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s Los datos estadísticos acerca de las diligencias previas incoadas durante 2021 en el ámbito penal indican que se ha vuelto a la normalidad perdida el año anterior (2020) -en el que se notó un descenso del 18% en las incoaciones-, recuperando un 14,7%, ... y acercándose a cifras prepandemia en las que las oscilaciones tenían poca trascendencia.
Según recoge la memoria de la Fiscalía cántabra, las cifras que ofrecen el conjunto de los procedimientos indican que, con excepción de los jurados, se ha producido un ascenso, en conjunto, de un 14,3%, que lo sitúa en cifras cercanas a las del año 2019. «El ascenso ha supuesto, el ya mencionado 14,7% en las diligencias previas, un 23,4% de diligencias urgentes, un 12,9% de procedimientos abreviados, un 20,6% en los delitos leves y un 70% en los sumarios, habiendo disminuido, tan solo los jurados en un 28,6%».
La fiscal superior, Pilar Jiménez, resalta en su informe que si es importante conocer el número de diligencias incoadas, no lo es menos saber su destino, y por ello es conveniente analizar cuál ha sido la resolución que ha puesto fin a las 18.514 causas, incrementadas con las 1.245 pendientes del año anterior.
Así, 8.540 asuntos se sobreseyeron provisionalmente, 1.987 se archivaron con carácter definitivo, 3.902 se finalizaciones por acumulación/inhibición, 1.119 fueron declarados delitos leves, 1.485 se transformaron en procedimiento abreviado, 275 se convirtieron en diligencias urgentes, 33 dieron lugar a la incoación de sumario, 4 fueron transformadas a procedimiento de Ley de Jurado y 2.488 han quedado pendientes al finalizar el año.
El segundo dato que debe extraerse, según la Fiscalía, del detallado destino de las diligencias previas es el referido a la pendencia. Frente al descenso de 2020, en un 19,1%, el año pasado el aumento de la pendencia creció en un 99%, un dato «muy preocupante». «Aun siendo cierto que a lo largo del año pasado se ha incrementado el número de incoaciones y se ha priorizado celebrar los juicios pendientes, la cifra de pendencia es alarmante y nos obliga a tratar de revertirla lo antes posible».
En el caso de los procedimientos abreviados, la fiscal superior también señala que la pendencia, que creció un 2,5% frente al 17% del 2020, «sigue representando un dato negativo, que exigirá atención en este año para conseguir revertirlo».
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