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No era el favorito, pero sabía que contaba con un buen puñado de apoyos antes de abrirse las urnas. También que su máximo rival iba a ser Serafín Romero, que aspiraba a repetir en el cargo haciendo valer su experiencia. Pero Tomás Cobo dio la ... vuelta a los pronósticos y se impuso este sábado en las elecciones a la presidencia del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España (Cgcom). Tan solo hubo dos votos (23 a 21) de diferencia entre ambos, lo que evidencia lo reñidos que estuvieron los comicios, a los que estaban llamados a votar los presidentes de los 52 colegios de médicos repartidos por toda la geografía nacional. El resto de las papeletas fueron a parar a María Luisa González, que sumó tres. Hubo cuatro en blanco y una nula.
De esta manera, Cobo, especialista en Anestesiología y Reanimación, representará a los médicos españoles durante los próximos cuatro años. «Voy a tratar con todas mis fuerzas de que la institución sea lo más útil posible a los colegiados en el día a día de su actividad asistencial, en todos los ámbitos», lanza como primer mensaje el nuevo presidente.
Una cercanía que ejemplificó en el minuto de silencio que guardó nada más hacerse con el cargo y que estuvo dedicado a todos los médicos que han muerto en activo durante el año covid, que «han antepuesto su profesión, la atención al enfermo, por encima de su propia salud física y psíquica». En esta línea, refleja que el coronavirus «ha puesto de manifiesto una vez más la vocación de servicio público que tenemos los médicos, que es la clave y la esencia de esta profesión».
Afronta Tomás Cobo la ambiciosa tarea de «modernizar» el organismo y ponerlo «mucho más cerca del día a día de todos los médicos de España, pegado a los pasillos de los hospitales, de los centros de salud, de la medicina privada... Cuanto más cerca estemos de los médicos, más sentido tendrá la institución», explica sobre las señas de identidad que quiere que marquen su mandato.
Una modernización que, en su opinión, tiene que ir apoyada por un lado en una «inexcusable revolución digital, en el Big data», para hacer «lo más fácil posible a los colegiados todos los trámites administrativos que tienen que hacer; y, por otro, en «estar a la vanguardia defendiendo el modelo sanitario universal, público y gratuito que tenemos, que es el eje básico de la justicia social».
Otro de los pilares que quiere implantar Cobo en esta andadura es la apuesta por el aprendizaje durante toda la carrera profesional. «Debemos redoblar los esfuerzos que realizamos en la formación médica continuada, de tal manera que podamos acreditar los cursos de formación y armonizar nuestros conocimientos con los de nuestros compañeros en Europa para que la libre circulación de los médicos sea una realidad», reflexiona en voz alta el doctor, que desarrolla en la actualidad su labor asistencial en el hospital Sierrallana de Torrelavega y la clínica Mompía.
No se olvida tampoco de las condicionales laborales y los sueldos. «El hecho de que el 50 por ciento de la profesión médica esté con un contrato precario es realmente decepcionante, al igual que tengamos los sueldos más bajos de la Unión Europea. Todo esto agota», asegura con ánimo de reivindicar un giro a la situación.
El presidente sigue sumando objetivos mientras avanza la conversación: «tenemos que acercarnos más a los jóvenes, conseguir que la institución esté a la vanguardia de la igualdad de género, defender a los médicos de las cada vez más habituales agresiones...». Cambios que implican «reformar los estatutos, modernizar el código deontológico...». En definitiva, modelar «una institución del siglo XXI».
No le son ajenas las tareas de gestión a Tomás Cobo. Dentro del ámbito de las corporaciones médicas, ya ha desempeñado diversos cargos: fue presidente del Colegio Oficial de Médicos de Cantabria entre 2011 y 2017; vicepresidente primero del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España durante la legislatura recién terminada; y en la actualidad es también vicepresidente de la Unión Europea de Médicos Especialistas. Por ello, sabe que el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos «debe tratar de estar lo más cerca posible de la Administración para ver si de alguna manera podemos colaborar, como asesores gratuitos, pero también cualificados, que somos, para que ese modelo sanitario del que nos hemos dotado durante muchos años en España sea cada vez más fuerte».
Además de la presidencia, las elecciones también ponían en juego la Vicesecretaría general del colegio, en la que repetirá en el cargo la doctora Rosa Arroyo, especialista en Oftalmología y colegiada de La Coruña; y la Tesorería, donde resultó seleccionado el doctor Enrique Guilabert, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria y presidente del Colegio de Médicos de Segovia. Ambos acompañarán a Cobo en el mandato durante los próximos cuatro años.
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