Fallece calcinada una mujer tras colisionar su coche con un poste eléctrico en Liencres

Una mujer de nacionalidad rumana falleció calcinada como consecuencia de un accidente de circulación ocurrido durante la madrugada del sábado al domingo en Liencres, donde el vehículo en el que viajaba como pasajera, y que conducía un varón que resultó herido de extrema gravedad, se salió de la vía, colisionó contra una poste del tendido eléctrico y comenzó a arder.

Según informaron ayer fuentes de la Delegación del Gobierno, el suceso se produjo en torno a las tres y media de la madrugada en la carretera que une la localidad de Liencres con la playa de Somocuevas (Piélagos), donde, por causas que se investigan, un coche modelo Fiat 500 en el que viajaban dos personas –un hombre y una mujer– se salió de la vía, colisionó violentamente con un poste del tendido eléctrico y el cerramiento de una casa y se incendió.

Producto del fuerte impacto falleció la pasajera del turismo, una mujer de nacionalidad rumana de la que no ha trascendido ningún dato personal más –ni su filiación ni su edad– a la que los servicios de emergencias que acudieron al rescate extrajeron del interior de su habitáculo calcinada y ya sin vida. Además, el conductor del coche, un varón igualmente rumano del que tampoco se conoce más información personal, resultó con heridas de gravedad por las que tuvo que ser evacuado de urgencia al Hospital Valdecilla, donde quedó ingresado.

Alertado del accidente, el Servicio de Emergencias 112 Cantabria movilizó al Parque de Bomberos de Santander, que desplazó un vehículo autotanque y una grúa, al 061, que envió a varias ambulancias para hacerse cargo del traslado de la mujer fallecida y de su compañero herido grave, y a la Guardia Civil de Tráfico, que abrió las correspondientes diligencias del suceso.

En el lugar quedaron las huellas visibles del brutal accidente (el poste del tendido eléctrico derribado, el muro de la vivienda dañado y el asfalto quemado) y, desde temprano por la mañana, una amarga sensación entre los vecinos más madrugadores de la zona, que aseguraron que las llamas tuvieron que alcanzar al menos los diez metros de altura, porque calcinaron una bandera ubicada a esa distancia del suelo, y que a ellos no les despertó el golpe sino las sirenas de los coches de bomberos al llegar.

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