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La Consejería de Presidencia del Gobierno de Cantabria, al igual que el resto de territorios, comunica cada año al Ministerio de Justicia sus peticiones en materia de nuevos juzgados e incorporación de magistrados con el objetivo de mejorar el servicio y tratar de acabar ... con la sobrecarga que trabajo que soporta el sistema. En 2022, el Ejecutivo cántabro pidió la creación del Juzgado de Primera Instancia número 13 de Santander y en Madrid dieron el visto bueno ya hace meses, pero aún no se ha puesto en marcha. ¿Por qué? Porque la Consejería no encuentra una ubicación. No hay espacio físico disponible. Un problema este el de los emplazamientos que también está afectando al funcionamiento de otras sedes judiciales de la comunidad autónoma.
«Vamos a tener que retrasar su implantación porque no tenemos donde ubicar este nuevo juzgado», reconoce la titular del departamento, Isabel Urrutia, que señala que su equipo se encontró esta situación heredada al tomar posesión el pasado mes de julio y que está trabajando en colaboración con el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) y los sindicatos del sector para solucionarla. La opción más probable es el complejo judicial de Las Salesas, pero no es fácil encontrar encaje para el Juzgado 13 de la capital. La vía que está en estudio es realizar una ampliación de los inmuebles de la finca, pero para ello es necesario que el Ayuntamiento de Santander confirme que es posible construir un nuevo anexo desde el punto urbanístico sin que se sobrepase el límite de edificabilidad del solar.
En caso de que el Consistorio no observe inconvenientes, la intención de la Consejería de Presidencia y Justicia es aprovechar esta operación para recolocar también la sede del Colegio de Procuradores, que necesita una entrada directa desde la calle, ya que funciona en fines de semana y festivos, cuando la mayor parte del complejo judicial de Las Salesas permanece sin actividad y cerrado al público. Lo que sí que garantiza Urrutia es que en los Presupuestos de Cantabria para 2024 hay partidas suficientes para poner en marcha el juzgado y dotarlo de personal.
«Es el mismo problema que arrastra Cantabria desde hace más de una década, el de la falta de espacio», apunta la consejera, que lamenta que las dos últimas legislaturas hayan sido tiempo perdido. Desde el PP recuerdan que en lo que va de actual legislatura ya se ha desbloqueado la creación de la Cámara Gessell –una sala acondicionada para permitir la observación con personas y pensada para que los menores víctimas de delitos sexuales puedan declarar en un entorno menos hostil–, precisamente con el acondicionamiento de un espacio en Las Salesas.
El plan de reordenación de las sedes judiciales de Santander contemplaba la concentración de todos los juzgados civiles en Las Salesas y del Instituto de Medicina Legal en Valdecilla, así como el traslado del equipo psicosocial de Santander y el servicio de informática al Edificio Europa, donde también se ubican, además del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, los tres del Contencioso Administrativo y los de lo Mercantil.
Gran parte del traslado de estas sedes judiciales al Edificio Europa se ha producido en los últimos años, pero según la consejera Urrutia, también se «han detectado problemas», por lo que todo es susceptible de revisión.
Los profesionales del Instituto de Medicina Legal de Cantabria, que además de las autopsias se encargan de la elaboración de informes psíquicos y psiquiátricos a las personas imputadas en un delito grave o valoraciones en casos de accidentes de tráfico y relacionadas con análisis toxicológicos, llevan años escuchando la promesa de que contarán con una nueva sede en la que se unifique toda su actividad (patología forense, patología clínica y laboratorio). En estos momentos, aunque las dependencias principales se encuentran en el complejo judicial de Las Salesas, tienen disgregada la sala de autopsias en un anexo del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Concretamente, comparten edificio con el Hospital Virtual. Esta convivencia limita las posibilidades –casi necesidades– de crecimiento del propio Hospital Virtual, pero también impide que se renueve una sala de autopsia totalmente obsoleta bajo la premisa de que no vale la pena hacer una gran inversión en un espacio que, en teoría, es provisional.
La consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, asegura que durante la última legislatura no se realizó ningún avance al respecto. Y aunque no garantiza que la nueva sede pueda estar lista a lo largo de los próximos cuatro años, sí tiene intención de dejar totalmente definido el proyecto. La opción más viable es retomar la idea del exconsejero Vicente Mediavilla y levantar un nuevo edificio para el Instituto de Medicina Legal en un solar adquirido en la calle Jerónimo Sainz de la Maza, frente a la plaza de toros. La alternativa es ceder este solar a Valdecilla para futuros proyectos y que, a cambio el hospital ceda un espacio en sus instalaciones para los forenses.
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