«Estamos encerrados, pero bien»

Ninguno de los residentes pudo bajar a dar un paseo debido al confinamiento obligatorio que viven desde el fin de semana en sus respectivas habitaciones. Están prohibidas las entradas y salidas del centro, así como las visitas, y se han suspendido las actividades colectivas en el interior.

Desde una de las ventanas de la residencia, Rosa (nombre ficticio) observa la calle que se dirige hasta la playa. Cuenta lo mucho que le apetecería salir a pasear y disfrutar de la jornada soleada. «Estamos encerrados en las habitaciones sin poder salir y sin ningún contacto, pero estamos bien», señala. Los contagiados están aislados y el resto de sus residentes no pueden abandonar sus habitaciones. Es una situación que no gusta, pero en tiempos de pandemia hay que arrimar el hombro. «Mejor prevenir que curar», explica la residente antes de despedirse y meterse a la habitación.

Otro de los residentes del centro -que también prefiere mantener el anonimato- lamenta que nadie les informe de hasta cuándo van a seguir confinados en sus cuartos. «No nos dan información de manera oficial. No viene nadie a decirte nada», relata el hombre. Cuenta que las auxiliares les dejan las comidas en la puerta, pero que no hay más contacto ni más datos porque «ni a ellas les dicen nada».

«El lunes quise bajar al gimnasio y la directora me dijo que no se podía, pero no me dio ninguna razón», indica. El hombre critica también las iniciativas que han surgido ahora que quieren prohibir las salidas de los centros de mayores. «Yo estoy en perfectas condiciones y cuando he salido a mis recados y mis trabajos he cumplido con todas las medidas de seguridad que manda Sanidad». Además, lamenta que «desde hace un tiempo no haya enfermeras en la residencia». «Antes teníamos a cuatro: dos por la mañana y dos por la tarde. No sé quien estará haciendo ahora su trabajo...»

La residencia se ha venido preparando para esta situación desde que el primer positivo hiciera saltar todas las alarmas. Durante el fin de semana, al margen de las labores de desinfección, en las instalaciones se han venido realizando pruebas a todos los usuarios y al personal de la residencia, incluyendo aquellos trabajadores que estaban de vacaciones, a los que se ha pedido que acudan a las instalaciones. Ante la confirmación el sábado del primer positivo por coronavirus, el domingo por la mañana, ya con algunos resultados contrastados, se anunció que otros tres usuarios se habían contagiado, sumando cuatro positivos. Este lunes se confirmó otro contagiado más, con lo que son cinco positivos activos en el edificio.

Tras finalizar las pruebas PCR a todos los residentes el domingo y a los trabajadores el lunes, ayer, martes, no se detectaron nuevos contagios. Tal y como afirmó el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, la residencia de Liencres -que pertenece al grupo empresarial DomusVi- «está totalmente aislada».