Cantabria reforzará los servicios sociales con 39 millones de los fondos europeos

La consejera Ana Belén Álvarez expuso este martes en el Parlamento el mapa de acción, que se canalizará por varios frentes. Lo han llamado Plan de Choque de Cantabria para la Economía de los Cuidados: «El punto más ambicioso es la apuesta por la especialización del modelo de cuidados de larga duración, que absorberá 23 millones de euros», aclaró Álvarez. «La atención a nuestros mayores y personas con discapacidad es una prioridad absoluta para el Gobierno de Cantabria y para el Gobierno de España», expuso. Se pretende con ello transformar el sistema de atención a la dependencia. «Se creará una red de asistencia en proximidad, promoviendo centros multiservicios en entornos rurales, así como una red de minicentros residenciales en formato de viviendas para personas mayores o personas con discapacidad».

Se modernizarán también los centros residenciales, que podrán transformarse en unidades de convivencia reducidas, «para que las residencias se asemejen lo más posible a un hogar y para facilitar un modelo de trabajo más personalizado con las personas», explicó la consejera en la calle Alta.

La apuesta por impulsar y reforzar la Dependencia se complementará con la creación de un 'Centro de Apoyo a los Cuidados' «en el que se ofrecerá asesoramiento y apoyo a las familias, a lo largo de todo el ciclo vital y que, además, servirá de centro de referencia y formación, tanto para profesionales como para voluntarios», explicó la consejera.

Otra de las líneas de inversión contempla la generalización de las tecnologías terapéuticas al servicio de los cuidados. Se dedicarán 3,9 millones de euros al desarrollo de la teleasistencia avanzada en Cantabria. «Queremos aprovechar los avances tecnológicos para mejorar o mantener la autonomía personal en la vida diaria, favorecer la estimulación física y sensorial, y mantener las redes familiares y sociales gracias a la mayor conectividad, además de ofrecer herramientas y apoyos a las personas cuidadoras», concretó la responsable de la Consejería de Empleo y Políticas Sociales.

La mejora de los procedimientos también tiene mucho que ver con la digitalización del Sistema Público de Servicios Sociales, y en ese sentido Cantabria invertirá 8,7 millones de euros a lo largo de los próximos tres años para «mejorar los tiempos de respuesta y liberar carga administrativa de los profesionales, que se podrá dedicar a la atención a las personas».

Otro de los ejes de inversión previstos servirá para poner en marcha programas innovadores en estos ámbitos. Está línea está dotada con 1,2 millones de euros, y entre sus objetivos figura desarrollar un plan de prevención del aislamiento social y la soledad no deseada en zonas rurales.

La consejera ha indicado que este programa estará enfocado hacia «personas mayores de municipios en riesgo de despoblamiento, que viven solas o que residen en localidades alejadas de los núcleos urbanos, a las que se ofrecerá atención domiciliaria y telefónica y la promoción de nuevas relaciones vecinales».

También se ha pensado en planes para mejorar el sistema de acogimiento residencial y familiar de menores, con 3,9 millones de euros destinados a cuatro líneas de actuación: obras de adecuación y mejora de las instalaciones; renovación de los equipos informáticos; campañas de captación, formación, asesoramiento y apoyo al acogimiento familiar; y formación en competencias digitales que contribuyan a reducir la brecha digital.

Habrá también una inversión de 2 millones de euros para mejorar la accesibilidad de los Servicios Sociales, que financiará inversiones en el desarrollo de reformas arquitectónicas en los centros, con obras para la accesibilidad física en los centros de atención, una medida demandada por los usuarios.