Estas son las cinco noticias del día en Cantabria

Un total de 25 trabajadores de la empresa de servicio público Tragsa rastrea las playas de Cantabria divididos en cuatro equipos, dos en la zona central, uno en la costa occidental y el último en el litoral oriental. Además, los técnicos del Gobierno inspeccionan el resto de arenales para comprobar si siguen llegando esas bolitas blancas que tienen en vilo a Galicia, Asturias y ahora también Vizcaya. Toda la información aquí.

Un camión ha perdido el control este miércoles, sobre las nueve de la mañana, en el túnel de Gedo, en la A-67 (Autovía de la Meseta) a la altura de Los Corrales de Buelna y en dirección a Reinosa, y ha chocado contra la maquinaria y las barreras de seguridad de hormigón (barrera New Jersey) de las obras de estabilización y mejora de los túneles de la autovía que une Cantabria y Castilla y León, en marcha desde hace meses para adaptar las estructuras a la normativa europea vigente. El vehículo, que transportaba cartones, ha quedado «semivolcado» en una de las paredes del túnel después de sobrepasar el perímetro de seguridad de la obra. Toda la información aquí.

La imágenes parecen sacadas de un película de acción, pero nada tienen que ver con la ficción. En un vídeo publicado en redes sociales que se está viralizando, se aprecia cómo un joven se lanza a la ría del Asón, a plena luz del día, desde el techo de un coche (un Seat León familiar) que circula por el viaducto de Colindres en dirección a Bilbao. Toda la información.

Un amplio dispositivo encabezado por la Policía Nacional y el servicio de emergencias del Gobierno de Cantabria (112) está buscando a un vecino de Nueva Ciudad (Torrelavega), Fidel Morante Gómez, que desapareció el pasado sábado. El hombre, de 82 años y con principios de demencia, no volvió a su domicilio a la hora prevista y su familia dio la voz de alarma. Toda la información.

Tiene aún la mirada perdida de quien no es capaz de procesar las imágenes que le llegan a su cabeza. Le cuesta. Se le nota, aunque lo intenta disimular. Tiene entereza por resignación y todavía se recupera de las colmilladas de entre cinco y diez centímetros que recibió en ambos brazos y en la pierna izquierda. El terror psicológico está ahí y se cuela cada noche en forma de pesadillas. Casi le cuesta la vida. «Me salvó mi novia», dice. Su perro Paco, un carlino negro de unos diez kilos, no sobrevivió al ataque. Este hombre de 32 años, vecino de Camargo pueblo, fue una de las tres personas a las que un mastín cruce con dogo argentino atacó violentamente el día después de Navidad en la zona de la mies próxima a su casa. «Vino a por mí. No fue un asunto de perro contra perro. Salió de la finca y se abalanzó contra mí sin que pudiera evitarlo», describe. Toda la información aquí.

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