El covid entra en dos residencias más que Sanidad se niega a identificar

En Liencres, mientras tanto, los residentes llevan varios días confinados y bajo los controles de Sanidad para evitar que el brote se extienda. De los cinco mayores afectados allí, dos se encuentran ingresados y el resto simplemente en aislamiento.

En otras comunidades, la situación en las residencias es aún más complicada, como en Aragón, donde esta misma semana se informó de que el número de personas mayores contagiadas ascendía a medio centenar. Varias comunidades ya han decretado el cierre de entrada y salidas de los centros y la anulación de visitas de familiares. Es el caso de Andalucía o aquí, en Cantabria, el de Liencres.

Al margen de las residencias, hay 300 casos activos en total en la región en estos momentos, de los que 16 se encuentran hospitalizados (13 en Valdecilla y otros tres en Sierrallana). Ninguno de ellos se encuentra en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Otras 284 personas están en cuarentena domiciliaria.

En estos últimos días se ha producido un repunte de los positivos al hilo del verano, tal como explicó el consejero de Sanidad el pasado jueves, día en que fijó el número de brotes en Cantabria en doce y comunicó oficialmente que su departamento llevaría a la Fiscalía el caso de un restaurante de Comillas ('El Cantábrico') que seguía activo pese a que cinco trabajadores habían dado positivo en coronavirus. La enfermedad no había impedido que los empleados siguieran en sus puestos, atendiendo al público, lo mismo que otros siete más que deberían haber estado en aislamiento por haber estado en contacto estrecho. «No cumplir con el confinamiento obligado puede constituir un delito contra la salud pública», denunció Miguel Rodríguez.

De hecho, pocas horas después de trascender la situación de este negocio, Salud Pública hizo un llamamiento a algunos clientes del establecimiento para que se pusieran en contacto con los servicios sanitarios y así empezar a controlar los posibles en caso de que alguna persona desarrollara síntomas. Por el momento, ningún cliente de todos los que se han sometido ya a las pruebas PCR ha dado positivo, según ha asegurado el propio consejero de Sanidad.

Este sábado, Cantabria contabilizaba 3.519 casos acumulados desde el inicio de la pandemia, 2.679 diagnosticados mediante pruebas PCR y 840 con test de anticuerpos. El número de curados asciende a 3.017 (el 86%) y la cifra de fallecidos se mantiene en 213 desde que el pasado viernes se computara un nuevo deceso, una mujer de 89 años con patologías previas. Fue el primero desde el pasado 18 de junio. Es decir, la región no había tenido que lamentar ningún fallecimiento en casi dos meses.