Cantabria recupera la circulación de los trenes y pone fin a los transbordos

No fue, en cualquier caso, una decisión fácil de tomar, ya que aunque la interrupción del servicio de trenes ha permitido acortar el plazo de ejecución de las obras, el hecho de que coincidiera con el periodo de verano y de más demanda por parte de los viajeros dio origen a múltiples protestas, como las del Gobierno regional, el Ayuntamiento de Santander o las de representantes del sector turístico que, junto con los usuarios, criticaban su inoportunidad.

Ésa era la opinión generalizada entre los primeros pasajeros que se apeaban en Santander en esa primera jornada de vuelta a la normalidad, como Carla Soler y Sandra Martín, llegadas de Palencia en el tren playero «para aprovechar el día». «Es la peor época para cortar los trenes, justo con el verano». «Lo podrían hacer en invierno», añadían otras dos viajeras, Noa Sánchez y Ainhoa Romero, tras completar su trayecto desde Valladolid.

«Yo soy de Extremadura, con eso lo digo todo: todo lo de Renfe, fatal. Allí estamos como olvidados», explicaba Magdalena Gordo, tras bajarse del tren de Madrid. «Suelo ir de Plasencia a Madrid. En éste no he tenido problemas: un poquito de retraso y nada más».

Mucho más positiva se mostraba Agustina González, antes de salir hacia Bárcena de Pie de Concha. «Suelo ir todos los fines de semana, pero este mes de agosto no sé cómo ha funcionado, sé que la gente iba en autobús. Me parece que el servicio funciona bien: leo en la prensa que los trenes van con retraso, pero a mí no me ha coincidido, y cada vez que he ido a cogerlo a la hora, ahí está».

También aguardaba este domingo la llegada de los trenes Antonio Berrios, comisionado del Plan de Cercanías de Cantabria y Asturias, responsable del seguimiento de los trabajos que se llevan a cabo en ambas regiones, quien no ocultaba su satisfacción por los avances en las infraestructuras realizados durante el mes de agosto. «Ha sido una construcción de Alta Velocidad, de red convencional, de mantenimiento... en fin, un puzle complejo de organizar con tantas contratas, tantas empresas construyendo y teniendo a disposición todos los suministros que hacían falta para este mes de agosto. Se ha estado trabajando con una intensidad enorme, 24 horas al día, para conseguir que se llegase a la fecha, y no ha habido margen: el sábado a las diez de la noche estábamos probando una circulación en vacío».

Subrayó la extrema complejidad de algunas de las actuaciones desarrolladas, como el despliegue de la segunda vía en la zona de Parbayón, que ha supuesto redibujar una curva que hasta ahora obligaba a reducir la velocidad de los trenes, con la construcción de una losa de hormigón, sustentada por más de ochenta pilotes, que canaliza el nuevo tramo de 400 metros de vía doble.

Berrios, que admitió que la interrupción del servicio ferroviario ha supuesto una molestia para los usuarios, justificó la elección de agosto para originar el menor trastorno a la actividad del Puerto de Santander y a la exportación de automóviles. «Hemos intentado que le afecte lo menos posible, y era el único mes en que no lo veía del todo mal: es el puerto que más mercancía trae por ferrocarril».

El propio ministro de Transportes, Óscar Puente, celebraba en X la reanudación del servicio. «Vuelven a circular los trenes de Renfe entre Santander y Renedo tras concluir con éxito los trabajos más complejos para duplicar la vía entre Renedo-Guarnizo. Finalizamos así una de las fases cruciales del proyecto de modernización de la línea Torrelavega-Santander. Avanzamos en una obra estratégica del Plan de Cercanías de Cantabria que, con una inversión de 138M€, transformará el servicio».