Diez positivos en la residencia de mayores de Limpias: «Estamos muy preocupados»

«Estamos muy preocupados», explicaba ayer Julia Gurruchaga, directora ejecutiva de Pro Maiorem, después de que se confirmara la existencia de diez casos de coronavirus en el Centro Residencial Limpias, una de las cuatro residencias de mayores que gestionan, y de que en otra de ellas, el Centro Residencial Virgen del Faro, en Santander, se hubiera descubierto el primero, con síntomas leves. En Limpias, el estado de dos de los pacientes ha hecho necesaria su hospitalización.

«La situación en Limpias es bastante comprometida porque tenemos personal de baja y diez positivos. Estamos haciendo un llamamiento a todas las personas que tengan la titulación necesaria para que se presenten y contratarles para trabajar, porque estamos teniendo dificultades para prestar el servicio», indicó Gurruchaga.

El Centro Residencial Limpias atiende a 53 usuarios y cuenta con una plantilla de unos treinta trabajadores, algunos de los cuales se encuentran en aislamiento tras conocerse los positivos. «También tenemos problemas con el material sanitario: los equipos de protección individual los estamos consiguiendo por nuestra cuenta, pagándolos a precio de oro y distribuyéndolos nosotros mismos en coche por las residencias. Hemos adquirido los que hemos podido, pero tenemos como para un par de días, como mucho, y siempre que no crezca demasiado el número de afectados: cada vez que se entra a hacer cualquier cosa en la habitación de un paciente o hay que atenderle, todo ese equipo se tiene que retirar».

«Estamos pendientes del resultado de una reunión con Salud Pública y Servicios Sociales para ver qué van a hacer con nosotros. También hemos llamado a la Delegación del Gobierno, porque se supone que va a venir hasta el Ejército para ayudar. El Gobierno central ha publicado una orden en el BOE por la que se permite a trabajadores sanitarios de otros centros, como los de día, o profesionales de ayuda a domicilio, que vengan a ayudar a las residencias de mayores, pero se tiene que tramitar a través de una orden a nivel autonómico, y en Cantabria aún no se ha hecho».

Mientras, el caso detectado en su residencia de Santander también está obligando a realizar un enorme esfuerzo para su contención. «En Santander tenemos 159 usuarios. Lo primero que se ha hecho en cuanto hemos conocido que el resultado del test ha resultado positivo ha sido contactar con las familias de todos ellos. Además, para cumplir el protocolo del Gobierno y minimizar los riesgos hemos movido a 89 residentes de habitación e incluso tenemos dos camas habilitadas en el centro de día», relata.

La forma en que el coronavirus se ha cebado en algunas residencia de ancianos en España y los llamamientos desesperados desde algunas de ellas hacen temer que eso mismo pueda llegar a producirse en la región. Fuentes de Salud Pública aseguran, por el contrario, que la situación en Cantabria está perfectamente controlada. «Los médicos de atención primaria están yendo cada día y se hace un seguimiento exhaustivo del estado de las personas mayores. A todos los pacientes con síntomas, o simplemente sospechosos, se les ha tomado muestras para hacerles la prueba de detección del virus para lo que se han desplazado profesionales del 061. A estos test, además, se les da la máxima prioridad para tener los resultados cuanto antes y actuar en consecuencia».

Salud Pública puntualizó que todas las residencias disponen de equipos de protección individual y se les ha puesto en contacto con empresas que puedan proporcionarles mascarillas.

Según este organismo, «se han peinado» las residencias para detectar posibles casos, mientras el Instituto Cántabro de Servicios Sociales ha desarrollado una tarea similar entre los trabajadores de estos establecimientos para, ante cualquier indicio, derivarlos al punto de triaje instalado en El Sardinero, un lugar reservado para que se realicen pruebas a los profesionales de servicios esenciales, como ahora están considerados, igual que los policías y los sanitarios.

Los últimos datos facilitados desde la Consejería de Sanidad indican que ya son 36 los profesionales sanitarios enfermos de coronavirus. Según el parte diario ofrecido desde esta área, en Cantabria se han contabilizado 282 casos positivos de Covid-19, de los que 271 permanecen activos. El número de personas que han conseguido superar la enfermedad sigue siendo de once. Afortunadamente, ayer tampoco aumentó el número de fallecidos a causa de la pandemia.

Del total de afectados por el mal, 116 están hospitalizados (casi el 43%) y ocho de ellos están siendo atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI); el resto se encuentra en aislamiento domiciliario. Los 116 hospitalizados se reparten de la siguiente manera: 81 en Valdecilla (seis en la UCI); 24 en Sierrallana (dos de ellos en la Unidad de Reanimación y Cuidados Especiales, equivalente a la UCI); ocho en el hospital de Laredo y tres en el hospital Tres Mares.

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