El Consejo de Ministros autoriza hoy el convenio para la integración ferroviaria de Santander

Según el delegado del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, este empuje al proyecto es fruto de las conversaciones mantenidas con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, que se ha comprometido a «adelantar» las inversiones de su departamento en la comunidad autónoma. «El trabajo entre Delegación y Fomento es constante y ágil desde el primer día», apunta Zuloaga, que pone de ejemplo el inicio de las obras del carril de continuidad de la A-67 para acabar con el nudo de Torrelavega o la licitación del acceso al puerto de la capital.

Este convenio completará el firmado hace un año para llevar a cabo la primera fase. Gracias a estos trabajos ya se derribaron los edificios que albergaban las dependencias de ancho métrico al inicio de la calle Castilla y se traspasaron los 1.453 metros cuadrados liberados al Ayuntamiento de Santander para su aprovechamiento urbanístico.

El coste estimado de todas las actuaciones previstas en esta segunda fase asciende a 187 millones de euros (IVA no incluido). Como ya confirmó el exministro Íñigo de la Serna durante la presentación del proyecto, de esta cantidad Adif aportará un total de 137 millones: 87 corresponden a actuaciones en la infraestructura ferroviaria y los 49 restantes al 50% del coste de las actuaciones no estrictamente ferroviarias, necesarias para la urbanización de los terrenos liberados. Por su parte, el Gobierno de Cantabria aportará 29 millones, mientras que el Ayuntamiento pondrá otros 20 en diversas anualidades hasta 2025. El Consistorio autorizó esta misma firma ya en el mes de mayo y desde entonces esperaba noticias desde Madrid.

La actuación consiste en el trasladado de la cabecera de las vías hacia el talud de la calle Alta, con lo que se libera espacio para uso ciudadano (36.186 metros cuadrados) junto a la calle Castilla. Al cubrir las nuevas vías y andenes se consigue una superficie de otros 48.470 metros cuadrados. Comprende también la integración de los servicios de viajeros en una única estación y el baipás de conexión entre las líneas Oviedo-Santander y Bilbao-Santander para suprimir las circulaciones de los trenes que ahora utilizan la estación de Santander para realizar la inversión de la marcha.

Para Zuloaga «Santander y Cantabria necesitan salir de la atonía y colocarse en primera línea de salida hacia la innovación, la investigación y el desarrollo económico», subraya el delegado, quien considera que la autorización de la firma de este convenio va en esta dirección. «Necesitamos el empuje de infraestructuras que ayuden al tejido empresarial a crear más puestos de trabajo y de mejor calidad», concluye el delegado del Gobierno.