Educación comienza a adaptar los títulos de FP a la nueva ley tras la presión del Ministerio

De manera indirecta, tras varios giros argumentales y después de criticar duramente a Zuloaga por «sembrar inseguridad y preocupación» en las familias, Silva reconoció que, a falta de dos meses para que arranque el curso, habrá que dar una vuelta de tuerca a los planes de estudio actuales para amoldarlos a las nuevas exigencias nacionales. Por ejemplo, para suprimir una asignatura transversal a muchos ciclos como era Formación y Orientación Laboral -se sustituye por el Itinerario Personal para la Empleabilidad- y también para modificar las horas de prácticas en empresas, que ganan peso en el nuevo sistema de FP.

«No estaban homologados porque no podían estarlo. Esa normativa a la que me refiero va en cascada y no teníamos previamente el marco legal», defendió ayer el consejero. Silva entiende que la Consejería no tiene responsabilidad en el asunto y que, si no ha adaptado antes los currículos, ha sido porque el Ministerio no dio instrucciones hasta el pasado 28 de mayo. Por eso Cantabria ha estado pidiendo más plazo al Ministerio. Para «hacer las cosas con más sosiego».

En paralelo, el popular insistió en que el problema -problema que no tendrá consecuencias prácticas para los estudiantes- que se ha encontrado Cantabria es el mismo que el de otras comunidades autónomas. El consejero matizó así sus palabras del miércoles, cuando se excusó en la complejidad de una adaptación que es lenta porque se está haciendo de manera consensuada con los centros y los docentes. Lo que no precisó Silva es si antes de las críticas del PSOE ya se había aprobado la adaptación de algún otro ciclo formativo y tampoco cuántos están aún por adaptarse.

Consultado por este periódico, el Ministerio de Educación rebate el principal argumento de Silva y recuerda que Cantabria, como el resto de autonomías, sabían cuáles tenían que ser los contenidos de los distintos títulos desde julio de 2023, cuando se aprobó el real decreto que concreta la ley de 2022. Aunque reconoce que el pasado mayo se aprobó otro documento al respecto, asegura que se trata de un mero formalismo, ya que los contenidos y la obligación de adaptar los títulos, además de ser fruto de un trabajo de colaboración entre el Estado y las 17 consejerías, eran públicos desde hace un año. Y la mejor prueba para el departamento que dirige la socialista Pilar Alegría es que el resto de regiones están más adelantadas que Cantabria en este proceso.

«Silva solo acierta cuando rectifica. Bienvenido a esta nueva rectificación forzada por el PSOE que servirá para garantizar la tranquilidad de las familias», apuntó ayer Zuloaga, que considera «sorprendente» que haya sido necesario que los socialistas destaparan esta situación para que el Gobierno asuma su responsabilidad. En sentido contrario, el consejero echó en cara a Zuloaga que haya puesto en tela de juicio la validez de los títulos para intranquilidad de los estudiantes.