Cultura retira los murales de Emilio Barrero dentro de los trabajos previos del Mupac

A finales del verano se licitaban las obras de rectificación de los servicios de saneamiento y media tensión (por 142.000 euros), concurso que se enmarcaba en los trabajos previos para hacer realidad el proyecto. Y la Consejería de Cultura ha afrontado ya la retirada y, por ende, recuperación de los murales del artista Emilio Barrero, ubicados durante décadas en el cerramiento que rodea el solar de Casimiro Sainz, para su futura reubicación en otra zona de Santander.

Tras la operación de retirada de los murales, Cultura ha procedido a su traslado a la nave que posee en Guarnizo (donde se custodian, entre muchos otros fondos, los de la Colección Norte de arte contemporáneo). Ahora, como confirma el Gobierno cántabro, se abordarán labores de restauración de los murales y se estudiará su reubicación futura en la ciudad.

Emilio Barrero (1932-2015) comenzó a realizar murales cerámicos en los años 80, una vez regresó a España, y afrontó encargos tanto privados como públicos. Destacan las escenas rurales, industriales, marineras y paisajes de sus numerosos murales, situados en Santander y en edificios o locales de Santoña y su entorno. Hasta poco antes de su muerte, Barrero seguía pasando horas y horas en su taller, en el monte de Santoña, modelando alguna de sus esculturas, o pintando, piezas figurativas muy personales y llenas de fuerza y vitalidad. Precisamente este 2022, su familia reivindicó su figura y legado con la apertura de su galería en Gama para mostrar su obra. El artista, tras su regreso a España en los años 80, dedicó gran parte de su labor creativa a la realización de murales cerámicos de gran formato. Ejerció la docencia y fue jefe de área artística de la Escuela Taller de Santoña durante cinco años. Escribió dos libros de poesía y la autobiografía 'Salpicaduras del 36', en la que narra de manera entrañable y cruda todas las vivencias marcados por la Guerra Civil y sus consecuencias.

Plazos

A finales de verano se anunció la licitación de las obras del nuevo Mupac por 52 millones de euros, las cuales podrían comenzar a ejecutarse en los «primeros compases de 2023» con un plazo de ejecución de 30 meses. El vicepresidente del Gobierno y consejero de Cultura, Pablo Zuloaga, ha subrayado en las últimas semanas el cumplimiento de plazos en estos pasos previos a la edificación del futuro museo, que será el gran centro de difusión e investigación del arte rupestre en Cantabria y que aspira a ser referencia en el ámbito nacional e internacional. Tras la aprobación del proyecto de ejecución, la estimación es que las obras puedan comenzar al inicio de 2023. Los trabajos comenzaron en la calle San Vicente de la Barquera con actuaciones complementarias que se ejecutaron en la parcela donde se ubicará la futura infraestructura cultural.

Recientemente se reveló que son seis grandes empresas nacionales las que compiten por la construcción de la nueva sede. Según el calendario previsto, este mes de diciembre se adjudicarán las obras y el 13 de enero se formalizará el contrato de ejecución.