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Todo el mundo contaba con que la situación sanitaria iba a empeorar tras la Navidad y que el incremento generalizado de la interacción social iba a disparar los contagios. Pues así ha sido. Cantabria ha pasado de los 167 puntos de incidencia acumulada en 14 ... días del pasado 24 de diciembre -víspera de todos los eventos familiares- a los 330 de ayer: el doble en tan sólo cuatro semanas. Pero por unas u otras razones, los registros son bien diferentes según qué municipio. Los hay con cifras que pican hacia arriba y otros hacia abajo.
A veces, ni los alcaldes, ni Salud Pública, encuentran una única razón que explique esas tendencias opuestas, pues entran en juego múltiples variables: brotes, densidad poblacional, perfil turístico de cada territorio, etc. Si se observa el modo en que ha evolucionado la tasa de incidencia en las últimas cuatro semanas, tomando el 24 de diciembre como fecha de inicio y este viernes como fecha final, se observa, por ejemplo, que Laredo es uno de los ayuntamientos más castigados por la pandemia tras el paso de las fiestas.
La villa pejina tenía 152 casos por cada 100.000 habitantes el día de Nochebuena y el viernes alcanzaba los 916. «No entendemos bien a qué se puede deber este incremento tan grande porque lo cierto es que ha venido gente de fuera a sus segundas residencias a pasar la Navidad, pero tampoco han sido hordas», remarca Javier Ramírez, concejal de Personal y Empleo del Consistorio.
«La suerte que tenemos es que no ha entrado en la residencia de ancianos, lo cual nos ayuda a tener lista la inmunización con la vacuna antes de que pueda llegar el patógeno». «Lo único que podemos hacer por ahora es apelar a la responsabilidad ciudadana para continuar haciendo las cosas bien y que esta tendencia cambie».
Gema Igual, Alcaldesa de Santander
Javier López Estrada, Alcalde de torrelavega
Javier Fernández, Alcalde de El Astillero
Javier Gómez, Alcalde de potes
Jaime Soto, Alcalde de valdeprado del río
En el polo opuesto está Reinosa. El 24 de diciembre registraba una tasa de incidencia de 466 y el viernes la había reducido hasta los 133. Sin embargo aquí sí hay una causa clara: la contención del brote que asoló la residencia San Francisco, y que obligó a reservar el Hospital Tres Mares sólo para los enfermos de covid de la comarca.
«Después de la desgracia que tuvimos de que el virus entrara en la residencia, ahora estamos muy contentos viendo que todo se está arreglando», señala el regidor, el regionalista José Miguel Barrio. «Pero estas buenas cifras no deben hacernos bajar la guardia. Los vecinos de la comarca saben que ahora hay que seguir más que nunca las recomendaciones de Salud Pública», matizó.
Así las cosas, no parece haber otra salida que hacer caso de las recomendaciones del director de Salud Pública, Richard Wallman: «Necesitamos dos semanas de ayuno social para compensar el efecto de las Navidades». Aunque también es cierto que un vistazo rápido a las cifras puede llevar a generar alarmas irreales. En los municipios más pequeños de la región, como es el caso de Valdeprado del Río, se ha pasado de los 593 a los 0 casos por cada 100.000 habitantes; pero eso no significa que haya existido un peligro crítico de contagios en la localidad.
«Somos un municipio con 325 habitantes. Si se ponen malos dos, las cifras parecen escandalosas pero son sólo dos», razona su alcalde, el popular Jaime Soto. Para hacerse una idea, en todo este tiempo de pandemia, sólo 5 de sus vecinos han pasado el virus.
En Santa Cruz de Bezana la tasa de incidencia se ha disparado también tras las fiestas. «En este caso no tiene sentido generar alarma social porque es un brote muy localizado en la residencia de ancianos y esperamos que no vaya a salir de allí», argumenta el alcalde, Alberto García (PSOE).
El pasado lunes llegaron a sumar hasta 33 nuevos positivos en sólo 24 horas. «Eso asusta mucho a la gente pero de verdad que no es lo mismo que sean contagios repartidos por el pueblo que todos estén en un mismo edificio aislados y controlados», tranquiliza el regidor, que confiesa sus sospechas acerca de que la nueva cepa británica, mucho más contagiosa, esté causando estragos. «¿Cómo se puede explicar esos 33 casos en sólo un día? Me parece excesivo».
Quien busca razones también para el aumento de los casos en Potes es su alcalde, el popular Javier Gómez. Pese a que su incremento de contagios no es exagerado -han pasado de los 223 de tasa de incidencia el 24 de diciembre a los 297 del viernes-, él continúa devanándose los sesos en busca de una explicación.
«No hay tantas visitas en Navidad. Sí que hay gente que viene a pasar las fiestas pero no es tanta y aquí se hace vida muy familiar. Lo único que sí que estoy notando de forma reiterada es que cada vez que llega una fecha que coincide con el regreso de los estudiantes universitarios al pueblo, siempre termina por haber un pequeño brote a los pocos días». Asegura que no quiere culpabilizar a los jóvenes, pero los hechos son los hechos. En la localidad hay, a día de hoy, unos 150 jóvenes que cursan sus estudios superiores lejos de sus casas.
El resto de municipios de la lista no presentan incrementos o descensos exagerados. Las poblaciones más grandes, Santander y Torrelavega, se mantienen en el aumento que cabía esperar. «No estamos alarmados, por ahora, porque ya han pasado suficientes días como para que hubiéramos notado ya un aumento mucho mayor de los contagios y todo está dentro de la tónica general de la región, dentro de lo normal, que ya es suficiente como para preocuparse», explica Javier López Estrada (PRC), regidor de la capital del Besaya.
«Si miramos el histórico, ha habido otros periodos en que hemos estado mucho peor. Y no hay que ir hasta aquel brote que obligó a confinar el barrio de La Inmobiliaria. Basta con retrotraerse al 19 de septiembre, cuando teníamos una tasa de incidencia acumulada de 534», recuerda.
Alberto García, Alcalde de Bezana
Javier Ramírez, concejal de laredo
Felipe Lavín, Concejal de Santoña
José Miguel Barrio, Alcalde de Reinosa
Manuel Grande, Alcalde de tudanca
Santander, que pasa de los 135 casos por cada 100.000 habitantes del 24 de diciembre, a los 317 del viernes, también ha tenido un incremento reseñable. Y Santoña, que partía de un problemático 344, ha ascendido hasta los 607. «Hemos tenido la suerte, en este sentido, de que esta localidad no ha tenido mucho turismo estos días. En Navidad hemos estado prácticamente los de aquí», señala el concejal de Seguridad Ciudadana, Felipe Lavín.
Entretanto, Tudanca y Tresviso miran al resto por el retrovisor. Son los dos únicos que no han registrado un solo contagio en toda la pandemia. «Toda una suerte, porque no tiene otra explicación», zanja Manuel Grande (PRC), alcalde de Tudanca.
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