Cantabria dispone de medios para vacunar a 26.000 personas al día cuando lleguen vacunas de forma masiva

Casi dos meses después desde que se pusiera la primera dosis en la residencia de mayores de Cueto, Rodríguez dio detalles del plan operativo que ha diseñado su departamento para la vacunación cuando, a partir del segundo trimestre, comiencen a llegar viales de forma masiva. O por lo menos en cifras superiores a las actuales. Así, Cantabria se encuentra en disposición de pinchar a hasta 26.000 personas al día, siempre y cuando en los almacenes regionales haya suministros suficientes para ello.

Esa cifra de 26.000 vacunados al día (130.000 a la semana) se alcanzaría con el escenario de envío de dosis por parte de las farmacéuticas optimista. En el escenario medio, el ritmo de vacunación podría rondar los 9.000 pinchazos por jornada y en el escenario más negativo estaría en 4.000 al día y 19.000 a la semana. Es el más negativo, pero en cualquier caso, el consejero recuerda que supondría mejorar los datos actuales, que pese a ser buenos en términos comparativos, siguen lastrados por la baja distribución de los sueros de Pfizer, Moderna y AstraZeneca, las tres fórmulas que hasta ahora han recibido el visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento. En el escenario medio, sí se alcanzaría el objetivo de llegar al 70% de la población a principios de julio, mientras que con el escenario alto y más improbable, ese porcentaje se alcanzaría en solo un mes.

Sanidad insiste en que cuenta con el personal suficiente para poner en funcionamiento cada uno de estos tres escenarios. «Creemos que tenemos el personal suficiente tanto en Atención Primaria como en los hospitales, que están dispuestos a ayudar en la vacunación. Las enfermeras de los hospitales han sido las primeras en ofrecerse para vacunar en horario de tarde y fines de semana», ha subrayado Rodríguez. Y de nuevo volvió a relevar la colaboración de las instituciones privadas a un segundo plano. De recurrirse a ella, se haría si lo hacen «de forma altruista». En este sentido, agradeció a Mutua Montañesa su disposición, pues ya ha dicho que está al servicio del Servicio Cántabro de Salud.

Personal de ambulatorios, de hospitales, de la iniciativa privada… «Se podrán adecuar los recursos necesarios a cada uno de los escenarios que se planean, aunque el peso de la administración recaiga sobre la Atención Primaria», ha apuntado, tal y como se ha previsto desde el inicio. De momento, a la espera de una llegada masiva de vacunas que está en el horizonte pero para la que aún faltan semanas, lo que ya están listos son los grupos de vacunación de los centros de salud.

En Atención Primaria se han montado 42 equipos -tantos como centros de salud- que podrán vacunar a una persona cada 5 minutos -una cada tres minutos si se suma a cada uno de estos grupos un enfermero más en caso de que haya un gran número de viales en los almacenes-. No sólo es poner el pinchazo, también registrar todos los datos, explicar el proceso al paciente y comprobar que no hay efectos secundarios. Por ahora no se ha detectado ninguna reacción adversa importante, «pero hay que tenerlo previsto». Así, cada enfermero podrá vacunar a 72 personas al día y llegar, entre todos los equipos, a 3.024 personas por jornada y 15.120 a la semana.

A esos grupos hay que sumar los equipos móviles existentes (formado por enfermero, técnico de enfermería y técnico de urgencias), que tendrían un ritmo de vacunación idéntico al anterior. Eso sí, al ser menos, pueden administrar dosis a 432 personas al día y 2.160 a la semana.

Lo anterior responde a la pregunta de quién. ¿El dónde? Pues principalmente en los centros de salud y los hospitales del Servicio Cántabro de Salud, pero de forma complementaria también en los centros privados. Además, en las localidades más pequeñas -casi siempre las más envejecidas-, en vez de obligar a los usuarios a acercarse a su centro de salud de referencia, se estudiaría llevar un equipo móvil de vacunación. «Aunque los centros de la red principal son el lugar preferente, se contemplan alternativas de apoyo», ha dicho Rodríguez, en referencia a la posibilidad de mover también equipos para vacunar de forma centralizada a profesionales esenciales que se encuentran concentrados en un único entorno.

Y ante la posibilidad de que llegue un número ingente de vacunas a partir de abril, también se buscan grandes espacios para la administración de dosis. Espacio culturales, deportivos, religiosos o centros docentes. Inicialmente, ya se están estudiando tres ubicaciones de este tipo (en Santander, Torrelavega y la zona de Laredo-Castro) y también se analiza la colocación de otros tres vacunautos (como los coroautos, pero para vacunas) en estos mismos lugares. En ambos casos, hay flexibilidad y se buscarán lugares adecuados por si hay que extenderlos a todas las comarcas de Cantabria.