Los brotes en la hostelería representan el 13,5% de los 74 localizados en Cantabria

Así, por ejemplo, un brote detectado en una oficina y una clase de Primaria confinada por varios positivos en el aula. Empiezan siendo brotes distintos (laboral y educativo) hasta que el rastreo determina que están relacionados entre sí, bien porque ese familiar contagiado en el trabajo ha llevado el virus a casa y, después, a través de su hijo, al colegio, o viceversa. Pero esos dos focos acaban clasificados en un mismo brote, una vez hilados los casos.

Es por eso que el ámbito familiar es el que mayor número de brotes aglutina en la comunidad, con 52, porque repercute en el hogar, independientemente del lugar donde uno se infecte. Le sigue de cerca el ámbito social, en el que se mantienen activos 47 brotes, de los queNya que la hostelería está incluida dentro de este grupo. Es decir, el 13,5% del total de brotes activos en Cantabria está vinculado con el sector hostelero, según el dato aportado desde la Consejería de Sanidad.

Desde que los bares y restaurantes volvieron a abrir los interiores, el pasado 3 de marzo, Salud Pública ha contabilizado una decena de focos relacionados con la actividad en estos locales. Siete de ellos considerados «importantes», al contemplar más de diez casos cada uno. En total, suponen 206 positivos, el 28% de los filiados a brotes a día de hoy. Y siempre teniendo en cuenta, como aclaró Rodríguez, que «relacionamos un brote con la hostelería exclusivamente cuando los camareros u otro tipo de personal están implicados, porque si no, aunque lo sospechemos, no podemos establecer una relación causal entre el contagio y el establecimiento».

El brote más grande detectado en el ámbito de la hostelería generó 75 casos y «ramificaciones» de contagios en el ámbito familiar y laboral. En relación a estas infecciones, el consejero fue contundente:«Con 206 casos menos, Cantabria no estaría en un nivel de alerta 3, estaríamos todavía en el 2». A riesgo de ser señalado por el sector, Rodríguez puntualizó: «Que nadie piense que estoy echando la culpa a la hostelería, los hosteleros no tienen ninguna responsabilidad, pero es una actividad en la que el riesgo de transmisión es mucho más alto porque nos quitamos la mascarilla e interactuamos y hablamos». Además, aclaró que está «más que demostrado» que la transmisión del virus se produce a través de aerosoles y que las partículas pueden quedar suspendidas en el aire durante horas.

En el grupo del ámbito social también se incluyen varios brotes activos relacionados con actividades de diversa índole: una peluquería, una academia de danza y un taller de empleo, en el que posteriormente los contagios se han extendido a una familia y un bar. De nuevo, brotes mixtos. Por otra parte, en el ámbito laboral se sigue la evolución de 19 brotes, y en el deportivo, donde se incluyen los gimnasios, se contabilizan cuatro. En cuanto al sector educativo, en estos momentos constan nueve focos, uno de los cuales ha llevado a poner un aula en cuarentena preventiva.

El arranque de la campaña de vacunación ya está surtiendo efecto en la primer línea de batalla contra la pandemia. A día de hoy, el ámbito sanitario, al igual que el de las residencias, está libre de brotes en Cantabria. «Evidentemente está relacionado con el avance de la vacunación», especificó el consejero.

En Santander, dos negocios de hostelería (un bar y un restaurante) acumulan ya 75 positivos. Los contagios en ambos casos afectan principalmente a la ciudad, pero hay otros seis municipios en los que residen afectados por este brote: Camargo, Cabezón de la Sal, Polanco, Suances, Miengo, Santa Cruz de Bezana y Piélagos.

El primer caso acudió a ambos establecimientos como cliente el mismo día y se acabó extendiendo a un centro educativo. Los positivos que tienen vínculo directo con los establecimientos de restauración son 29: 23 clientes (8 del restaurante y 15 del bar) y 6 empleados (4 del restaurante y 2 del bar). El resto se deben, la mayor parte, a transmisiones domiciliarias de cada uno de estos casos, aunque se ha producido también transmisión en el ámbito educativo (la hija del primer caso) y laboral en una empresa no relacionada con la restauración.

La clientela del restaurante está muy bien identificada y varias personas se encuentran a la espera del resultado de la prueba PCR a la que han sido sometidos, por lo que las cifras podrían cambiar. Por el contrario, pocos clientes del bar han podido ser identificados de antemano, solo mediante el rastreo habitual de cada caso nuevo se va descubriendo el vínculo con el bar. Por tanto, puede haber clientes positivos pero asintomáticos que se desconozcan.

El segundo de los brotes detectados por Sanidad corresponde a establecimientos de Mazcuerras y Cabezón de la Sal que han dado lugar a 41 positivos, entre los cuales hay, al menos, un hospitalizado y un fallecido. De ellos, 19 viven en Mazcuerras (suponen el 83% de los casos identificados en ese municipio en los últimos 14 días y el otro 17% pertenece a un brote familiar, de momento no relacionado con éste); y 21 residen en Cabezón (70% casos en los últimos 14 días). El contagiado restante vive en San Felices de Buelna.

Los casos con vínculo directo con algún establecimiento hostelero son 16 (12 clientes y 4 empleados). Algunos fueron clientes de más de un establecimiento el mismo día y generaron transmisión en todos ellos.

El tercer brote que hay localizado y que corresponde a un bar de Los Corrales de Buelna suma 28 casos y se inicia en un taller de empleo del Ayuntamiento de este municipio. Afecta principalmente a Los Corrales, aunque hay casos de otros tres municipios: Torrelavega, Arenas de Iguña y San Felices. Uno de los alumnos del taller acudió a un bar, donde posteriormente salen más casos entre clientela y plantilla. Como ocurre a menudo en bares, solo se pudo identificar a algún cliente habitual, no al resto. Este brote se extendió también al ámbito familiar. Los casos que tienen vínculo directo con el establecimiento de restauración son cuatro: dos clientes y dos empleados.

Un bar de Reinosa también ha dado lugar a otro brote de 15 contagiados (7 son clientes). Ha habido otras interacciones sociales entre ellos, pero no está claro que la transmisión se haya producido en este establecimiento. Los casos implicados en este brote residen en municipios que presentan una mayor incidencia acumulada en los últimos días: Reinosa y Campoo de Enmedio.

Sanidad también tiene detectado un brote en un restaurante en Pesquera con 13 casos, que parece iniciarse a través de sucesivas reuniones en este establecimiento. De ellos, 9 son clientes. Los empleados y propietarios han dado, de momento, negativo (algunos están a la espera de PCR de alta). Sin embargo, uno de los casos actúa, en ocasiones, como camarero (no contratado). Los casos implicados en este brote residen en municipios en los que se ha detectado una mayor incidencia: Pesquera, Reinosa, Santiurde de Reinosa y San Miguel de Aguayo.

El resto de brotes activos en la hostelería cántabra corresponden a un bar en Santander con 13 casos y vínculo directo con el establecimiento con 9 positivos; un bar en Escalante, con 11 casos, cuya transmisión inicial se produce en ámbito domiciliario, pero se extiende a través de reuniones de amigos en este negocio; un bar en Voto, con 4 casos (tres empleados y un cliente, que es el positivo implicado en la protesta-encierro en SEG Automotive); un bar en Santoña (3 casos); y un restaurante en Torrelavega (3 casos).