El estudio madrileño Frade Arquitectos realizará el diseño museográfico del Mupac

Tras año y medio de espera y sucesivos retrasos, esta empresa con sede en Madrid ha sido la que ha conseguido más puntos en el concurso público, por lo que el Ejecutivo ha adjudicado el contrato por 285.000 euros, frente a los 347.875 euros que figuraban en el presupuesto base de licitación. Una cantidad nada comparable a los 45 millones que totaliza el proyecto -obra y diseño- que servirá para poner en marcha el que se presenta como el gran centro de ciencia y cultura que dicen que va a situar a Cantabria al frente de la gestión del patrimonio prehistórico nacional. De las seis empresas que optaban al contrato, por detrás de Frades Arquitectos han quedado las empresas Rocamora y Varis Arquitectos, en segundo y tercer lugar, respectivamente.

Ahora, el ganador del concurso tendrá 19 meses para presentar el trabajo en paralelo al avance de las obras del Mupac en Puertochico. Tendrán que ir entregando sus conclusiones en tres fases estipuladas en los pliegos. La primera (mes y medio) es la de la redacción del anteproyecto para la instalación expositiva, que contenga la propuesta general de áreas, contenidos, sistemas de transmisión de los contenidos. Seis meses después tendrá que entregar el proyecto definitivo y el manual para la imagen institucional del museo. Y lo último será el año que tendrá para la ejecución de las instalaciones proyectadas, incluyendo las modificaciones que puedan surgir durante su ejecución.

Para la adjudicación, además de la oferta económica y la experiencia del director del proyecto, Cultura ha valorado la calidad de la propuesta, la funcionalidad y el diseño de la instalación, la eficiencia energética del diseño y de las instalaciones propuestas, el diseño económico y eficiente que garantice el mantenimiento sostenible de la instalación durante su uso futuro y la mejora de las actividades complementarias a la visita al museo.

Frade Arquitectos fue fundado en 2005 por Juan Pablo Rodríguez Frade. El propósito del estudio «es crear un diálogo entre la arquitectura y su entorno, ofreciendo respuestas contemporáneas a programas complejos con la ayuda de una selectiva combinación de luz, materiales y texturas que conforman el proyecto». «Entendemos la arquitectura como el resultado de muchas variables en donde es necesario conjugar necesidades funcionales con valores artísticos intemporales basándonos en la eficiencia energética y el aprovechamiento responsable de los recursos», apuntan desde el estudio. Entre sus últimos trabajos están los diseños museográficos del Palacio de Carlos V en La Alhambra, la colección de la Colegiata de San Isidoro en León y el Museo Arqueológico Nacional.