«El enfrentamiento del PRC con el PSOE es un postureo de cara a las elecciones»

–El PSOE va casi a incendio por semana:las contrataciones irregulares en Sanidad, la imputación de Sota y ahora la denuncia por la presunta falsificación de un acta en la Universidad de Cantabria para contratar a alguien del círculo de Pedro Casares...

–No deja de ser extraño que surja todo esto ahora, y a la vez. Hay que esperar con cautela, pero siempre pongo en valor la naturaleza de personas que han demostrado ser honradas y muy trabajadoras. Todos estos casos me suenan a campaña de desprestigio contra el PSOE.

–¿Les pasará factura en la siguiente cita con las urnas?

–No. Todo hay que verlo en su justa medida. En el caso del consejero de Economía fue la propia Fiscalía la que lo había archivado en su momento. Los tribunales están para esclarecer. Hay que estar tranquilos. Estos procesos siempre te hacen más fuerte cuando se demuestra que no había nada detrás.

–¿Confía en la honestidad y las explicaciones de Casares?

–Se está intentando tapar el trabajo de una persona seria, responsable y honesta de cara a unas elecciones. Hasta el momento, ese es el dibujo que hago de Pedro Casares en lo que le conozco a nivel personal y profesional.Está haciendo un gran trabajo de oposición durante esta legislatura a pie de calle y esto es una estrategia para manchar su imagen.Me dolería mucho que se pueda utilizar en ese sentido. Si hay alguna duda que se aclare, somos los primeros interesados, pero yo pondría en valor su trabajo.

–¿Hay quien apunta que es fuego amigo de su propio partido?

–No sé. Esto nunca se sabe de dónde puede salir. No tengo ni idea, la verdad.

–Faltan seis meses para las elecciones y las tensiones con el PRC se empiezan a visibilizar más que nunca. ¿Cómo va el estado de salud del pacto de Gobierno?

–El pacto es muy positivo. Se está trabajando con la lealtad que se debe en estos pactos. Se ha tratado de buscar un equilibrio para dejar de ser un partido que estaba un poco velado por el PRC. Hemos conseguido visualizar áreas tan importantes como las que llevamos:Política Social, Educación o Sanidad.

–Pinta un escenario muy positivo, pero el consejero de Industria aseguró hace unos días que hay mucho «francotirador» en su partido que dispara contra sus políticas; Revilla dijo que estaban solos con las minas de Zinc y se mostró reivindicativo por Valdecilla ante la ministra; De la Sierra reconoció que no habían sido del todo leales... Parece un distanciamiento en toda regla.

–El enfrentamiento y el distanciamiento del PRC con el PSOE y sus guiños al PP son un postureo electoral. Es normal que cuando sólo falta medio año para los comicios todas las formaciones, aunque seamos socias, queramos marcar nuestro territorio. No hay que preocuparse más que eso. Todos sabemos que vamos a tener el dinero de Valdecilla, que después de una época de recortes, devolver derechos y dinero que estaban presupuestariamente atascados no es tan fácil. Recortar es sencillo, pero volver a la situación anterior no lo es tanto. Está bien exigir, pero es sólo un posicionamiento de partido.

–Pero en los municipios no están mucho mejor, que usted ha sido alcaldesa esta misma legislatura y lo sabe mejor que nadie...

–No se trata tanto de las siglas, como de las relaciones personales entre los candidatos. Hay personas con las que te entiendes mejor, aun dentro de las mismas siglas, que con otras, y en los municipios pasa mucho. Y cuanto más pequeño es el municipio pasa más.

–¿Cree que al PRC le ha dado miedo la visibilidad que ha adquirido Pablo Zuloaga y la presencia que ha logrado?

–La fortaleza de los partidos siempre es buena y de cara a futuros pactos, cuanto más fuertes seamos, mejor para todos.

–Pero últimamente a los regionalistas les sobran las novias para la boda y se dejan querer por todos. ¿Teme que cambien de aliado tras las elecciones?

–¿Que se dejan querer? Es legítimo que lo hagan. Pero tendrán que responder ante las urnas. Los ciudadanos no entienden muy bien los vaivenes y les pueden pasar factura en las urnas si vuelven a pactar con la derecha.

–¿No ve posible una alianza de las derechas como se ha dado en Andalucía?

–Eso es un futurible en el que cada partido tendrá que asumir las consecuencias. Las elecciones se repiten cada cuatro años. Las decisiones que tomas una legislatura te pasan factura, para bien o para mal, en la próxima cita electoral.¿Sería legítimo? Por supuesto. Pero eso les puede costar permanecer o no.

–Cuando llegaron a la dirección del partido se encontraron con una formación prácticamente rota en dos por las primarias. ¿Ya se han curado las heridas?

–Estamos trabajando desde hace tiempo bien. Las fisuras son las propias que se producen dentro de un proceso interno. Quedó un Congreso muy dividido y lo que se ha conseguido en un porcentaje altísimo es volver a unirnos. No voy a decir al 100% porque siempre habrá personas que se queden fuera por voluntad propia. Pero la salud democrática es esa. Desde el primer momento, Pablo llamó a la unidad, a integrar, no fue posible entonces porque las heridas estaban muy recientes, pero luego el tiempo ha ido cerrándolas. Ha habido recuperación de la gente. En esos primeros momentos se visualizaba la división en fotografías y actos, y le puedo decir que ahora estamos trabajando codo con codo con la mayoría de esa gente. Pasado el tiempo, todo el mundo tiene que trabajar en la misma dirección, en aplicar las políticas socialistas, y creo que Eva Díaz Tezanos lo está haciendo como una consejera más. Es una mujer muy trabajadora.

–¿Qué papel cree que debe tener la vicepresidenta en el futuro PSOE?

–Eso se verá. También hay que contar con las personas e igual ella no quiere seguir. Se hará lo que el partido decida. No se trata de que sea partidaria, no lo decido yo unilateralmente.Se elaborará una candidatura con unos criterios de forma conjunta, igual que las municipales, y ahí se verá si va.

–Hablando de las candidaturas, ¿habrá mucha renovación en las listas del PSOE?

–Habrá candidatos nuevos, sí. Vamos a presentarnos en sitios donde hasta ahora no llegábamos, donde su líder se ha consolidado. Intentaremos llegar a los 102 municipios. Es bueno tener candidatura, pero desde el partido entendemos también que hay que hacerla bien, dar variedad en el sentido multifunción, que puedan gobernar. Buscamos personas con un amplio abanico de posibilidades.

–¿Van a repetir todos los alcaldes?

–Eso no lo puedo asegurar al 100%, porque depende de la Secretaría de Política Municipal y esa información tan exacta en ese momento municipal no la tengo.

–En el último congreso regional ganó el 'sanchismo'. ¿Se van a nutrir las listas de personas cercanas a los postulados de Pedro Sánchez?

–Hay que buscar muchas veces gente del partido, pero no tiene que estar afiliada. Más que darle la vuelta al viejo PSOE para que el 'sanchismo' llegue a todos los ayuntamientos, lo que se busca es un perfil concreto: profesional, personas involucradas con la sociedad y, obviamente, esos son valores que representa el 'sanchismo'. Ser concejal está considerado como un papel menor, pero es muy importante. Es necesario que esté involucrado y que tenga tiempo, a veces es muy bonito decir que eres concejal o alcalde, pero luego tienes que renunciar a tiempo con la familia y amigos. La experiencia municipal es lo que más cuesta, muchas veces te ves solo y cuando asumes una responsabilidad de este tipo sabes lo que tienes detrás.

–Ya están llegando a los partidos las primeras encuestas. ¿Qué resultados les arrojan a ustedes?

–El PSOE va a subir. Somos una apuesta con capacidad de Gobierno, que se ha demostrado. La gestión de Gobierno es muy importante para que se crean nuestros programas electorales. No digo que no haya que creer a quienes no han gobernado nunca, pero sí que tener experiencia de gestión es un plus de garantía. Lo que nos transmite la gente es ilusión y confianza. Ahora mismo somos un referente, la gente cuenta con nosotros. Si no creyesen en el PSOE, no nos llamaría.

–Han pasado de 13 diputados a cinco en tres legislaturas, cosechando los peores resultados de la historia. Con ese escenario, tampoco parece muy complicado subir.

–Habíamos tocado suelo y nosotros tenemos unos instrumentos para revertirlo. De lo que se trata es de remontar. La renovación y la apuesta de futuro que se hizo en las primarias es fruto de un análisis de la situación a la que se había llegado. Vamos a intentar remontar.

–¿Cómo se llegó a esa situación?

–Se generó una desafección muy importante de la gente, que se quedó en casa a la hora de votar, como ha ocurrido en Andalucía. Luego nos lamentamos de lo que ocurre, de los pactos que puedan llegar, pero hay que hacer un llamamiento para que la gente no se quede en casa. Lo importante es pensar en el voto, qué nos ofrece cada uno y, en función de eso, qué nos ofrece en las urnas.

–¿Teme que se repita la situación andaluza?

–No contemplo que se pueda reproducir el resultado de Andalucía. Aquí estamos hablando de figuras nuevas, que también es importante. Zuloaga no tiene el desgaste que puede tener, por ejemplo, el PSOE andaluz después de 36 años de gobierno. Es la ciudadanía la que tiene que valorar lo que quiere y estudiar los programas porque a veces el descontento de otros, sin canalizar qué le están ofreciendo, es lo que lleva a estas situaciones.