
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Que no nos engañen las lluvias de estos días, porque las previsiones para este verano en Cantabria son de calor. No en vano, la agencia ... Estatal de Meteorología (Aemet) advierte de que los meses de julio, agosto y principios de septiembre no solo seran más cálidos de lo habitual, sino que podrían estar entre el 20% más cálido de la serie histórica y hay que tener en cuenta que esta serie arranca en 1961.
Con la entrada oficial del verano, este 21 de junio, y aunque al mirar al cielo cántabro no lo parezca, el delegado en Cantabria de la Aemet, Arcadio Blasco, y el jefe de la Sección de Climatología, Juan Ignacio Pérez, han presentado las previsiones estivales que llegan, además, tras una primavera también más seca y más cálida de lo normal.
Y como hablar del tiempo es hablar de probabilidades, Blasco ha ido más allá para tratar de afinar y aseguró que la posibilidad de que las temperaturas sean más altas de lo normal se sitúa entre el 50 y el 70 %. Eso en la zona norte, porque en el resto de España, la probabilidad supera el 70 % y podría incluso acercarse al 100 %.
En cuanto a las lluvias, Blasco explicó que «es más difícil de predecir y estos datos hay que tomarlos con cautela». Así, la previsión de que sea un verano más seco es de entre un 50 y 60% para las comunidades del Cantábrico. En las zonas interiores de la península esta probabilidad baja un 10%.
A pesar de estos datos, el calor se rezagará un poco en Cantabria. Hay que tener en cuenta que el verano meteorológico no coincide exactamente con el verano astronómico y comprende concretamente los meses de julio, agosto y septiembre. De esta manera, aún quedarían unos días para que lleguen las jornadas más calurosas.
Así pues, la predicción para los próximos días en la región es de predominio de lluvias débiles y dispersas, con temperaturas suaves, que irá mejorando para la noche de San Juan. Entre lunes y martes, días 24 y 25 de junio, los cielos se despejarán y las temperaturas tenderán a ascender, sin embargo, a partir del miércoles 26, se espera que la cola de un frente atlántico afecte de nuevo Cantabria, lo que hará que vuelvan las nubes y bajen las temperaturas.
Blasco reconoce que Cantabria «no está en riesgo de sequía» actualmente, aunque eso «dependerá de las precipitaciones» que se produzcan. La situación en España ha mejorado en las últimas semanas debido al aumento de las precipitaciones, pero Blasco advierte de que hay que mirar la situación a más largo plazo «a tres años, la cosa no está tan bien». En este índice, en España sólo se libran las cuencas del norte y del Tajo «el resto están en un escenario de sequía.
Y es que este verano más seco y cálido va a hacer su entrada tras una primavera también más seca y cálida de lo habitual. Sí, en Cantabria también. Eso se traduce en que hemos tenido una temperatura media de 10,8 grados, 0,3 grados por encima del valor medio de este periodo. La acumulación de lluvias ha sido de 256,3 litros por metro cuadrado, cuando la media en este periodo es de 316,8. En cuanto al viento, no ha habido variaciones «destacables», y la cifra más alta registrada fueron los 195 kilómetros por hora en la estación del Mirador del Cable en Potes el 6 de abril. Ha sido, precisamente abril, el mes más seco. Tras un marzo de precipitaciones «normales» y de temperatura cálida, abril llegó especialmente seco y cálido. Durante este mes la temperatura media fue de 10,9 grados, 0,8 grados por encima de la media habitual; con una precipitación de 58,1 litros por metro cuadrado cuando lo normal es 105,3. Este fue también el mes que ha registrado más horas de luz (197,1). Algunas de las temperaturas destacadas de esta primavera se dieron el 6 de abril, con 29,1 en Castro Urdiales; 27,7 en Santander y 30 en Villaverde de Pontones. Además esa jornada se vivió «una noche tropical» en Cantabria y fue especialmente complicada para los incendios forestales. Mientras, mayo se ha caracterizado por ser un mes húmedo en el que han caído 100,7 litros por metro cuadrado y frío. La temperatura media ha sido de 12,1 grados, 0,8 menos de lo que es habitual.
En cuanto a la primavera en España, Blasco ha resaltado que «ya está en el pódium de los años más cálidos», ya que ha sido una estación cálida con una temperatura media de 13,1 grados, 0,7 por encima de la media, lo que la sitúa en la décima primavera más cálida de la serie histórica y la octava del siglo XXI.
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Ana del Castillo
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