Uno de cada cien jóvenes que se infecta acaba en el hospital «con complicaciones graves»

Sólo por pura estadística, era cuestión de tiempo que la oleada de contagios juveniles llegara al hospital, aunque por el momento la proporción es inferior a otras ondas por el descenso en la edad del perfil medio, donde es menos frecuente también la presencia de patologías de riesgo añadidas. «Ingresan menos, porque la incidencia está disparada en gente mucho más joven -si antes llegamos al 10%, ahora gira en torno al 3% de los infectados-, pero el que ingresa lo hace igual de grave que antes. La enfermedad por covid no ha variado, se sigue comportando con la misma gravedad», destacan desde la Dirección de Valdecilla. Allí, casi la mitad de los pacientes afectados por este último rebrote de la pandemia tiene menos de 40 años.

Como ejemplo, ayer contaba con cuatro casos de veinteañeros -una joven sin patologías previas acababa de entrar en la Unidad de Cuidados Intensivos- y una decena de entre 30 y 40 años. Según los datos que maneja la Dirección de Salud Pública, que analiza el impacto por grupos de edad, en estos momentos uno de cada cien infectados por debajo de los 30 años acaba en el hospital «con complicaciones graves», tal y como puntualizan fuentes médicas. «El 80% de los ingresados presenta una neumonía. Y el 10% de nuestros pacientes tiene que ser atendido en la UCI». En este sentido, el balance matinal apuntaba tres enfermos críticos, pero a mediodía eran ya cuatro.

Aunque el alto nivel de contagio en la calle está demostrando la efectividad de la vacuna -si no fuera por ella, los hospitales ya estarían colapsados por covid-, los médicos recuerdan que la protección no es del 100%.

«En el mejor de los casos, cubren un 90%, y hay que tener en cuenta que hay personas que bien porque tienen patologías de base o porque padecen algún trastorno de su propio sistema inmunitario, que reduce su respuesta ante una posible infección, pueden enfermar gravemente», explican desde Valdecilla. Una idea en la que ha insistido el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, en sus últimas intervenciones: «El objetivo es evitar la transmisión del virus para que no acabe afectando a los más vulnerables», a los que les puede costar la vida.

El porcentaje de ingresados entre los positivos en estas tres últimas semanas llega al 31% en los mayores de 80 años y al 23%, entre los de 60 a 79 años, donde los contagios han sido escasos. En ese grupo se incluyen también muchos de los que aún no tienen la pauta completa de la vacuna, que están protegidos en parte.

A medida que desciende la edad, la proporción de complicaciones es menor y el volumen de asintomáticos mucho mayor, pero los datos indican que seis de cada cien infectados de entre 50 a 59 años acaba en el hospital. Y lo mismo ocurre con el grupo de 40 a 49 años, siendo algo menor el porcentaje (5,6%) si hablamos de treinteañeros. «Lo que tiene que preocupar es que es gente que carece de otras patologías, pero a los que el virus pone en una situación comprometida», señalan desde el hospital. Desde la Unidad de Cuidados Intensivos ya habían advertido en el contexto de la cuarta ola que «se estaban atendiendo cuadros muy complicados en gente muy joven, que en olas anteriores no se veían». Pero el virus se ido desplazando allí donde no ha encontrado barreras, propagándose de forma exponencial entre los jóvenes.

Y es ahí donde los expertos alertan de otra cuestión de «incertidumbre»: el impacto a largo plazo de esta avalancha de infecciones juveniles. «El covid persistente, presente en un 10% de los casos, les va a afectar también. No se sabe en qué medida, porque no hay análisis por tramos de edad, pero hay que tener en cuenta la posibilidad de estas secuelas, que incluyen cansancio y deterioro cognitivo».

• Temas
• Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de Cantabria
• Hospital Universitario de Marqués de Valdecilla
• Miguel Rodríguez
• Covid-19
• Alerta sanitaria
• Coronavirus
• Nueva normalidad (coronavirus Covid-19)