Antonio de los Bueis Güemes | Presidente del Centro de Estudios Montañeses
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Antonio de los Bueis Güemes | Presidente del Centro de Estudios Montañeses
«Daremos a conocer la institución más allá de las fronteras de Santander»Un continente, un país, una comunidad autónoma, no son nada sin su historia y su cultura. Y para proteger y difundir estos dos aspectos, además de su literatura, arte, etnografía y ciencias, se creó en 1934 el Centro de Estudios Montañeses (CEM). A lo largo ... de los años han sido numerosos los ilustres personajes que han dirigido esta entidad sin ánimo de lucro. Desde el pasado mes de abril esta responsabilidad recae sobre Antonio de los Bueis Güemes (Burgos, 1959), doctor en Filosofía, miembro de la Real Sociedad Menéndez Pelayo y profesor del IES Santa Clara en Santander. Habla con pasión y admiración del CEM y considera un «honor» estar al frente de la institución. Llega cargado de proyectos para celebrar sus 90 años de existencia, diseñados para acercar la organización a la sociedad cántabra, más allá de los investigadores y científicos y de las fronteras de Santander.
-¿Qué retos se marca para esta nueva etapa?
-Llevo la mitad de mi vida vinculado al Centro de Estudios Montañeses, al que llegué hace 25 años para preparar mi tesis y me terminé quedando. Lo conozco bien y mi misión es situarlo en el lugar que se merece, ser respetuoso con su legado histórico y velar por su patrimonio documental y cultural. Queremos que los socios se impliquen en los trabajos de investigación. También queremos dar a conocer la institución más allá de las fronteras de Santander, llevando algún acto a distintas localidades de Cantabria. Por primera vez en la historia del CEM, organizaremos una exposición, a partir de septiembre, en la Biblioteca Central, en la que explicaremos qué se ha hecho en estos 90 años de trayectoria. Otro punto importante será dar entrada a los jóvenes. La renovación es esencial para seguir existiendo. Tampoco me olvido de las obras necesarias para mejorar las instalaciones, situadas en la tercera planta del edificio del Ateneo de Santander. Además, tenemos que esforzarnos en ofrecer una mejor comunicación a través de las redes sociales.
-¿Cree que la sociedad cántabra valora lo suficiente este centro?
-Mi impresión es que se conoce poco. Sí se está al tanto en los círculos académicos y profesionales. Quizá lo que más eco tenga sea la revista 'Altamira', pero el gran público no conoce nuestro trabajo y la gran aportación a la sociedad. Espero que la exposición que se inaugura en septiembre ayude a valorar nuestra historia. No obstante, el ser conocidos no es un objetivo prioritario para nosotros, consideramos más importante la investigación y las publicaciones del CEM.
-Usted defiende la apertura a la sociedad de la institución, pero manteniendo su esencia e identidad.
-La institución no es un centro para el gran público, no es un centro social para pasar el rato. Es un centro de estudio e investigación histórica sobre Cantabria. Aquí pueden venir como invitados a una conferencia, a consultar algún libro o documento, o bien a efectuar alguna pregunta relacionada con la historia, el arte, el patrimonio, la etnografía, la literatura, etcétera, de la región.
-¿Cómo ve la situación de Cantabria y la dedicación de los sucesivos gobiernos a la cultura y la historia?
-Esta es una institución sin ánimo de lucro y necesitamos que se nos apoye. Lo cierto es que estoy contento con la colaboración de las administraciones (Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento de Santander), pues gracias a ellas nos mantenemos a flote. Para ello también contamos con las aportaciones de nuestros 130 socios, 100 de número y 30 miembros correspondientes de Europa o Hispanoamérica.
-¿Disponen de algún medio de difusión digital?
-Nuestra página web, considerada por la Confederación Española de Centros de Estudios Locales la mejor de cuantas tienen abiertos los diversos institutos que la integran. Es muy consultada desde muchos puntos del mundo, especialmente España e Hispanoamérica, como es lógico. En ella están colgados íntegramente todos los libros (alrededor de 200) que el centro ha publicado y la totalidad de los ejemplares (hasta ahora 93) de la revista 'Altamira'.
-El Centro subsiste fundamentalmente gracias a las aportaciones económicas del Gobierno de Cantabria. En compensación, ¿qué le ofrece la asociación?
-El CEM es desde 1934 cronista oficial de la provincia por decisión de la antigua Diputación Provincial. También, desde 1990, es entidad consultiva del Gobierno de Cantabria para la historia y el patrimonio de la región, por lo que es requerida para emitir informes cada vez que se pretende declarar determinado edificio, objeto mueble o tradición inmaterial Bien de Interés Cultural, Local o Inventariado. Asimismo, el Gobierno nombró al Centro asesor heráldico o rey de armas de las entidades locales mayores y menores de la región en el año 1995, y por ello ha sido esta asociación la que ha elaborado casi todos los escudos y banderas de los ayuntamientos.
-¿Existen en otras comunidades autónomas centros de similares características a este?
-Sí, son abundantes los institutos, centros o academias que existen en España con similares objetivos al nuestro. De hecho, pertenecemos a la Confederación Española de Centros de Estudios Locales, la cual organiza cada año una asamblea, que ha tenido por escenario diversas ciudades. En Santander se celebró la de 1998.
-¿Qué proyectos tiene el centro durante este año?
-Durante 2024 celebramos nuestro 90 aniversario y por ello acabamos de realizar un ciclo de tres conferencias en el Parlamento de Cantabria relativo a nuestra historia. La exposición que tendremos en el último cuatrimestre del año en la Biblioteca Central de Cantabria ayudará, sin duda, a que la sociedad pueda conocer más y mejor la realidad de esta asociación. También estamos preparando la edición de varios libros.
-¿Cómo recogerá la historia el momento cultural de Cantabria?
-Es una pregunta muy difícil. El tiempo tendrá que decirlo. Pero el anillo cultural de Santander, con el Centro Botín y los futuros Foro Santander y el Centro Asociado Reina Sofía-Archivo Lafuente, más su rico patrimonio prehistórico, se recordará en un futuro. Hay muchas asociaciones culturales que deben ser reconocidas por su labor impagable. El Centro de Estudios Montañeses ya forma parte de la historia y la cultura de Cantabria con casi un siglo de existencia.
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