Una dimisión que deja sabor agridulce en Revilla y Barbón

Isabel Pardo de Vera ·
Ambos presidentes valoran la labor y predisposición de la hasta ahora número dos del Ministerio, que ha renunciado a su cargo por la polémica

Daniel Martínez y Candela Gordovil

Santander

Miércoles, 22 de febrero 2023, 07:01 | Actualizado 12:03h.

El Ministerio de Transportes dio a conocer el lunes las dimisiones de la secretaria de Estado, Isabel Pardo de Vera, y del presidente de Renfe, Isaías Táboas, apenas dos horas antes de que comenzara la reunión con los presidentes de Cantabria y Asturias. Uno de ... las cosas que pedían Miguel Ángel Revilla y Adrián Barbón a Raquel Sánchez era que pusiera sobre la mesa cabezas de más peso que las de los cargos intermedios cesados al inicio de la crisis ferroviaria. Así, a la llegada a la cita, los periodistas pidieron les pidieron una valoración de la noticia. «Vamos a ver qué nos dicen de las dimisiones. Que nos las expliquen», dijo el regionalista, más que contenido y con rostro serio a pesar del aparente triunfo. Querían cabezas, pero desde luego no la de Pardo de Vera, que ambos presidentes veían como una aliada.

Más allá de reconocer su capacidad técnica y su buena predisposición, los dos dirigentes valoran la labor realizada por la ya exsecretaria de Estado y anterior presidenta de Adif en favor de ambos territorios. Cantabria y Asturias coinciden en que una parte importante del avance en la llegada de inversiones en materia de infraestructuras que se ha producido en los últimos años tiene su sello. Revilla y Barbón habrían preferido otro nombre, pero lo acatan. «Yo he dicho que se depuren responsabilidades porque las primeras que se depuraron no estaban a la altura de esta gravísima decisión. Pero quien tiene que saberlo es la ministra. Yo en Cantabria sabría a los diez minutos quién es el responsable. Nosotros no somos nadie para decir qué ha pasado en esa casa», señalaba el regionalista, ya tras la cita, cuando le preguntaban si se daba por conforme. A su lado estaba su homólogo asturiano, que días atrás había hecho en la Cámara autonómica una defensa encendida de Pardo de Vera.

La gallega ha sido la interlocutora más directa de la Consejería de Obras Públicas que dirige José Luis Gochicoa y también del diputado nacional José María Mazón, que ha invertido parte de su tiempo en seguir los compromisos que se plasmaron en el 'papeluco'. Cuando la oposición le echaba en cara que él era uno de los congresistas que menos preguntas parlamentarias tenía registradas, Mazón respondía que no le hacía falta preguntar por escrito porque tenía interlocución directa con el Ministerio. Se refería a Pardo de Vera, que en su anterior etapa como máxima responsable de la empresa de la infraestructura ferroviaria licitó los primeros tramos del AVE hacia Palencia y después ha sido la persona al otro lado del teléfono cuando se preguntaba por el nudo de Torrelavega, el acceso al Puerto o el futuro tercer carril de la A-67.

David Lucas Secretario de Estado de Transportes

Un hombre de partido en un puesto técnico

Raquel Sánchez no se ha ido lejos a la hora de buscar sustituto para Isabel Pardo de Vera. La nueva mano derecha de la ministra es David Lucas, hasta ahora secretario general de Vivienda. De esta forma, Lucas amplía sus poderes en la Secretaría de Estado de Infraestructuras, Transportes y Vivienda y comienza una nueva etapa en un puesto técnico, que dista mucho de los que ha ejercido hasta la fecha. De hecho, el secretario de Estado es la mano ejecutora de la política de infraestructuras y transportes, aunque sea la ministra la cara visible, como se ha podido comprobar con el reciente fiasco ferroviario.A diferencia de su predecesora, el perfil del recién estrenado en el cargo es más bien político. Lucas, diplomado en Derecho Tributario, conoce a la perfección la política local de Madrid gracias a su amplia trayectoria en el PSOE de la comunidad. Ha sido senador por Madrid en la XII legislatura, alcalde de Móstoles y portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid y teniente-alcalde de Getafe. También ha sido presidente de la delegación española en el Congreso de Poderes Locales y Regionales del Consejo de Europa, así como de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Federación Española de Municipios y Provincias, responsable de la implementación de la Agenda 2030 en los municipios españoles. En materia municipal, ha sido presidente de la Mancomunidad de Municipios del Sur y vicepresidente de la Federación de Municipios de Madrid.

Raül Blanco Presidente de Renfe

Regreso del político que medió en Treto

El nombramiento de Raül Blanco como nuevo presidente de Renfe ha sido, de los dos nuevos cargos, el que más polémica ha generado. Y no solo por el complicado momento que atraviesa la operadora ferroviaria, a la que no solo le salpican las críticas por el último escándalo sobre los trenes en Cantabria y Asturias, también las quejas de otras comunidades autónomas por el «abandono» del servicio. Y es que el sustituto de Isaías Táboas fue secretario general de Industria y de la Pequeña y Mediana empresa (Pyme) del Ministerio de Industria hasta el pasado diciembre, que fue cesado por la ministra Reyes Maroto por el atasco de los Perte del coche eléctrico, proyecto que quedó desierto en un 80% en su primera convocatoria y fue gestionado por su gabinete. Licenciado en Economía, Blanco es miembro del Partido Socialista de Cataluña y, antes de dar el salto al Ministerio de Industria, fue director de Desarrollo Económico y Empleo en el Ayuntamiento de l'Hospitalet de Llobregat, así como gerente de Estrategia Industrial en la Generalitat de Cataluña, donde trabajó con el presidente de Renfe saliente. Un hombre que, en palabras del vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, es conocedor de la realidad de la región. Tanto es así que desempeñó un papel importante como mediador durante el conflicto laboral de la empresa SEG Automotive, la planta de alternadores de Treto, que el pasado junio anunció un ERTE para sus 686 empleados.