Buruaga aplaude la «rectificación» del PRC y le da la bienvenida «al sentir mayoritario de Cantabria»

El PP de Cantabria ha «aplaudido», a través de un 'tweet' de su presidenta, María José Sáenz de Buruaga, la «rectificación» del PRC al, finalmente, decidir votar 'no' a la investidura de Pedro Sánchez.

«Te lo dijimos, Revilla, era un grave error apoyar a Sánchez», ha publicado este viernes, sobre las 13.45 horas, Sáenz de Buruaga, a través de su perfil de Twitter.

En esta publicación, Buruaga da la bienvenida a Revilla y a su partido, el PRC, «al sentir mayoritario de Cantabria». «Todo lo que sea evitar este Gobierno es importante para Cantabria y para España», ha concluido su mensaje la líder de los 'populares' en la comunidad y líder de la oposición.

Sáenz de Buruaga ha publicado este mensaje después de que esta mañana el diputado nacional del PP por Cantabria Diego Movellán, miembro también de las Ejecutivas regional y nacional del partido, haya eludido en una rueda de prensa reconocer, pese a las preguntas de los medios de comunicación, que al PP le «gustara» o «agradeciera» al PRC su 'no' a Sánchez.

De hecho, Movellán se limitó a señalar que a los populares «lo que no les gusta» es el acuerdo de Gobierno y el «panorama» que se avecina y tampoco las políticas del Ejecutivo PRC-PSOE en Cantabria.

Para Movellán el «quiebro de última hora» del PRC con su 'no' a la investidura de Pedro Sánchez no se ha acordado pensando en Cantabria ni en España, sino por la «presión social» y por lo que los populares creen que es un intento de «blanquear» la imagen de Miguel Ángel Revilla «tan deteriorada».

Son las primeras valoraciones del diputado del PP por Cantabria, Diego Movellán, tras conocerse el acuerdo de la Ejecutiva del PRC para oponerse a la investidura del líder socialista y la reacción de los socialistas cántabros amenazando con romper el acuerdo regional si ese voto en contra se materializa en el Congreso.

Movellán ha resaltado que la decisión de Revilla se ha hecho pública cuando ya se sabía que el 'no' del PRC era ya irrelevante porque Sánchez ya tenía «amarrada las cuentas» para su investidura gracias a los apoyos expresos y las absteniones de otras formaciones. En su opinión, la decisión de ayer de la Ejecutiva regionalista se produce pensando «exclusivamente» en el propio Revilla, ya que según Movellán, había una presión social que ya se «dejaba sentir en la calle» en contra del líder regionalista por su posible respaldo a la investidura.

En contraposición al «quiebro» del PRC a poco menos de 24 horas del inicio del debate de investidura -que arrancará este sábado, 4 de enero, y concluirá previsiblemente el 7 de enero-, Movellán ha reivindicado que el PP ha estado desde el inicio «donde tenía que estar» y ha sido, en su opinión, «serio», «fiable» y «sin bandazos» en su rechazo al Gobierno «anti-Cantabria y anti-España» de PSOE y Unidas Podemos apoyado por independentistas y nacionalistas.

En la rueda de prensa, Movellán ha advertido que de salir adelante la investidura de Sánchez como presidente del Gobierno «perderá Cantabria y perderá España» y «ganan la izquierda radical, los separatistas, los comunistas y los herederos de ETA».

En opinión del diputado nacional del PP, Sánchez «ha vendido a España con tal de seguir en La Moncloa», aceptando «todos los peajes», la agenda soberanista del PNV, «todas las peticiones históricas del independentismo catalán» y esa «consulta en la que solo votarán los catalanes», además de ese programa con Podemos que, a su juicio, llevará a España «a la ruina económica», «alejando» al país de la senda de crecimiento y económico y del empleo y generando «más gasto» al tener que «repartirse el pastel» y soportar «más sillas que nunca en el Consejo de Ministros».

El diputado por Cantabria del PP ha explicado que su formación política va a decir 'no' a este acuerdo porque -ha dicho- en las elecciones de noviembre «los cántabros dijeron sí a Casado y al PP, y no a Sánchez y a Podemos».

También ha justificado el 'no' porque, según ha dicho, «desde el primer momento» Sánchez decidió firmar un acuerdo con Podemos y hacer a Pablo Iglesias vicepresidente y buscar como socios a los independentistas«, rechanzando «de uno en uno» los «acuerdos de estabilidad» que le ofreció el PP.