Una de las novedades es que la restricción afectará a los menores de 18 años escolarizados. En España la escolarización es obligatoria solo entre los seis y los 16 años. En concreto, desde el primer curso de Primaria (EPO) hasta el cuarto y último de Secundaria (ESO), si bien la inmensa mayoría de los menores también acuden a preescolar a partir de los tres años.
El motivo, según dejaron ya entrever el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga, y el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, en su comparecencia de este miércoles, es que se quiere evitar por todos los medios que se mezclen burbujas escolares y deportivas. Es decir, prevenir brotes y cierres de aulas. En consecuencia, la prohibición afectará solo a los escolares y no a todos los menores, lo que por otra parte planteará dificultades y dudas a la hora de aplicar la nueva normativa en una situación siempre difícil y cambiante para cualquier administración.
El texto habla de federados y no federados, de modo que prohibe también a los afectados en el deporte en gimnasios, piscinas y pistas urbanas de fútbol sala y baloncesto. Pero en este caso con la dificultad añadida de no contar con la supervisión federativa y 'solo' con el control policial. Estrictamente, el hecho de ser menor no supondría, de acuerdo con lo informado por el Ejecutivo, motivo de sanción. Tampoco se ha anunciado si se determinará el modo de acceso a recintos como piscinas y gimnasios mientras dure una restricción que nunca será inferior a la quincena.
Nuevo paso
El Gobierno de Cantabria ya había interrumpido todas las competiciones autonómicas de deporte base en Cantabria en lo que resta de 2020, con vistas a decidir ya en 2021 si se reanudaban o se daba la temporada definitivamente por perdida. Sin embargo, hasta ahora se permitía entrenar y practicar deporte de forma no federada.
Ya el pasado viernes por la noche una nueva resolución que entró en vigor el lunes decretaba el cierre de las escuelas municipales y la paralización del deporte no federado, fuera o no competitivo. Y el martes se decidió acotar más esta limitación, en algunos casos interpretables, para prohibir específicamente cualquier entrenamiento o competición, federada o no, para menores de 18 años. La única excepción, aquellas competiciones de categoría nacional que la autonomía no podía aplazar, sin que se haya especificado si con el nuevo estado de alarma es ya competente o no para ello.
El propio consejero confirmó este miércoles la medida, ya adelantada el martes por la mañana por El Diario Montañés, tras detectar «varios brotes» en este ámbito, y su intención de publicarla en el BOC de este miércoles, objetivo que finalmente no pudo cumplir. «No podemos ser ajenos a la evolución de la epidemia», máxime cuando Salud Pública «ha detectado ya varios brotes en relación con el deporte base, por lo que no podemos permanecer ajenos», explicaba Miguel Rodríguez en la sala de prensa de Peña Herbosa, acompañado por el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga.
El propio Zuloaga lo defendía como una «medida necesaria» para paliar el aumento de contagios, también «teniendo en cuenta que la semana que viene es de vacaciones y es importante limitar la movilidad de los hijos para también limitar el aumento del número de contagios, sobre todo en el plano familiar». «Es una decisión que se toma con una perspectiva sanitaria -recalcaba el número dos de Ejecutivo-, y nos toca proteger a los hijos y abuelos».
Eventos a puerta cerrada
En un día intenso, la no publicación de la resolución el día anunciado no fue la única contradicción en el Ejecutivo. Apenas diez horas después de que los propios Zuloaga y Rodríguez anunciaran que no afectaría a los aforos permitidos en los Campos de Sport y El Malecón, el Racing revelaba oficialmente que por indicación del Gobierno el partido del domingo ante el Alavés B se jugará sin público. A última hora del día, Sanidad confirmaba que la situación afectará también a El Malecón, el otro recinto deportivo cántabro con características especiales. Racing y Gimnástica deben pedir un permiso específico para cada partido, y Sanidad ha anunciado que no lo dará. Otros clubes están aún a la expectativa, pero atentos dado el antecedente. Su impresión, que se pueden quedar sin público.
La única forma en la que los deportistas escolares menores de 18 años pueden practicar deporte en Cantabria es de forma individual, al aire libre, de modo competitivo.Es decir: de acuerdo con la normativa parece posible salir solo a correr o en bicicleta, pero no en grupos ni en competiciones oficiales. Más como actividad física que como deporte o entrenamiento.
Estas restricciones afectan, eso sí, solo al ámbito autonómico, de modo que los deportistas inmersos en competiciones nacionales están a salvo de esta restricción.Es el caso de los equipos juveniles de División de Honor y Liga Nacional de fútbol.
También otros clubes basados en la cantera y de extremada juventud como el Voleibol Torrelavega se verán libres de esta prohibición.Las delBesaya, que tienen un buen número de juveniles en su primera plantilla, compiten en la Superliga 2, de modo que su campeonato y atribuciones son estatales. Por último, los menores no escolarizados constituyen la otra excepción.
En cualquier caso, el sentir general en muchas federaciones es que es improbable que se pueda reanudar la temporada, y menos en ese horizonte de enero, y no se descarta en absoluto que las suspensiones vayan en aumento y que puedan afectar incluso a categorías absolutas, aunque no de élite, como ya ha ocurrido en otras comunidades autónomas.
Las escuelas municipales están cerradas ya desde el pasado lunes, cuando entró en vigor la resolución que prohibía todo el deporte no federado de menores de edad, y así seguirán. Dado lo difuso del primer texto (de ahí que Sanidad decidiera acotarlo) y la dilación en los tiempos –la modificación iba a haberse publicado el martes, pero se retrasó hasta ayer–, las escuelas han permanecido a la expectativa, pero permanecerán cerradas durante un periodo por determinar.
Además del cumplimiento de la resolución del Gobierno, el Ayuntamiento de Torrelavega ha anunciado que su Servicio Municipal de Deportes de Torrelavega, con sede en el pabellón Vicente Trueba, también estará cerrado al público al menos hasta el martes por un positivo de covid. Además de la obligada suspensión de las actividades deportivas propiamente dichas, tampoco se atenderá presencialmente durante estos días, aunque sí a través del correo electrónico y el teléfono. Tampoco tendrán en principio acceso los escolares a los gimnasios, si bien será necesario consultar el texto de la resolución para determinar hasta qué punto opera esta restricción, puesto que sí se prevé permitir el ejercicio individual.Además, el Gobierno no ha comunicado, en caso de que opere esta restricción, el modo en que se controlaría el acceso o no de los escolares a unos recintos que, a día de hoy, y siempre que cumplan los requisitos, pueden abrir sus puertas.
La medida no afecta por el momento –nada se puede descartar a medio y largo plazo en el ámbito autonómico ni en el estatal– a los equipos representativos de los principales deportes y a la competición absoluta, pese a jugar en todos los casos en instalaciones municipales. El fútbol continúa por el momento en todas las categorías absolutas, incluso con público enalgunos casos como la Segunda B.También elSinfín y el Pereda –no juega en casa hasta el día 13– siguen sin haber recibido una comunicación oficial. El TextilSantanderina de Superliga también entrena y juega con toda la normalidad que es posible en este contexto, aunque como todos los equipos está ahora a la expensa de que haya o no público en sus gradas, como le ocurre a un Independiente que anoche no sabía, literalmente, si tendría público el domingo en su debut en San Román. Por la mañana creía que sí.
El Vicente Trueba, cerrado al público por el caso de covid, seguirá, al menos por ahora, como sede de Bathco Torrelavega (División de Honor B de balonmano) y el Alega Estela (LEB Plata de baloncesto). Hasta ahora podía tener público. Lo mismo ocurre con La Albericia, donde Liberbank Sinfín y Uneatlántico Pereda pueden albergar aún formalmente a 300 espectadores, algo que puede cambiar hoy. Tampoco será posible. Pero Sanidad ya ha advertido que se revisarán todos estos criterios, de modo que tendrán que esperar algún día... O tal vez solo horas.
Solo asegurado en el corto plazo
La nueva medida afecta al fútbol como al resto de los deportes: los equipos de categorías inferiores y las canteras de los absolutos, que en los casos en los que lo habían estimado oportuno –no todos– habían seguido entrenando tendrán que parar ahora la actividad de su cantera. El caso más evidente por numeroso es el del Racing, pero en la misma situación se encuentran infinidad de clubes. Lo que no peligra a cortísimo plazo es la competición absoluta. No ya la de LaLiga –sin equipos cántabros– y Segunda B, sino tampoco la Tercera División, considerada categoría nacional, y las divisiones regionales, que sí se han suspendido, por ejemplo, en el País Vasco.
«No hay riesgo por ahora», explica el presidente de la Federación Cántabra, José ÁngelPeláez, antes de insistir en que «suspender las categorías absolutas no está encima de la mesa por ahora»; enfatizando el adverbio consciente de que «según avance la pandemia serán las autoridades sanitarias las que decidan».El máximo responsable del fútbol cántabro remarca la idea y quiere poner de manifiesto que «se acatará cualquier decisión que tomen las autoridades sanitarias, como siempre se ha hecho». Sí que se han producido aplazamientos, como los dos de la Gimnástica, con siete positivos en su momento, o el delTextil. De acuerdo con la interpretación del propio Ejecutivo, tampoco podrán los escolares usar las pistas al aire libre, aunque en la calle solo la policía podría restringir la actividad.
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