Aula de Cultura Tradicional del Valle de Camaleño, que mostró algunas tonadas de la comarca lebaniega y del resto de la región.

Julio Gómez, presidente de la Casa de Cantabria en México, reconoció que «es un placer regresar de nuevo a la tierra donde uno nació y se crió, y más representando a la Casa de Cantabria de México y a todos sus asociados».

En cuanto a las inquietudes y deseos de este encuentro, afirmó que «es muy importante que se unieran más las ideas, las relaciones, la cultura, que tengamos más acercamientos y para ello debemos de contar con el Gobierno de Cantabria, que nos ha ayudado mucho».

Desde Rosario (Argentina) llegó por vez primera a la región la presidenta de su Casa de Cantabria, Lucía Garay, que estaba entusiasmada por los paisajes que estaba contemplando y por la belleza del Desfiladero de La Hermida. «Mi abuelo era de Castro Urdiales y yo comencé en el Centro a conservar nuestras raíces con el grupo de danza, desde que tenía 7 años, y ahora con este viaje me siento emocionada». Respecto al Encuentro, desea que «sirva para que podamos seguir transmitiendo nuestra cultura y tradiciones a las nuevas generaciones».

Desde Tenerife y Las Palmas proceden Guillermo de Benito y Miguel Dubreuil, que esperan con ilusión «poder acercar posturas con el Gobierno de Cantabria, más ahora después del cambio político que ha habido, reivindicar ayudas para la gente que está fuera de la región, intentar la unión entre todos e informar sobre la acogida de los cántabros retornados y los pasos dados por el Gobierno, por si alguno de ellos decide volver, y saber de las ayudas con las que cuentan».

Miguel, que es de Comillas, recuerda que ya ha estado «dos veces veraneando en Ojedo y tengo buena relación con los lebaniegos», mientras que Guillermo, que lleva siete años de presidente de la Casa de Cantabria en Tenerife, asegura que «he participado en los encuentros de Puente Viesgo y Comillas, y en esta ocasión estoy encantado de venir a Liébana en su Año Jubilar».