Gasto público en educación, ratios de alumnos por profesor en las distintas etapas formativas, educación infantil tasa de abandono escolar y de graduación en Educación Secundaria, competencias digitales... Los principales indicadores de la calidad del sistema educativo sitúan al de Cantabria como uno de los ... mejores del panorama nacional. Una posición privilegiada que no es casual, sino «fruto del trabajo de muchas personas y administraciones», tal y como señaló el nuevo consejero del área, Sergio Silva, en su primera entrevista a El Diario Montañés.
Pero en una sociedad en constante evolución marcada por transformaciones tan rápidas como disruptivas, mantener y consolidar esa posición plantea retos de gran calado que afectan a todos los implicados en el propio sistema educativo, desde las Administraciones Públicas como el cuerpo docente, las familias y, por supuesto, los propios alumnos.
El reto demográfico, la aplicación de la Lomloe, la atención y orientación a la diversidad, el escenario digital, la financiación del sistema o la convivencia escolar son algunos de los más destacados, pero hay muchos más: la escuela rural, las competencias lingüísticas, la nueva EBAU, la Formación Profesional... La lista es ingente, y su abordaje fundamental para garantizar que los alumnos cántabros puedan continuar formándose en uno de los sistema más punteros de España.
El Diario Montañés confronta la visión de los principales actores de la educación cántabra para retratar sus objetvos y aspiraciones, desde la institucionales, expresados por el consejero Sergio Silva, y la de las familias, planteadas por José Manuel Torre, presidente de FAPA Cantabria, hasta los de los propios profesores, representados por Diego San Gabriel, secretario de STEC, y Ruth Trueba, presidenta de ANPE, los dos principales sindicatos docentes de la región.
Situación de la educación en Cantabria
Sergio Silva, consejero de Educación
«Pese a todos estos retos –el demográfico, el de la orientación y atención a la diversidad, el de legalidad de la LOMLOE, el de la FP– tenemos un buen sistema educativo, una buena estructura orgánica y una buena estructura programática. Ahí están los datos que da el Ministerio cada año, o los informes sectoriales, o los de asociaciones no públicas como la Asociación Civil para la Educación y su informe SociEducación, que sitúa a Cantabria en el primer rango de calidad en España».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
«Estamos en el buen camino pero tiene que seguir implementándose. Entendemos que Cantabria cuenta con un buen sistema educativo fruto del trabajo de muchos profesionales y colectivos, pero que debe ser mejorando porque cada vez es mayor la exigencia y la preparación que se requiere al personal docente».
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«En términos generales está bien pero no podemos obviar que en la última legislatura, desde nuestro punto de vista, ha habido una cierta parálisis. No ha habido los avances necesarios con la excepción del acuerdo para la bajada de las ratios máximas, que fue positivo. Sin embargo, después requiere de una extensión más ambiciosa».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«La situación es buena pero creemos que quedan muchos puntos por pulir. En muchos casos no son estrictamente educativos, pero al final todo afecta al funcionamiento del sistema y a sus resultados».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Como señaló María José Sánez de Buruaga con motivo del inicio del curso, tenemos el comprometió de elevar la financiación del sistema educativo como mínimo al 5% del PIB regional para equipararla a la media europea. También vamos a destinar este curso 2,8 millones de euros para universalizar el modelo de banco de recursos educativos gratuitos para la enseñanza básica y extenderlo a Bachillerato y FP de Grado Medio.
Otro de los objetivos con el que nos hemos comprometido en materia de financiación es el de la renovación y mejora de los centros educativos, apartado en el que se están desarrollando en torno a 60 obras que implican una inversión que supera los 3,5 millones de euros».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
«Tenemos un gasto público en educación de casi un 4,5% del PIB regional, y lo que establece la Lomloe es que se debe destinar al menos el 5%. Por eso instamos al consejero a apostar por la educación cántabra y aumentar ese gasto. Queremos que ese compromiso se concrete y se materialice de cara a los presupuestos del año que viene».
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«En STEC formamos parte del Pacto por la Educación, que se marcó el objetivo de llegar al 5%. La clave de esta financiación radica en a qué se dedican esos fondos y cuáles son las prioridades de la Consejería. Están hablando de becar a alumnos en los concertados para que puedan hacer el Bachillerato en el propio centro concertado. Para nosotros eso es una línea roja. Es importantísimo que el Bachillerato siga siendo público porque entendemos que es positivo para el alumnado conocer realidades diversas y porque el Bachillerato privado concertado supone un cierto fraude.
Por eso nos centramos en las prioridades de esa financiación. El consejero tiene muy buen talante, pero a veces no se puede nadar entre dos aguas. Tienes que decidir».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Hay carencias que requieren de esa financiación. Por ejemplo, en lo referente a los bancos de recursos y a los libros y todos los materiales que implica el curso escolar. Las familias seguimos pagando mucho dinero por ello cuando según la Constitución tiene que garantizarse una educación pública y gratuita, y esa educación gratuita no se está dando cuando tenemos que aportar dinero.
Hay centros en los que se destinan cantidades importantes y eso para muchas familias supone un problema. Al final se están creando diferencias entre las familias que se pueden permitir esos gastos y las que no».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Este curso implantamos la Lomloe en los cursos pares. Es un esfuerzo añadido para los centros y el profesorado, como ya lo fue el curso pasado, porque hay que adaptar todas las programaciones y evaluaciones para este nuevo modelo. Por eso pedimos al Ministerio que las decisiones que se tomen se hagan pensando en el alumno, por consenso con los territorios y lo antes posible».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
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Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«La Lomloe corrige las partes más nocivas de la Ley Wert, pero nos hubiera gustado otra ley surgida de abajo hacia arriba, que se nos hubiera consultado mucho más a los docentes. Nos vienen impuestas unas leyes que todavía estamos comprendiendo, porque vienen con unas terminologías y metodologías que muchas veces nos son extrañas.
Los docentes somos quienes mejor conocemos la realidad de las aulas y las necesidades de la educación del día a día. Todavía estamos en esa situación de ajustarnos y adaptarnos a las nueva legislación, que en algunos casos se está haciendo muy difícil».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Los alumnos y las familias estamos viviendo ese proceso con normalidad. No estamos notando un cambio excesivo. Cambiar ciertas cosas cuesta, pero al final estamos hablando de una ley que se aprobó en 2020. Ya va a cumplir tres años y ya ha habido tiempo para ir viendo lo que había que cambiar».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Se suma a la dificultad de aplicar la Lomloe en los cursos pares. Por eso era importante que el Ministerio tomara una decisión rápido. Tenemos que diseñar la EBAU de junio del 2024, que se encuentra en una encrucijada. Tenemos un desarrollo curricular por competencias, derivado de la ley, con un enfoque distinto al que estábamos habituados, y es necesario acomodar la prueba a ese nuevo enfoque curricular pero sin implantar el nuevo modelo de EBAU previsto en esta ley.
Por eso reivindicamos al Ministerio la necesidad de que las decisiones que se tomen se hagan pensando en el alumno, por consenso con los distintos territorios y lo antes posible».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
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Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«Es un modelo muy poco pedagógico. Se nos está diciendo que el aprendizaje ha de ser significativo y la EBAU no deja de ser una prueba ultra memorística que mediatiza gravemente el último curso, Segundo de Bachillerato, en el que más que enseñar enseñamos a hacer la prueba.
La prueba debería tender a un modelo menos memorístico. Pero son aspectos que tampoco se pueden decidir de un año para otro, siendo tan importante para el futuro profesional o para el futuro vital del alumnado».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Es una cuestión muy complicada. Lo que nos preocupa a las familias es que Segundo de Bachillerato no es un curso escolar, sino una academia de preparación de oposiciones para la Ebau. Es algo que empieza a notarse en Primero, pero en Segundo ya es manifiesto, y es bastante triste que sea así.
Debería ser un curso de aprendizaje y la Ebau la prueba en la que se demuestran esos aprendizaje, y no que Segundo de Bachillerato sea el curso en el que te preparas para hacer la prueba».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Ha habido un crecimiento importante de solicitudes que refleja que es una opción no ya de futuro, sino de presente. Hay falta de mano de obra y de perfiles especializados en todos los sectores en general, tal y como nos han trasladado desde distintos sectores. Aquí el reto es dar un marco jurídico nuevo ajustado a la nueva legislación nacional. Es una tarea que va a requerir al menos de uno o dos años, pero ese marco jurídico va a sentar las bases de lo que va a ser la futura FP en España y en Cantabria.
Es un objetivo que no podemos acometer solos. Necesitamos más empresas que se sumen a los proyectos de FP Dual con el nuevo enfoque, y también rediseñar los ciclos y las ofertas de ciclos que tenemos a tenor de esa nueva situación. Es mucho trabajo y lo queremos hacer con las empresas, para lo que ya tenemos agendadas reuniones con la Cámara de Comercio y con otros agentes de los distintos sectores, además de habernos reunido ya con CEOE.
Todo esto tiene que cristalizar en un Plan Regional de FP 2024-2027, para lo que tenemos que trabajar paralelamente para evitar que se consuma la legislatura».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
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Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«Es un reto porque efectivamente puede ser muy útil y favorecer mucho la salida laboral y la formación del alumnado, pero hay que tener cuidado con varios aspectos.
En primer lugar, que no se privatice la propia oferta. Ahora mismo hay déficit de oferta pública porque ya hay nichos ocupados por negocios educativos. Y en segundo lugar nunca perder la perspectiva formativa, es decir, hay que cooperar sí o pensar en la salida al mercado laboral, pero no tenemos que formar en función exclusiva de lo que necesiten las empresas porque hay campos, como la historia o temas sociales, que igual tienen menos interés desde esa perspectiva.
Hay que salvaguardar siempre la función social. Se ha hablado mucho de formar para las empresas pero también hay que formar para la sociedad. Esa es la función principal que tiene que tener la escuela».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«El paro juvenil no es un tema que no vaya a resolver la FP, o por lo menos no solo la FP. Tenemos mucho paro juvenil pero luego nos encontramos que cuando un joven va a una entrevista de trabajo le piden un mínimo de dos años de experiencia y así no va a tener trabajo en ningún lado. En ese sentido tiene que haber cambios profundos en el mercado laboral.
En todo caso, que se apueste por la FP es positivo porque además es una forma de evitar el denominado fracaso escolar. Hay chavales que no se ven en la universidad, y hay profesiones para las que se pueden formar que les pueden interesar más».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Nos comprometemos a una bajada de ratios a lo largo de la Educación Primaria en esta legislatura y estamos trabajando en ello. No tenemos desarrollados los escenarios de cuánto costará pero sí una estimación de en torno a un millón o millón y medio por curso, con lo cual podemos estar hablando de entre 6 y 8 millones de euros en esta legislatura.
Lo que queremos es acompasar esa pérdida de alumnos con esa bajada de ratios, y así hacer de la necesidad virtud. En lugar de cerrar centros vamos a bajar las ratios para mejorar la calidad. En mi opinión el profesor y el número de alumnos por aula son las dos variables más importantes, las que más directamente influyen en la calidad de la enseñanza».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
«La pasada legislatura llegamos a un acuerdo con el PRC para una reducción de la ratio en Educación Infantil, pero debemos aprovechar la bajada de la natalidad para convertir esa bajada de ratio en una realidad en todos los niveles educativos.
En Primaria tenemos el compromiso del consejero de que iba a abordar esa bajada del ratio a 20 alumnos por unidad, y queremos que se adquiera el compromiso de que se va a aplicar en el siguiente curso. En Infantil ya se ha hecho y lo lógico y lo que demandamos es que eso siga en toda la etapa de Primaria. También existe la necesidad de extender esa bajada de ratio al resto de etapas educativas. El ratio este curso es de 25 en Primaria, de un máximo de 30 en Secundaria y de 35 en Bachillerato. Queremos y defendemos que esos ratios bajen en todas las etapas educativas y en la FP.
Esa bajada supone una mejora de la calidad educativa y una mayor atención al alumnado. Estamos en el buen camino pero tiene que seguir implementándose».
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«El acuerdo alcanzado la anterior legislatura fue muy bueno. Afectó el primer año al segundo ciclo de Educación Infantil, acompasándose con la bajada demográfica, por lo que era más fácil de aplicar. Pero esa bajada ha ido avanzando hasta ir asomando en los institutos y sin embargo la intención de la anterior Consejería era extender esa bajada año a año, con lo cual este año empieza en Primero de Primaria cuando el valle demográfico ya está en Primero de la ESO. Por eso pedimos que el avance que se produjo sea más ambicioso en su extensión a todas las etapas.
Hacemos muchas encuestas entre el profesorado, que es muy diverso, y este aspecto es con mucha diferencia el que más consenso suscita. Lo hace tanto para impulsar la mejora de la calidad educativa como para la mejora de las condiciones de trabajo del profesorado. No es lo mismo atender a 30 alumnos diversísimos en un aula que a 20 o a 25 en Secundaria. Ese acuerdo para la bajada de las ratios fue el principal legado de la anterior legislatura pero debe ser más ambicioso».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Es positivo que baje la ratio, pero creemos que también hay más puntos en los que que hay que incidir a nivel económico, porque al final la bajar la radio es una cuestión económica y hay más puntos en los que invertir para mejorar la educación. Por ejemplo, con la bajada de la ratio hay centros en los que se ven privados de espacios que utilizaban para otras funciones y que no pueden utilizar porque ahora tienen más aulas. Eso también es una cuestión económica en la que hay que invertir, no solo en bajar el ratio.
Una de ellas es mejorar la situación y aumentar y mejorar las infraestructuras, porque hay muchos centros que están completamente obsoletos y necesitan una puesta a punto. En resumen, estamos totalmente de acuerdo con bajar la radio, pero recalcamos que no se trata solo de bajar rápido para mejorar las condiciones. Si los alumnos tienen una atención más personalizada pero están muertos de frío en clase, la atención que van a prestar es peor».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Dentro de nuestro objetivo de potenciar y consolidar la calidad educativa se encuadra dar un nuevo enfoque a la escuela rural con sus factores diferenciadores. Queremos llegar a plantear con el resto de fuerzas políticas del arco parlamentario la conveniencia de hacer una Ley de Escuelas Rurales en Cantabria.
La escuela rural forma parte del ADN de la educación en Cantabria porque tenemos un 75 u 80% de territorio rural. La idea de este equipo de gobierno, que ya estaba incluida en nuestro programa electoral, es blindar de alguna manera ante las posibles vicisitudes políticas el tratamiento preferencial que ya otorgamos a la escuela rural en una ley, con una consignación presupuestaria estable.
Lo que ahora está regulado en una orden que atiende a esa singularidad se eleve a rango de ley para darle una mejor estabilidad».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
«Destacamos la importancia de seguir apostando por la escuela rural, ya que la educación es el eje vertebrador y el que da oportunidades a todos los alumnos vivan donde vivan. Defendemos que esa apuesta debe contemplar recursos a la escuela rural para poder desarrollar de la mejor forma la estrategia educativa. Hay que dotar de verdad a la escuela rural y hacerla atractiva para que los docentes de Cantabria puedan ofrecer una atención de calidad en este entorno».
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«Para STEC la escuela rural es importantísima y hemos peleado mucho por ella durante la última legislatura. El éxito de este periodo ha sido que hemos conseguido frenar el cierre de escuelas rurales. En los últimos 35 años se habían cerrado en Cantabria más de 50 escuelas rurales. Tampoco se ha reabierto ninguna, que era nuestro otro objetivo. Esto es muy importante porque la escuela tiene una función educativa y social para el entorno rural fundamental.
También es importantísimo dotar bien de recursos a la escuela rural y abrirla a su comunidad porque son instalaciones que aportan mucho por sus pistas deportivas, sus salones de actos. El mundo rural anda muy necesitado de infraestructuras y su sociedad puede beneficiarse mucho de esa apertura.
TAmbién reivindicamos la importancia de los servicios que se ofrecen, especialmente del transmporte rural. Porque sin ellos no se estará garantizando la igualdad de oportunidades a los alumnos».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«La escuela rural es fundamental para que los núcleos rurales no mueran. Un pueblo que pierde la escuela está condenado. La población envejece y una familia joven no se va a un pueblo a vivir si no hay una escuela en ese pueblo o muy cercana.
Por eso entendemos que lo que es importante es la inversión. Eso no solo requiere profesorado, sino también otros factores como el comedor o el transporte escolar, que permitan que las familias que están en los pueblos se queden».
Sergio Silva, consejero de Educación
«El aumento de alumnos con necesidades de apoyo educativo es una tendencia consolidada y un tema que nos preocupa mucho en esta legislatura. Queremos reforzar y hacer más operativa la estructura de atención a la diversidad en Cantabria a través del establecimiento de unos criterios objetivos, concentrados en un plan director de la orientación y atención a la diversidad en Cantabria.
Esa herramienta nos va a permitir tener una mayor claridad en esos criterios, tener más estabilidad y tomar decisiones encaminadas a dar sostenibilidad al sistema».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«La educación cada vez tiende a reconocer y a trabajar de forma más específica con esta diversidad. En la anterior legislatura se produjo un retroceso gravísimo con la privatización de la orientación en las escuelas concertadas. Esta labor de orientación venían haciéndola equipos públicos de orientación, que son equipos que atienden mucho mejor porque tienen una diversidad de profesionales y tienen un rango de acción comarcal.
Desde un equipo multidisciplinar y plural se atiende mucho mejor a la diversidad que existe que con un único orientador. Esta nueva Administración nos ha dicho que va a frenar esta tendencia, comprometida por la Consejería regionalista a estos centros privados concertados, porque no comparte este modelo. Afirman que prefieren el modelo de los Equipos de Orientación públicos».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Cada vez hay más casos y lo que está claro es que hay que buscar una integración dentro del aula. No una separación, no recurrir rápidamente a sacar al alumnado del aula. Se trata sencillamente de poner más recursos para que haya una buena integración posible y para eso se necesita más medios humanos y materiales, y también formación para el propio profesorado, para que sepa cómo afrontar esas situaciones».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Queremos avanzar en el enfoque digital, un área en la que cambiar respecto a lo que se ha hecho. No estamos tan enfocados en dotar de equipamiento a los centros como en hacer un repositorio de recursos digitales para que los profesores los usen con facilidad en el aula».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
«Es un tema en el que deben seguir trabajando desde la Consejería, y estamos a la expectativa de las propuestas que nos hagan para avanzar en este ámbito. Es un proceso que es mejorable, creemos que los recursos que se están asignando a los centros deben responder a una planificación y que es algo que debe hacerse con una mayor coordinación. También demandamos una estrategia que determine cómo esto se va a traducir en las aulas y en la docencia.
Estaremos atentos a que este proceso suponga una digitalización y una mejora de las competencias digitales reales en los centros educativos y entre el alumnado».
Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«Con la pandemia sobrevino la necesidad de avanzar mucho en la competencia digital, sobre todo entre los docentes de mayor edad que tuvieron que hacer un gran esfuerzo. Es un aspecto en el que se ha avanzado muchísimo.
Se hubiera agradecido un acompañamiento y un asesoramiento más cercano desde la Administración Pública. Se ha forzado el cumplimento del requisito europeo de un certificado de competencia digital docente a través de un curso exprés que fue una gran presión añadida para el profesorado y que generó un gran rechazo por la forma en que se planteó.
Al cuerpo docente se le está exigiendo este esfuerzo y defendemos que también tiene que ir acompañado de una adecuación salarial y horaria. Dedicamos muchísimas horas a preparar las clases y a formarnos que no siempre se reconocen».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«El uso de medios digitales tiene un potencial tremendo, pero al final como todo hay que aprender a utilizarlo y aprovecharlo. Por ejemplo, en el tema de los libros es una cuestión muy importante por el ahorro que puede que puede suponer
Este es un tema que también implica una dotación de medios. El uso de medios digitales requiere que las familias se compren un ordenador o una tablet, y ahí también se están generando diferencias porque hay familias que no pueden permitirse hacerlo.
Hubo una inversión fuerte en época de pandemia, pero a día de hoy se ha ralentizado un poco y eso tiene consecuencias, como el tema de las tareas que se mandan para casa. Hay muchos alumnos que están haciendo las tareas a través de un móvil, y no es el dispositivo más adecuado para ello».
Sergio Silva, consejero de Educación
«Mi principal preocupación, como ya dije en mi primera entrevista en El Diario Montañés, es la pérdida de alumnado en los tramos de entrada al sistema educativo por la baja natalidad. Hemos perdido más o menos el 20% del alumnado de Infantil y Primaria en los últimos 5 o 10 años. Es una tendencia y tenemos que adaptarnos a ella, pero eso no va a suponer que se cierren unidades escolares.
Es una situación consolidada y ese valle de pérdida de alumnos que ahora tenemos en esas etapas llegará a Secundaria y Bachillerato. Por eso hay que proyectar y planificarse.
Al mismo tiempo, y aunque pueda resultar contradictorio, estamos aumentando el número de aulas en educación de un año. Tenemos un proceso ya en marcha a nivel nacional de primer ciclo de aulas de un año en Educación Infantil, y lo vamos a mantener para intentar llegar a un horizonte de 50 aulas de un año en 2025.
Es un esfuerzo logístico e inversor que ya estaba en marcha pero que nosotros vamos a intensificar y aterrizar. Este curso lanzamos en torno a 27 aulas de un año, la mayoría de las cuales ya estamos poniendo en marcha».
Ruth Trueba, presidenta del sindicate ANPE
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Diego San Gabriel, miembro del sindicato STEC
«En Cantabria tenemos un modelo puntero a nivel europeo en las aulas de dos años, que cuentan con maestra a jornada completa y Técnico Superior de Educación Infantil. En las aulas de un año, sin embargo, recortaron media jornada laboral de la maestra, por lo que hay una técnico y una maestra a media jornada y eso es un déficit. La nueva ley define esa etapa ya como educativa y por ello es necesario que la maestra esté toda la jornada.
Es la entrada de todo el alumnado al sistema educativo y una etapa formativa de cuya importancia a veces no se es consciente. Se tiene la idea de que consiste simplemente en cuidar a los niños, pero ya es importante en la formación del alumno y cada vez se es más consciente de esta realidad, por lo que hay que seguir avanzando».
José Manuel Torre, presidente de FAPA CAntabria
«Los avances que se han producido son positivos. De momento se ha ido implantando en zonas más desfavorecidas a nivel de población, de infraestructuras o de recursos, donde no había guarderías disponibles para las familias.
En la práctica, a nivel de horarios o de servicios, tampoco ofrecen el mismo servicio que una guardería. A nivel de conciliación puede que se queden un poco más justo para muchas familias».
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