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Ana del Castillo y Laura Fonquernie
Santander
Lunes, 21 de noviembre 2022, 10:13
Cuando la lluvia y el viento se juntan hay un final que se puede anticipar sin miedo a equivocarse: el paraguas terminará roto y quien se animó a abrirlo al salir de casa completamente mojado. Por eso hay gente que renuncia a abrirlo desde un ... principio. Justo eso ocurrió este lunes. Las precipitaciones y las rachas de viento se pusieron de acuerdo. En municipios como Santander se registraron rachas de viento de hasta 95 kilómetros por hora (la máxima en Cantabria) y 25 litros de agua por metro cuadrado, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Es decir, en un día en la ciudad cayó más que en todo el mes de julio cuando la precipitación acumulada se quedó en los 11.2 litros. No obstante, la capital cántabra no fue la estación donde más llovió, la cifra se alcanzó en Tresviso con 40,02 litros. Una cifra que supera el total registrado en el municipio durante todo el mes de julio. En 24 horas hubo más precipitación que en 31 días (27.4 mililitros). Seguido de cerca por Castro Urdiales con 38.1. No obstante, a pesar de la lluvia registrada en los últimos días, el nivel de los ríos de Cantabria se encuentra dentro de valores normales y no hay ninguno que requiera seguimiento.
Eso hoy, pero el temporal de olas, viento y lluvia continúa su curso y, de momento, no se despedirá de Cantabria. Según las previsiones de la Aemet aún faltan tres días para cerrar este capítulo de borrascas y sistemas frontales atlánticos. Así, la región ha arrancado la semana en alerta naranja (riesgo importante) por fenómenos costeros –con olas de hasta siete metros de altura– un aviso que durará hasta las 19.00 horas de este martes. En ese momento pasará a ser amarilla hasta las 00.00 de la noche del miércoles.
También el viento se dejó notar en la comunidad autónoma. Santander fue la estación que registró la mayor racha de viento con 95 kilómetros por hora. Seguido por Reinosa con 93, Castro Urdiales con 89 y Sierrapando, en Torrelavega, con 88 km/h. Por eso, ante la previsión el Ayuntamiento de Santander activó durante la mañana el dispositivo preventivo por fenómenos meteorológicos adversos en la costa que se prolongarán hasta las 22.00 horas del martes. El Consistorio puso en marcha el protocolo para garantizar la seguridad de los ciudadanos y, dado el coeficiente de marea y mientras se mantenga activo el aviso, los servicios de emergencias cerrarán el minizoo de La Magdalena y la avenida de Manuel García Lago permitiendo el acceso a residentes y usuarios del hotel Chiqui.
Lluvia, viento y... Nieve. La estación de esquí de Alto Campoo recibió el sábado la primera nevada. En concreto, se produjo una acumulación de 10 centímetros de espesor en la cota alta y de 5 en la baja. No obstante, la subida de temperaturas registrada del domingo junto con la lluvia caída diluyó la nieve de la zona más baja. Ya durante la mañana de hoy volvió a nevar y la previsión era que la escena se repitiera por la tarde. A pesar de que las lluvias volvieron a diluir la nieve, estas primeras nevadas son positivas de cara a enfriar la tierra y a ayudar a que la próxima nevada puede cuajar más fácil, según informó la consejería de Turismo. Precisamente Alto Campoo registró la temperatura mínima de la jornada con 2.5 grados bajo cero seguido de Camaleño con un grado. Este lunes se ha cerrado al tráfico por la nieve la CA-643 entre La Concha y Valdicío, además del puerto de Lunada.
A pesar de la lluvia registrada en los últimos días, el nivel de los ríos de Cantabria se encuentra dentro de valores normales y no hay ninguno que requiera seguimiento.
Si echamos la vista atrás, tampoco muy lejos, lo justo para analizar lo que ha sido, en lo meteorológico, el fin de semana, vemos cómo el sábado el aeropuerto de Santander acumuló 54,6 litros por metro cuadrado, la cuarta cifra más elevada de todo el país, por detrás de Islas Baleares (62,6), Guipúzcoa (59,9) y Navarra (56). Ese mismo día, las rachas de viento alcanzaron los 77 kilómetros por hora en San Vicente de la Barquera.
¿Y cuál es la previsión? Este martes el litoral cántabro amanecerá en alerta naranja por fenómenos costeros con vientos que pueden alcanzar los 74 kilómetros por hora y olas de hasta 7 metros. El cielo estará nuboso con lluvias y chubascos más probables e intensos durante la segunda mitad del día. El miércoles el aviso será amarillo y, según la Aemet, las nubes seguirán presentes y habrá precipitaciones durante la primera mitad del día, que irán remitiendo por la tarde. Y las temperaturas también irán en ascenso.
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