Un estreno entre vacas, redes y carrozas

A Elena Castillo, la candidata del PP al Senado, le tocó repasar las medidas del programa de su partido en materia de pesca. Tras reunirse con representantes de la cofradía y escuchar sus demandas –acompañada por sus compañeros Javier Noriega y Severiano Cuesta– puso sobre la mesa el problema «del relevo generacional» en el sector. Sin estímulo para que los jóvenes sustituyan a los profesionales de toda la vida, la mitad de la flota –explicó– puede desaparecer en veinte años. Así, habló de «ayudas para la formación y las actividades asociadas a la pesca» o de «potenciar el uso de los productos pesqueros mediante la bajada del IVA». «Y otro de los puntos importantes para nuestra región –añadió– es que nuestro presidente, Alberto Núñez Feijóo, se compromete a impulsar las modificaciones normativas necesarias para que, sin olvidarnos del medio ambiente, les podamos dar seguridad jurídica a todas esas actividades que se desarrollan en zona de dominio público marítimo-terrestre».

De la charla entre redes al paseo por las instalaciones del Puerto de Santander. Del PP al PSOE. Y no fue casual la elección socialista. Querían, dijo Pedro Casares, que «el primer acto de la campaña fuera en una infraestructura clave para el futuro de Cantabria y el futuro de España». El candidato al Congreso dijo que la instalación es «el ejemplo de cómo con las políticas del PSOE y de Pedro Sánchez podemos avanzar o podemos retroceder, como pasó con el Partido Popular». «Esta Autoridad Portuaria –continuó– bien lo sabe, con el PSOE hemos avanzado como nunca en estos cinco años frente a aquellos tiempos de silencio y de retrocesos con el PP». Él y Pablo Zuloaga, el secretario general del partido, hilaron con esta idea para hacer enumeraciones. «Una nueva terminal de contenedores, una estación de gas licuado»... Y ya de paso, «el Llano de la Pasiega, las mejoras en las infraestructuras ferroviarias y de conexiones por autovías...». Su mensaje, que con el PSOE llegan las inversiones.

El de Emilio del Valle y Vox también es fácil de resumir. «El extremismo climático y la Agenda 2030 marcan una serie de exigencias al sector primario sin conocer su realidad, dañando su competitividad». Eso dijo el aspirante a repetir en el Congreso entre las vacas de la ganadería El Llano, de Anero, junto al candidato al Senado, Daniel Álvarez. Del Valle hizo una promesa: «Sacaremos al lobo del Lespre, impulsando un plan del control». Y también denunció que decisiones como la del lobo «las toman personas que desconocen el campo, que jamás lo han pisado y que están acabando con la cabaña». «Tras el 23 de julio recuperaremos el campo español», acabó.

Y quedaba Sumar, que optó –y tampoco por casualidad– por Castro. Primero, porque allí celebrarán el lunes una reunión de escucha. Y, segundo, porque era el día del Coso Blanco. Una buena ocasión para hablar de turismo. Carmen Martín y Mónica Rodero, que aspiran al Congreso, alabaron la capacidad de los vecinos de Castro de «mantener sus tradiciones en un ejercicio de unión y vecindad». Y lo tomaron como ejemplo: «La presión turística no puede ser a costa del día a día de los vecinos». O sea, que defienden adaptar el turismo a quien reside todo el año y no «primar el ladrillo frente a los servicios».