Un cántabro consigue poner fin al secuestro parental de su hija en Polonia

Un encuentro que se ha producido gracias a la coordinación de distintos organismos, como la Fiscalía Superior de Cantabria, la Fiscalía de Cooperación Internacional, la Guardia Civil de la comunidad autónoma, el Centro Nacional de Desaparecidos y la Fiscalía y Autoridades Policiales de Polonia.

Los hechos se remontan al año 2013 cuando la relación sentimental de esta pareja se acabó y la mujer decidió llevarse de manera ilícita a la menor, que por aquel entonces tenía dos años, a su país natal, donde ha permanecido hasta la actualidad. Todo ello sin el consentimiento del padre y sin una orden juidicial que así lo ordenara o permitiera.

Ante tales hechos, el cántabro puso los hechos en conocimiento de la Fiscalía Superior de Cantabria, que abrió un proceso largo y doloroso para este hombre, que ahora, aunque aún no haya una resolución judicial, ha conseguido regularizar las visitas de la menor a la comunidad autónoma.

La Guardia Civil de Cantabria entró en este proceso hace casi un año, en febrero de 2024, gracias a una llamada de la asociación Niños Sin Derechos (Nisde) en la que se ponía en conocimiento de los agentes la situación en la que se encontraba este padre. De este modo, la Benemérita iniciaba las actuaciones oportunas para conseguir que la menor pudiera viajar a Cantabria para ver a su padre en base a los términos contemplados en el Convenio de la Haya de 1980 sobre los aspectos civiles de la sustracción o secuestro internacional de menores.

Este texto se aplica cuando los dos estados implicados -en este caso Polonia y España- son parte de estos convenios, es decir cuando ambos países han firmado los instrumentos internacionales que se contemplan en la norma y refieren la posibilidad de alcanzar una solución amigable, como así ha sido.

Por eso, el pasado 14 de febrero la menor llegó al aeropuerto de Loiu, en Bilbao, acompañada de una familiar, para reencontrarse nuevamente con su padre, abuelos paternos y otros familiares. A partir de ahora, estas visitas tendrán continuidad en el tiempo.

El Convenio sobre los aspectos civiles de la sustracción internacional de menores fue ratificado por España en el año 1987 y en el año 2002 la conducta concreta de la sustracción de menores era incorporada a la legislación penal española tras la recomendación expresa del Defensor del Pueblo.

El 1 de agosto de 2022 entró en vigor el Reglamento relativo a la competencia, el reconocimiento, y la ejecución de resoluciones en materia matrimonial y de responsabilidad parental. Sobre la sustracción internacional de menores, la norma comunitaria obliga a todos los Estados miembros a la restitución de menores objeto de sustracción internacional en otro Estado miembro.

La recomendación ante supuestos de esta naturaleza es presentar la inmediata solicitud de restitución ante el Ministerio de Justicia, sin perjuicio de formular una denuncia por los hechos.

En esta materia, el Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES) actúa como observador del fenómeno y es el punto focal a nivel nacional e internacional.