El Premio Beato distingue al «heroico» personal sanitario y de las residencias

El Gobierno de Cantabria ha condecorado este viernes con su «principal distinción», el Premio Beato, al personal sanitario y de las residencias, que, en opinión de su presidente, Miguel Ángel Revilla, está teniendo un papel «heroico« durante la pandemia.

Revilla ha llamado a la ciudadanía a «hacer la vida un poco más cómoda» a estos colectivos profesionales cumpliendo con las medidas de seguridad, ya que, ha lamentado, aprecia «relajación« en este sentido.

La explanada exterior del Monasterio de Santo Toribio de Liébana ha acogido el acto de entrega de la estatua que reconoce el trabajo del personal sanitario y de las residencias, que se colocará en el Centro de Estudios Lebaniegos, en Potes, según ha anunciado el jefe del Ejecutivo cántabro.

Revilla ha señalado que este acto «no pierde nada de emotividad» pese a estar «deslucido» por motivos de protocolo, para no congregar a un gran número de personas con motivo de la COVID-19, y porque coincide con el entierro del ex presidente regional Jaime Blanco (PSOE), que falleció ayer.

Además de las intervenciones del presidente y de la consejera de Presidencia, Paula Fernández, que ha leído el acta de entrega del premio, el obispo de la Diócesis de Santander, Manuel Sánchez Monge, ha puesto el toque religioso al acto invitando a los creyentes a rezar un 'Padre Nuestro' por los fallecidos a causa de la pandemia, sobre todo por los que pertenecían a los dos colectivos premiados.

Tampoco ha faltado la nota musical, a cargo de Vicky Gastelo, que ha acompañado con su voz a un emotivo vídeo sobre el personal sanitario y de las residencias, mientras que la Camerata Coral de la Universidad de Cantabria ha entonado «Hallelujah» de Leonard Cohen y el himno de Cantabria, entre otros cánticos.