Educación plantea a los docentes de más de 55 años sustituir de 3 a 4 horas de clase semanales

La Consejería de Educación ha presentado a la Junta de Personal una nueva propuesta de jornada para los docentes cántabros que superen los 55 años. En virtud de esa proposición, los maestros podrán sustituir hasta cuatro horas de clase semanales por otras actividades en el centro, y tres en el caso del resto del profesorado. Además, para acogerse voluntariamente a esta jornada, los docentes habrán de ser funcionarios y contar con 15 años de servicio y destino definitivo en su centro; y podrán cambiar las horas lectivas en el aula por tareas de mentoría del profesorado más joven, o por proyectos de plurilingüismo, de innovación o salud escolar, entre otras.

Educación revela que ha presentado esta propuesta, la cuarta versión que redacta, el pasado lunes en el marco de la Mesa Sectorial celebrada con los sindicatos, por lo que ahora está «a la espera» de la respuesta de la Junta, la cual se ha mostrado contraria a sus planteamientos previos. Según ha indicado el Ejecutivo, los sindicatos han pedido «más tiempo» para valorar las mejoras introducidas, por lo que prefieren retrasar la fecha de la próxima Mesa Sectorial.

«Es necesario cerrar un acuerdo» tras casi tres meses de negociación, ha apuntado el consejero de Educación, FP y Universidades, Sergio Silva, quien confía en que contar con la aprobación de la Junta, ya que el planteamiento de su departamento es «positivo para el sistema educativo de Cantabria».

Para Silva, la jornada de los docentes de más de 55 años cumple la doble función de mejorar la vida laboral de ese grupo de profesores de larga trayectoria que se encuentra en la última etapa de su vida profesional, y, además, es «una gran herramienta para los centros», que van a poder dedicar estas horas a otras iniciativas «muy útiles».

De salir adelante, se cumpliría con unas de las reivindicaciones históricas de la Junta de Personal. Silva abrió la puerta a su cumplimiento en noviembre, cuando se avino a recuperar la sustitución parcial de la jornada lectiva de estos docentes a través de una enmienda de modificación de la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas. Había, pues, que derogar los artículos 11 y 12 de la Ley 2/2012 de Medidas Administrativas, Económicas y Financieras; es decir, derogar una normativa que el propio PP puso en marcha. El Grupo Popular presentó la enmienda en el Parlamento y, una vez resuelto el trámite en la Cámara, se pueden recuperar ya esas sustituciones parciales, un derecho que los sindicatos siempre han considerado cercenado por las políticas anticrisis.

No obstante, las propuestas anteriores de la Consejería no han contado con el visto bueno de las organizaciones sindicales. Hace un mes aproximadamente, la Junta rechazaba el planteamiento de jornada elaborada por el equipo de Silva por excluir a la mitad del colectivo dada «la cantidad de restricciones y requisitos que presenta». La Junta calcula que hay unos 1.700 profesores que podrían acogerse voluntariamente a la medida, pero que, con las propuestas previas de Educación, quedarían fuera los interinos, así como los funcionarios con destino provisional o en comisiones de servicio, los docentes de los conservatorios y de las Escuelas Oficiales de Idiomas, o los de Formación Profesional básica.

Educación pone sobre la mesa una nueva propuesta y prevé, además, una convocatoria pública cada curso para el profesorado interesado en acogerse a la medida. Silva subraya que la pelota está en el tejado de los sindicatos. «Sin duda, es una importante mejora laboral y educativa. Confío en que los sindicatos accedan a validar este acuerdo, porque creemos que es positivo para el sistema educativo de Cantabria», dice el consejero.

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