La CEOE echa en falta un plan estratégico: «Tenemos que decidir qué turismo queremos»

El presidente de la patronal echa en falta proyectos estratégicos que estén enfocados al turismo, más allá de algunas campañas que llevan a cabo los ayuntamientos y la que ha puesto en marcha el Gobierno regional a finales de septiembre con descuentos de hasta el 70% en la compra de entradas a las principales instalaciones turísticas y culturales por pernoctar en los alojamientos de la comunidad autónoma entre el 25 de septiembre y el 5 de noviembre.

Pero Conde va más allá en su reivindicación. Entiende que el turismo que llega a Cantabria no está compensado porque el mayor volumen se lo lleva la costa, en detrimento del interior, donde «realmente no se ve tan reflejado ese aumento de visitantes que estamos registrando este año».

En este sentido, apunta que ese «sobredimensionamiento» de la costa conlleva problemas de asistencia sanitaria, como los ocurridos este verano. Y es que tanto en el Hospital de Laredo, en la comarca oriental, como en el de Valdecilla, en Santander, se han visto desbordados al sumarse a las vacaciones y las bajas del personal sanitario, la gran afluencia de turistas en los meses de julio y agosto.

«Lo que no está es organizado, porque no responde a una pauta. No hemos decidido que turismo queremos que llegue», afirma el presidente de la patronal cántabra.

Sin querer aventurarse a dar un dato concreto sobre ese incremento de ingresos en los negocios de restauración y alojamiento de la región, Conde estima que el porcentaje de ese crecimiento es similar al del año pasado. «El verano pasado fue histórico, pero este ha sido mejor. No tengo una cifra concreta».

En cualquier caso, cree que se dan las condiciones para conseguir el tan deseado objetivo de la desestacionalización del turismo. «Estamos detrás de ello desde hace tiempo. Pero esto hay que organizarlo porque te descompensa la región. Está muy enfocado en la costa», insiste.

Según señala el presidente de los empresarios, Cantabria tiene dos problemas: las desestacionalización y el despoblamiento. «Los valles tienen que estar atendidos y necesitan más medios. No lo estamos viendo. El propio turista sabe que esto está descompensado». En este sentido, Conde apunta que el verano está completo en Cantabria. «Las pernoctaciones son casi del 100%. Lo que llega sobredimensiona». «No hay política en Cantabria relacionada con este asunto y con qué es lo que queremos y que turismo queremos. Eso es lo que tiene que trabajar el Gobierno con el mundo empresarial».

Por otro lado, Conde apunta a otro de los problemas que está provocando esa masiva llegada de turistas a Cantabria como es la proliferación de pisos turísticos que son ilegales. «Es inentendible. Si están publicados es fácil ir a por ellos».

Este asunto también inquieta a la Asociación de Turismo Rural, que el pasado mes de septiembre presentó ante la Consejería de Turismo al menos 300 denuncias por inmuebles «que se anuncian de manera ilegal» en internet. «La Administración no multa, no inspecciona y no actúa si no hay una denuncia previa. Pues la va a haber porque la vamos a poner nosotros», advirtió entonces Jesús Blanco, presidente de este colectivo.

En Cantabria existen unos 10.000 inmuebles que obtienen rentabilidad con este negocio en auge «y solo el 16% están legales», cuenta Javier Bedia, presidente de la Asociación de Hostelería de Cantabria.