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Una de las cifras que más preocupa a los sanitarios de cuantas publica en cada informe diario la Consejería de Sanidad es la de enfermos hospitalizados. Precisamente porque es un testigo fidedigno de cuán complicada es la situación de la pandemia en Cantabria. Y aunque ... las cifras de la presión asistencial están muy lejos de acercarse a lo vivido en marzo y abril, sí que conviene atender a los 73 pacientes que a día de hoy precisan una cama en alguno de los cuatro centros hospitalarios importantes de la región. Sobre todo porque son cinco más de los que la necesitaban el sábado: cinco personas más en sólo 24 horas. Además, ocho de ellos permanecen en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Valdecilla.
Es el principal balance del resumen de cifras sobre el impacto de la pandemia en Cantabria publicado este lunes por el Gobierno y que hace referencia a los datos del domingo. Números que cifran en 108 los nuevos positivos detectados ayer, que eleva a 1.720 los cántabros que cursan la infección en estos momentos en la región. Otros 1.647 cumplen cuarentena domiciliaria, muchos de ellos sin síntomas.
La cifra de fallecidos se mantiene en 223desde que perdiera la vida el pasado miércoles la última víctima de la pandemia, un hombre de 86 años que tenía patologías previas. Por suerte continúa aumentando también la cifra de los curados. Son ya 4.660 (el 71% del total).
En el barrio torrelaveguense de La Inmobiliaria la situación se complica. Tras los últimos datos publicados por Sanidad, y a falta de que se conozcan los positivos detectados este domingo, son 138 los contagios detectados en esas calles; aunque desde Salud Pública advierten que no todos pueden circunscribirse al conocido brote que se produjo en un bautizo multitudinario
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha admitido que ve «un relajamiento grande» de las medidas de seguridad frente al Covid, especialmente por parte de «un sector de la población, no la gente mayor», pero ha insistido en que volver a para la economía sería «un desastre mayor que el virus».
Por eso, cree que adoptar nuevos «confinamientos globales» de un determinado territorio o incluso del conjunto del país «es imposible». «Un cierre total en España es completamente imposible, ni aquí ni en ningún país europeo», ha sentenciado el regionalista a preguntas de los periodistas sobre la evolución de la pandemia y la posibilidad de adoptar más restricciones.
A su juicio, lo que hay que hacer es adoptar medidas sobre un núcleo, calle o pueblo cuando se superen los «límites razonables» de contagios, como se viene haciendo desde que se levantó el estado de alarma y se abrió la movilidad en la región, primero en un edificio de Santander, luego en todo el municipio de Santoña y ahora en el barrio La Inmobiliaria de Torrelavega.
«Sanidad es la que marca la pauta», ha contestado en cualquier caso Revilla, para indicar así que el Gobierno que preside (PRC-PSOE) hará «siempre» lo que digan las autoridades sanitarias, que son las que toman las decisiones ante el coronavirus para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
«No vale ir por la calle con una mascarilla y luego sentarse en una mesa, de un metro de diámetro, seis (personas) sin mascarilla. Eso es una bomba», ha considerado Revilla, para quien «si todos lleváramos mascarilla y guardásemos el metro y medio de distancia (de seguridad) nosotros mismos acabaríamos con el coronavirus».
Por ello, aboga por cumplir las medidas y mantener la economía, pues «el desastre es grande» ya y la situación «va a ser terrible en los próximos meses». Y «no podemos seguir indefinidamente con ERTEs y rentas vitales», ha avisado. «Hay que generar economía porque, si no, no hay para pagar lo otro», ha defendido.
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