Una FP contra los estereotipos

Tras «mucho sacrificio», Isaías, 33 años, uniforme blanco, guantes de látex y discurso entusiasta, se ha convertido en uno de los alumnos más aventajados del Grado Medio de Belleza y Estética del IESAlisal (Santander). Está pletórico: «Estoy haciendo lo que me gusta, este es mi mundo».

Es también uno de los pocos chicos inscritos en este ciclo. Como bien ha analizado el Consejo Escolar en el informe 'La matriculación en FPen función del género', el alumnado de los ciclos de Formación Profesional ha optado por uno u otro teniendo en cuenta su talento, sus expectativas o cuestiones como la posibilidad de lograr un empleo. Sin embargo, a la vez persisten ideas estereotipadas en torno a las capacidades o los roles de género, que acaban influyendo en la matriculación de ciertos grados.

La meta es disolver los prejuicios. «Romper paradigmas» lo llama Isaías, uno de los protagonista de la iniciativa 'Profesiones sin género' del Consejo y la Dirección General de FP para incentivar vocaciones, y para que no pesen estereotipos a la hora de elegir estudios. Ni la edad ni el hecho de que los cuidados estéticos sean un sector históricamente feminizado –con la lectura de género que ello conlleva– le condicionaron. En las aulas ha encontrado compañerismo, respeto. Tampoco pensaba que fuera a ser distinto.

Le gusta aprender en el IES Alisal –«las instalaciones son maravillosas, los profesores están súper actualizados, y yo soy una esponja que absorbo todo lo que puedo»– y el planteamiento de la FP. «La Formación Profesional es muy interesante porque es teoría pero es práctica; es actitud en clase, es presencia, es responsabilidad... Son tantos factores que, cuando lleguemos al campo laboral, nada nos va a sorprender», entiende.

Gordillo ha decidido también sus siguientes pasos: acabar el grado medio, cursar el superior, y luego, cerrando el círculo, opositar a docente y enseñar Estética y Belleza.

Este curso que termina le ha servido ya para asomarse a técnicas de masaje, exfoliación o maquillaje; a aprender sobre anatomía o hábitos saludables. «Yo... estoy completamente feliz, hago lo que me gusta», destaca.

¿Cómo te imaginas en el futuro, cuando termines el ciclo de Formación Profesional? Yaiza Coz lo piensa brevemente y responde que se imagina diseñando páginas web, y que además le gustaría hacerlo como profesional autónoma, con marca propia. Es decir, Yaiza se ve formando parte de un sector en «auge».

La empleabilidad es uno de los motivos que llevó a esta joven canaria a matricularse en el Grado Medio de Desarrollo de Aplicaciones Web que se imparte en el instituto Augusto González Linares, en Peñacastillo (Santander). Con una carrera en Diseño Gráfico bajo el brazo, Yaiza pensó que este ciclo superior sería la mejor forma de ampliar conocimientos en el campo de la informática. A punto de terminar el primer curso, tras haber explorado bases de datos, entornos de desarrollo o sistemas de gestión de información, no duda de que la decisión ha sido buena: «Estoy muy contenta, me gusta mucho».

En el campo de la informática, y en términos generales, las mujeres son hoy minoría. En clase de Yaiza, la situación está 15 a 3. Ni siempre ha sido así ni esto significa que la contribución de la mujer al desarrollo de la disciplina sea algo residual. Figuras como Ada Lovelace, Hedy Lamarr o Jude Milhon tienen gran relevancia histórica. Además, hasta mediados de la década de 1980, antes de que irrumpiera el ordenador personal, las programadoras abundaban. En informática, por tanto, ha habido muchas pioneras.

En cualquier caso, a Yaiza no le ha «frenado» el contexto a la hora de decidir, ni ser una excepción en la matrícula, ni tampoco tópicos que acompañan a la profesión informática, por ejemplo, que es mecánica, o muy solitaria. Ella, por contra, incide en las posibilidades creativas y laborales.

De hecho, una de las conclusiones del informe del Consejo Escolar de Cantabria sobre 'La matriculación en FPen función del género' es que «la mayoría del alumnado que se matricula lo hace en función de su talento, de la empleabilidad y de las salidas profesionales». Yaiza ejemplifica bien esta forma de plantear su futuro académico y laboral. Contempla la informática como un «mercado que ofrece muchas posibilidades» y se va a centrar en exprimirlas.

Yaiza Coz es otra de las protagonistas de la iniciativa 'Profesiones sin género'. En los vídeos, que pueden verse en las redes sociales del Consejo, cuenta su experiencia y lanza un mensaje claro: «Es importante que las mujeres tengamos un papel en la informática y a mí, personalmente, me está encantando el ciclo», cuenta a cámara.