Revilla se acerca al PP: «No obstaculizaré al que ha tenido un resultado tan espectacular»

«No somos un partido carroñero. He defendido esta tierra por encima de todo y voy a intentar que sea gobernable y, por todos los medios, que no se contamine con Vox», señaló el líder regionalista. Ese, precisamente, está siendo el principal reproche a Revilla en las horas posteriores a la debacle electoral. Tanto dentro como fuera del partido. Si el PRC se había postulado en campaña como el muro contra las políticas antiautonómicas de la ultraderecha, ¿por qué no se ofrece ahora como cerrojo a la entrada de Vox al Gobierno? El PP puede gobernar solo, claro, pero un PRC amable amplía las opciones de Buruaga si busca un socio con el que asegurarse una legislatura tranquila en el Parlamento, alejada de los vaivenes de los pactos puntuales no solo para su investidura, sino también para aprobar cualquier ley o los presupuestos anuales. Un PRC dispuesto a pactar no aboca a Buruaga a lanzarse a los brazos de la ultraderecha. Al menos no tan alegremente y sin disimulo.

Seguro que Revilla ha tomado buena nota de la opinión lanzada por un grupo de alcaldes jóvenes, muchos de ellos con sólidas mayorías absolutas en sus ayuntamientos, que exigieron al partido no bajar los brazos de antemano y pelear la negociación con el PP.

El alcalde de Reocín, diputado y presidente de la Federación de Municipios, Pablo Diestro, ejerció de portavoz de ellos: «No podemos renunciar a la posibilidad de gobernar con el PP. El PRC debe sobrevivir y mirar por su futuro. Estábamos acostumbrados al éxito, pero nos hemos dado un batacazo y debemos asumir que la idea preconcebida que teníamos antes de la noche electoral no era la realidad. Tenemos que levantarnos y ver cómo reaccionamos como partido».

Al contrario que en otras formaciones, no es habitual escuchar este tipo de voces críticas en el PRC. Hoy mismo, el núcleo fuerte del organigrama ya había tocado a rebato y prietas las filas. La dirección regionalista emplazó cualquier valoración a la Ejecutiva convocada para mañana, jueves. Una cita, en la sede del partido, que promete ser una de las más trascendentales de la historia reciente del PRC. No se trata solo de que sus 61 miembros analicen las causas del hundimiento electoral y hagan autocrítica de los fallos, lo más relevante será decidir los próximos pasos, porque de ellos dependerá la supervivencia del PRC. Serán una reunión clave para ver en qué se convierte este partido en la era postRevilla, pese a que el fundador y todavía presidente de Cantabria no esté pensando en la jubilación y comience la legislatura como líder de la oposición, algo que ya ocurrió en 2011 cuando el PP de Ignacio Diego ganó por mayoría absoluta y rompió la hegemonía del bipartito en el Gobierno.

Los tres vicesecretarios del PRC, Paula Fernández, Javier Marcano y Guillermo Blanco, emplazaron cualquier valoración a una Ejecutiva que «será larga y seguro que dará buenos frutos, ahí haremos los análisis y tomaremos decisiones». En los municipios, otros pesos pesados del partido siguieron la misma línea, pero dejando entrever por dónde puede ir su valoración. Por ejemplo, Óscar Villegas, alcalde de Puente Viesgo con autoridad, ha hablado con otros regidores regionalistas que coinciden en la necesidad de «olvidarse de los sillones y buscar lo mejor para que el PRC sobreviva». Rosa Díaz, alcaldesa de Polanco y diputada, también cree que estos debates deben hacerse internamente: «Tenemos que hablar de nuestros errores, ver dónde hemos fallado y corregirlo».

Teresa Noceda, regidora de Comillas, diputada y una de las voces autorizadas dentro del partido, sí reconoció que Pablo Diestro se adelantó al dar su opinión sobre un posible pacto con el PP. «Debemos esperar a la Ejecutiva para asumir lo que ha pasado y decidir entre todos lo que vamos a hacer». Aunque el alcalde de Reocín también tiene apoyos en el entorno municipal, como el secretario general del PRC de Piélagos, Alfredo Rodríguez: «Tiene toda la razón. Hay que pensar en los ayuntamientos y en que se va a producir un cambio de siglas a nivel nacional». Otros, como el de Torrelavega, Javier López Estrada, fue más cauto y recordó que Revilla «ha demostrado los últimos 40 años que es el que más sabe de política de todos nosotros, debemos tener respeto máximo por sus declaraciones».

El adelanto electoral anunciado por Pedro Sánchez obligará al PRC a tomar otra decisión para la que contaba con más tiempo. Todavía con la herida sangrando por los resultados autonómicos, el regionalismo deberá decidir qué hacer en los comicios nacionales. Y existe una corriente muy fuerte en el partido que piensa que no es el mejor momento para meterse en otra carrera electoral con pocas perspectivas de éxito. Si se toma esa decisión en la Ejecutiva de mañana, supondría que José María Mazón, primer diputado en el Congreso de la historia del PRC, no disputaría su escaño el próximo 23 de julio.

«El adelanto electoral es una dimisión anticipada de Pedro Sánchez. Sabe que va a perder ahora o después. Lo adelanta por ahorrarse el sufrimiento de varios meses de presiones», explicó Revilla.