CSIF lamenta «la crítica de Diavida a los celadores» y el gerente aclara sus palabras

La llamada a la colaboración lanzada por el gerente de Diavida al Servicio Cántabro de Salud (SCS), para intentar solucionar el problema de los retrasos que acumulan las ambulancias del transporte programado en los hospitales, ha sido interpretada como una crítica directa a los celadores, «cuando no era esa mi intención, ni mucho menos», aclara Antonio Moreno. El sindicato CSIF rechazó ayer «tajantemente» las declaraciones del gerente en las que se refería «a la imposibilidad de asumir en tiempo el gran volumen de altas hospitalarias, y más teniendo en cuenta el tiempo que tardan los celadores en bajar a los pacientes».

Para CSIF, «es intolerable que se desprestigie la profesión de celador de manera tan gratuita». Por eso, exigió a Moreno que «retire estas afirmaciones y no derive su responsabilidad en unos profesionales que no tienen nada que ver y deje de crear un mal clima laboral entre trabajadores que deben esforzarse conjuntamente para que la atención al paciente sea la mejor, incluyendo la movilidad a su residencia».

En respuesta a ese malestar, el gerente de Diavida aclara que sus palabras hacían referencia «a la propia organización interna del hospital, no a los celadores en concreto, que no dejan de ser un eslabón más de la cadena». «Lo que quería transmitir es que necesitamos mayor coordinación y comunicación en la gestión de los pacientes entre los hospitales y Diavida para poder dar el mejor servicio a los cántabros, que es lo que estamos intentando desde el primer día».

Moreno confía en contar con esa colaboración por parte del SCS para complementar así los cambios organizativos que pondrá en marcha a partir de febrero con la idea de «reforzar la disponibilidad de ambulancias» en las horas en las que se concentra el mayor número de salidas de los hospitales. El responsable del transporte sanitario programado, que reconoce las dificultades que han marcado su desembarco en Cantabria, destaca también que, pese a los contratiempos y a la oposición sindical encabezada por UGT, «vamos avanzando con el equipamiento de las bases (aseos, vestuarios, taquillas...), los depósitos, el taller también está preparado, contamos ya con las cinco ambulancias bariátricas y tenemos gran parte de la plantilla que colabora enormemente para que el servicio mejore«.

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