Así les hemos contado la segunda jornada de la investidura de Buruaga

Llega la votación

Buruaga hace una lectura positiva del debate y opta por quedarse «con lo que nos une». «No encontrarán demasiados obstáculos para apoyar este proyecto de cambio, porque es un empeño de todos los que estamos aquí. Todos queremos una Cantabria pujante».

La última intervención de María José Sáenz de Buruaga pondrá fin al debate y dará paso a la votación. Recordar que la candidata del PP necesita 18 de los 35 votos para ser investida hoy como presidenta de Cantabria.

El portavoz popular compara a Zuloaga con Rossy de Palma en 'Mujeres al borde de un ataque de nervios«.»

Fernández, a Leticia Díaz: «¿Qué sentido tiene una comisión de investigación en el Parlamento cuando está en el juzgado?»

El portavoz del PP, Íñigo Fernández , sale en defensa de Vox, dice que es «una opción política legítima» y pide «respeto» para todos los partidos tras las duras críticas de Revilla a la formación de Santiago Abascal.

«Este partido es un partido limpio, y lo va a ser siempre», afirma rotundo.

Revilla acusa a Vox de tratar de «intoxicar» con el caso Obras Públicas y reitera que «ningún político aoarece en los papeles del sumario».

El líder regional traslada a Buruaga que «hace bien en no meter a Vox en el Gobierno», tras recordar cómo en el año 1995 el PP también optó por pactar con el PRC y no con la UPCA de Juan Hormaechea lo que posibilitó, según Revilla, «normalizar» la situación política de Cantabria.

Intervención de Revilla

Zuloaga insiste que, «aunque le pese a Buruaga», Cantabria es hoy «una región mejor» y reitera su temor a que el Gobierno del PP recorte los derechos de los ciudadanos.

El líder socialista insiste en la reforma fiscal: «Supondrá una merma de 200 millones de euros», asegura y advierte de la repercusión que tendrán en el estado del bienestar de los cántabros. «Dónde va a recortar», cuestiona a Buruaga. «Sea transparente. Oculta su ideología en ese abrazo permanente con la extrema derecha».

Zuloaga en el estrado.

Díaz insiste en la necesidad de una comisión de investigación sobre el caso de Obras Públicas «y usted ha mirado para otro lado», reprocha la portavoz de Vox a Buruaga. «Está tapando la corrupción», afirma, «y ya tiene encima la sospecha de por qué».

Leticia Díaz confirma que Vox no votará a favor, con lo cual Buruaga no podrá hoy ser investida presidenta y tendrá que esperar al lunes.

Habrá un turno de replica de los diferentes portavoces.

Buruaga finaliza su intervención con palabras de agradecimiento y afecto a sus compañeros del grupo Popular. «Vais a estar a la altura de este desafío. Trabajaremos unidos y para unir».

La candidata resume el acuerdo con el PRC en tres ideas: «No vamos a abandonar nada de lo que estaba en marcha»; «elevaremos la reivindicación ante el Estado y sobre todo, el asunto del lobo», reitera; y «gobernaremos para todos los cántabros».

La candidata del PP deja claro que no hay ninguna petición por parte del PRC de no investigar cualquier atisbo de corrupción y que tampoco lo hubiera admitido, al tiempo que mantiene su mano tendida para seguir alcanzando acuerdos a lo largo de la legislatura.

Buruaga se dirige a Revilla y le agradece la «responsabilidad, los reflejos y la inteligencia» de su partido para permitir el gobierno «monocolor» del PP. «Los dos queríamos lo mismo: la potestad del PP para gobernar en solitario tras los resultados de las elecciones».

Buruaga admite ante Zuloaga que «no me gusta un pacto con Vox», pero tampoco admitirá «lecciones de un partido que ha dejado la gobernabilidad de España en manos de Bildu, de los independentistas catalanes o de los comunistas de Podemos». Y reprocha al líder socialista sus críticas sobre la igualdad cuando el PP tiene a mujeres gobernando el ayuntamiento de Santander, presidiendo el Parlamento y como candidata a la primera mujer que puede ser presidenta de la región.

La candidata insiste en sus críticas al portavoz del PSOE: «Abandone la demagogia, menos impuestos no significa poner en riesgo nuestra sociedad del bienestar». «El balance de su gestión no puede ser peor», remacha Buruaga.

Buruaga se dirige a Zuloaga: «Cómo es posible que sólo tenga ocho escaños con todas las conquistas que usted nos refiere». En opinión de la candidata, los cuatro años de Zuloaga en el Gobierno han sido «de oposición a la oposición, y por eso ahí le han colocado los ciudadanos».

Buruaga alude al caso Obras Públicas y subraya que los cántabros «han votado transparencia, pero no convertirnos en una fiscalía».

«Estar en minoría no significa ingobernabilidad o inestabilidad, salvo que alguno tenga interés en bloquear», subraya Buruaga, que pide a Vox el apoyo a su investidura, porque en caso contrario «votarán con el PSOE o con el PRC. Sean generosos», pide.

Buruaga pregunta a Vox qué parte del programa electoral del PP no comparte. «No vale el todo no», dice a Leticia Díaz. «El cambio son otras políticas, no que ustedes entren en el Gobierno. Ese es el cambio».

María José Sáenz de Buruaga dice que seguirá buscando puntos de encuentro con las diferentes formaciones del Parlamento e insiste en que su interés es mirar al futuro, no hablar «de herencias ni de pasados». «Los ciudadanos ya han hablado y nos han dicho lo que quieren y lo que no quieren», dice en respuesta a la gestión de socialistas y regionalistas. «Y los cántabros han dicho claramente no».

La candidata a presidir la región vuelve a la tribuna para responder a los grupos parlamentarios.

Fernández centra sus críticas en Zuloaga, al que le reprocha la gestión sanitaria, habla de «sectarismo», y recuerda todos los cambios (ceses y dimisiones) que ha habido en el área socialista del Gobierno durante los cuatro años de gestión.

Fernández recrimina a Zuloaga que diga al próximo gobierno con quién puede hablar y con quién no. «Porque ustedes metieron al Gobierno a Podemos, que impulsó la ley del solo sí es sí, han pactado con Bildu y con Otegui», reprocha, aunque deja abierta la vía del diálogo «si ustedes quieren».

Y lo mismo traslada al PRC en asuntos como el lobo, la continuidad del fondo de cooperación con los ayuntamientos, las medidas contra la okupación. «Vamos a ir de la mano cuando vayamos a defender esto», dice Fernández. «Y somos 27», dice, excluyendo de estos posibles acuerdos al PSOE.

Y espera el portavoz del PP que Vox vote a favor de algunas de las propuestas que lleven los populares a la Cámara, como la reforma fiscal, la derogación de la Ley de Memoria Histórica, las medidas de apoyo a las familias. «¿Qué va a hacer usted? Votar a favor, creo yo. Contamos con ustedes»

Fernández niega que exista un cordón sanitario hacia Vox. «Solo hay un acuerdo de investidura y echamos a andar», responde a Leticia  Díaz. «No hay ninguna atadura para la legislatura», insiste en un claro guiño a futuro acuerdos con la formación de Abascal.

El diputado del PP dice que, ahora, toca hablar de futuro y cita la reforma fiscal «para impulsar el crecimiento económico», un nuevo plan industrial, el parque de la salud, la Formación Profesional Dual, la mejora de la sanidad, etc.

Fernández habla de «declive de Cantabria» y argumenta que los ciudadanos ya lo han sancionado en las urnas para desmontar los discursos optimistas de Zuloaga y Revilla sobre la situación de la región. Recuerda los problemas con el lobo, con la okupación, con el servicio de Cercanías, etc.

«La imagen de Cantabria es el envejecimiento de la población, los jóvenes se marchan. Las listas de espera sanitarias, somos los terceros peores de España», argumenta el portavoz popular. «Han estrangulado la sanidad de Cantabria».

Fernández dice que la renta de un ciudadano de Cantabria no ha evolucionado como lo ha hecho en otras comunidades; que el Producto Interior Bruto de la Comunidad ha crecido casi cuatro puntos menos que el de España en los últimos años; que los salarios tampoco han evolucionado al compás de otras regiones. «Hemos ido hacia atrás», resume. «Cantabria va a menos».

Sube al estrado Íñigo Fernández , portavoz del Grupo Popular que inicia su intervención rechazando partes de los discurso de Revilla y Zuloaga.

«¿Va a ser capaz de aguantar?», pregunta Revilla a Buruaga, temeroso de que después de las elecciones generales el PP pacte con Vox en Cantabria. «Y eso no me gustaría. Intente evitarlo. Por parte nuestra no habrá problemas. Gobierne sola, que es mejor que gobernar mal acompañado», finaliza Revilla.

«La gente quiere invertir y va a invertir», asevera Revilla. «Hay un buen ambiente».

Revilla recomienda a Buruaga que sigua la hoja de ruta del bipartito en materia educativa, especialmente en el mundo rural y en la Formación Profesional, y en materia industrial, con proyectos ya en marcha con la ampliación del Pctcan, La Pasiega, el polígono de La Hilera, etc. «Lo tiene usted todo», remacha.

El líder regionalista aplaude el anuncio de la candidata de un contrato programa plurianual que garantice la financiación de la Universidad de Cantabria, institución «clave» para el desarrollo de la comunidad autónomo.

Revilla se refiere a la anunciada reforma fiscal y la pregunta cuánto le va a costar, porque avisa que la falta de ingresos puede provocar recortes o la paralización de algunas inversiones previstas. «No hay fórmula mágica de bajar impuestos y financiar proyectos y subvenciones», subraya.

«Le esperan cuatro años extraordinarios», dice Revilla a Buruaga, «porque está todo en marcha», quien destaca además los positivos datos del paro en la región (9,3% actualmente, frente al 18,15% tras el último dato del PP, y las cifras de la EPA. «Cantabria en materia de paro ha hecho un gran esfuerzo y algo tendrán que ver nuestras políticas»

Revilla agradece el apoyo de Buruaga a la conexión con Bilbao y defiende que Cantabria tendrá dos conexiones con el Corredor Atlántico, a través de la Meseta y con el País Vasco. Respecto al tren con Bilbao, Revilla asegura el proyecto tiene ya el compromiso de Europa, del Gobierno vasco y del Ejecutivo central.

Las condiciones del acuerdo con el PP, dice Revilla, «son de sentido común»: que se respeten las obras en marcha, caso de La Pasiega, el Mupac, la protonterapia y que se reivindiquen las infraestructuras que dependen del Gobierno central como el AVE a Cantabria, las conexiones con Bilbao.