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Santander
Lunes, 20 de noviembre 2023, 12:04
Playa, montaña, gastronomía, cultura, deporte… La inmensidad de recursos de distinta índole con los que cuenta Cantabria la convierten en un destino turístico cuyo gran potencial de base ha ido evolucionando y creciendo hasta alcanzar la excelencia.
Entre todos ellos, los recursos naturales hacen de nuestra región un entorno único, donde exprimir al máximo la naturaleza es posible. Para ello, Cantabria cuenta con la más extraordinaria oferta de establecimientos orientados a este tipo de turismo que permiten dar un paso más allá a la experiencia.
En concreto, Cantur gestiona en la actualidad nueve instalaciones turísticas de diferente tipología que se han convertido en el motor de la economía de numerosas zonas de Cantabria, generando una media de 400 empleos directos.
Nueve paradas obligatorias para quienes se adentren en nuestra región pero también para quienes en ella vivimos.
Situada en el municipio de la Hermandad de Campoo de Suso y a tan sólo 24 kilómetros de Reinosa, la estación de esquí y montaña Alto Campoo se presenta en un paisaje inigualable para los amantes de la montaña. Con cumbres que superan los 2.200 metros y con rutas como la de Pico Tres Mares, está considerada una de las mejores del Cantábrico.
Y es que Alto Campoo ofrece unas magníficas instalaciones para la práctica del esquí, con un total de 23 pistas (cuatro verdes, diez azules y nueve rojas), doce remontes así como todo lo necesario para la práctica de esquí de fondo y un snowpark.
Entre los servicios que Alto Campoo ofrece a sus clientes, se encuentra el alquiler de equipos completos o parciales para esquí, snow, y raquetas; así como distintas opciones de escuelas para cursos y clases particulares.
Para recargar energías tanto en el edificio Multiusos –con servicio de cafetería y self service– como en la cafetería de El Chivo, los esquiadores cuentan con un buen ambiente donde picar algo o comer buen bocata, un plato combinado o el menú del día.
Parada obligatoria para los amantes de la naturaleza es el Parque de Cabárceno. Situado en el valle del Pisueña, a escasos 15 minutos de Santander, destaca por ser un centro de conservación de especies de los cinco continentes, con más de 120 especies que viven en régimen de semilibertad, distribuidos en recintos de grandes superficies donde coexisten una o varias especies. Un entorno único donde poder vivir, además, distintas experiencias como la que ofrece su visita salvaje.
Pero el Parque de la Naturaleza de Cabárceno no es un zoológico convencional ni un parque natural. Es un espacio naturalizado por la mano del hombre, a partir de la belleza primitiva de su paisaje kárstico, sobre las 750 hectáreas de una antigua explotación minera a cielo abierto.
Se trata de un entorno que, junto a su gran riqueza geológica, cuenta con más de 5.000 árboles de una gran variedad de especies y una creciente biodiversidad que en él se desarrolla. Todo ello, lo convierten en un espacio único para disfrutar y aprender a amar y respetar la naturaleza, tanto para grandes como para los más pequeños de la familia.
Los más de 20 kilómetros de carreteras que surcan el parque nos conducirán a los diferentes recintos a través de maravillosos desfiladeros, apacibles lagos y sugerentes figuras rocosas. Además, por todo el parque existen numerosas zonas de aparcamiento y sendas que nos permiten descubrir rincones de gran belleza.
El Parque de la Naturaleza de Cabárceno es un lugar ideal para pasar el día en familia ya que dispone de numerosas zonas de recreo, merenderos, miradores, rutas botánicas, cafeterías, restaurantes, parque infantil…
A todo ello, se suma la Telecabina. Una infraestructura turística que permite una mejora en el disfrute de los visitantes al parque, así como una mayor accesibilidad, ya que facilita al usuario una visión panorámica en altura.
En pleno corazón del Parque Nacional de los Picos de Europa, el Teleférico de Fuente Dé supone todo un viaje por la inmensidad de sus montañas.
La instalación salva un desnivel de 753 metros y sitúa al viajero a 1.823 metros de altitud en tan sólo 4 minutos, a una velocidad de 10 m/s. Una vez en lo alto, desde la estación superior, el visitante se sobrecogerá con un paisaje de inmensa belleza.
Para los amantes de la montaña y la naturaleza, desde allí nacen distintas rutas como los Horcados Rojos, los Puertos de Áliva o el circuito de La Vega de Liordes.
Y para quienes prefieren relajarse y disfrutar, la instalación dispone de dos cafeterías, una ubicada en la cota inferior del teleférico (cafetería 'Fuente Dé'), con capacidad para 200 comensales, y otra en la estación superior (cafetería 'El Cable'), para 150 personas. Junto a esta última hay un balcón mirador orientado al sur desde el que se divisa una extraordinaria panorámica de la Cordillera Cantábrica, quedando al norte las cumbres del Macizo Central o de los urrielles de Picos de Europa.
Dos son los campos de golf en Cantabria gestionados por Cantur. El primero de ellos, en la pequeña localidad de Mogro, el Golf Abra del Pas, llamado así por estar situado en la desembocadura de este río, que rodea el campo.
Ubicado en uno de los parajes más bellos y con más encanto del mar Cantábrico, en sus instalaciones el golfista puede disfrutar de este deporte de una manera cómoda, tranquila y sosegada y, al mismo tiempo, disfrutar de la belleza de su entorno porque el recorrido está rodeado de bosques y dunas de finísima arena lo que convierte las calles del campo en verdaderos prados.
Con 18 hoyos y par 70, el campo tiene suaves subidas y bajadas, un gran lago que afecta a 6 hoyos y ayuda en el drenaje del campo y en la estrategia del juego, y un rough espeso limitando las calles. Asimismo, dispone de campo de prácticas cubierto con iluminación artificial, pitching y putting green, carros manuales, carros eléctricos y palos de alquiler.
También situado en plena naturaleza, esta vez muy cerca de Alto Campoo y a 2 kilómetros de Reinosa, se encuentra Golf Nestares. Un recorrido de 18 hoyos, par 72, con suaves desniveles y una longitud de 6.250 m, que disfruta tanto el jugador amateur como el jugador profesional, pues su dificultad no está exenta de conseguir esa vuelta que todos los aficionados a este deporte siempre han soñado.
Sus espectaculares lagos hacen que el jugador se concentre, disfrute de la estrategia necesaria y se desentienda por completo de sus problemas cotidianos en un día verdaderamente placentero.
Otro de los factores que hacen a Cantabria infinita es su oferta hostelera. Contar con una buena ubicación y un buen servicio, unidos a unos recursos adecuados contribuyen a exprimir al máximo el entorno y conseguir que la visita a la región sea toda una experiencia.
Imprescindible en esta oferta es el Hotel Áliva, ubicado en la cota superior del Teleférico de Fuente Dé. Un hotel familiar rodeado de montañas, prados y de un paisaje inigualable, desde el que cada día se pueden realizar espectaculares excursiones y reponer fuerzas gracias a los cuidados platos elaborados con productos de la comarca de Liébana.
Y de Liébana a Campoo. El Hotel la Corza Blanca es un acogedor alojamiento de 3 estrellas que está construido en armonía con el paisaje montañoso de la comarca con materiales nobles como la madera y la piedra natural. Destaca el techo oblicuo y escarpado para que no se acumule en él la nieve, lo que ha permitido dotar a las habitaciones de un tragaluz que te permitirá contemplar las estrellas tras una jornada de ski.
Situado en el corazón de la estación de esquí y montaña Alto Campoo, el hotel la Corza Blanca ofrece todas las comodidades para los amantes de la montaña y la naturaleza. Muy cómodo para familias y deportistas. Además su servicio de cafetería y restaurante dispone de una amplia y variada oferta gastronómica abierta a cualquier persona que quiera disfrutarla.
Dos establecimientos componen la oferta de restauración de Cantur. La de más reciente apertura es la cafetería de Peña Cabarga. Situada en el macizo del mismo nombre, volvió a abrir sus puertas en abril de 2022, tras unos años sin uso y unas completas obras de rehabilitación.
Con una superficie de cerca de 230 metros cuadrados, el comedor de esta cafetería está rodeado en su casi totalidad por cristales que lo convierten en un mirador único con vistas panorámicas de Cantabria: Santander y los municipios de la bahía por un lado, y los verdes paisajes de la montaña por otro.
Con motivo del Año Jubilar Lebaniego esta cafetería ofrece en su servicio de restaurante el Menú del Peregrino, compuesto de cocido lebaniego, canónigo, bebida y café.
El segundo de los restaurantes se encuentra en la localidad de Fontibre (en el municipio de Hermandad de Campoo de Suso), que da nombre al local. Enmarcado en un entorno natural privilegiado como el nacimiento del río Ebro, y rodeado de montes, bosques de chopos, robles y hayas, fauna, este restaurante, que cuenta con cafetería y terraza exterior, ofrece una gastronomía tradicional Campurriana y Cántabra. Así, la suya es una una cocina cuidada y elaborada de forma artesanal, a base de recetas tradicionales que hacen posible disfrutar de sabores únicos al degustar los platos típicos de la zona.
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