Comienzan las rebajas de verano: «Hemos venido pronto que luego nos quedamos sin nada»

Rocío Jiménez, que llegó con quince minutos de antelación a la puerta, consiguió todo lo que quería. «Me he comprado dos pantalones, una camiseta, un bolso y cuatro camisas, aunque ya lo tenía todo mirado de antes», reconoce. De hecho, el miércoles por la tarde acudió ala establecimiento para saber dónde estaba todo colocado. «Es que luego te quedas sin nada, porque hay muy buenas rebajas». En su caso, ha comenzado la temporada por todo lo alto. Y es que ya compró ayer también por la aplicación. «He arrasado».

Las que este año van a comprar ropa de forma más «comedida» son Sara San Román y Natalia Cruz, dos amigas que iban en busca de «buenas gangas». «No está la economía para mucho. Hay que aprovechar estas épocas porque hasta el precio de una tienda que no era tan cara ya lo es», comenta Sara. «He mirado por la página web varios pantalones pero prefiero venir a la tienda a probármelos porque lo de las tallas es otra historia, según la etiqueta, varían mucho. Venimos pero con moderación», insiste Natalia.

Había tanta gente que, Mabel, optó por salir de Zara y esperar hasta la tarde porque le resultó «agobiante». «He venido a las diez y poco porque tenía fichado un pantalón tipo animal print que está muy de moda. Prefiero esperar y arriesgarme, porque la cola ni te cuento la que gente que había...».

Tradicionalmente las rebajas de verano se asociaban al mes de julio, aunque cada vez se adelantan más. Comienzan en junio e incluso antes, con promociones u ofertas especiales. Por la calle Juan de Herrera, otra zona comercial por excelencia de Santander, había más tranquilidad. Aquí hay tiendas de todo tipo, de grandes marcas o comercios locales, pero casi todas ya mostraban en sus cristaleras el inicio de la temporada de rebajas.