Una familia cántabra ahorrará dos euros en cada compra con la reducción del IVA

El Diario Montañés ha acudido a uno de los supermercados más conocidos de Cantabria para comprobar en un caso real el ahorro que supondrá en el tique una compra con los alimentos básicos sin impuestos - o reducidos- a partir del mes que viene. En este ejemplo se han elegido 18 artículos afectados por la rebaja (pan, harina de trigo, aceite de oliva virgen extra, pasta, cereales, aceite de girasol, leche, huevos camperos, queso, manzanas, patatas, lechuga, zanahoria, naranja de mesa, plátanos, lentejas, alubias y puerros) con los que la cuenta suma a día de hoy 42,99 euros. A partir de enero, esta idéntica selección en el mismo recinto tendría que costar 41, 23 euros. Es decir, una familia cántabra ahorraría alrededor de dos euros en cada carro del supermercado.

Un buen ejemplo para comprobar el efecto del descuento es el aceite de oliva virgen extra, uno de los productos más básicos y cuyo precio se ha disparado en el último año un 32,5% en Cantabria, según los últimos datos del IPC publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con la reducción de impuestos del 10 al 5%, una botella de un litro de la marca Carbonell pasará de 8,69 a 8,30 euros, casi 40 céntimos de ahorro. Con estas cifras, los cántabros lo notarán en su economía familiar, pero el coste seguirá todavía muy por encima del de hace justo un año. Con la pasta de trigo ocurre lo mismo. Del 10% de IVA actual pasará al 5%, así que, por ejemplo, un paquete básico de macarrones Gallo de 450 gramos será 7 céntimos más barato: de 1,38 a 1,31 euros. Una rebaja que queda en agua de borrajas si se tiene en cuenta que el precio de los cereales ha crecido más de un 23% en el último año.

Llega el turno de los artículos de primera necesidad, que pasarán del actual IVA superreducido (4%) al 0%. En este grupo están los otros 16 alimentos seleccionados en el caso que nos ocupa. Son el pan, la harina, los huevos, el queso, la leche, los huevos, las frutas, verduras y hortalizas. Precios más bajos y menos ahorro total para la cartera. Así, las familias se podrán reservar un par de céntimos en una baguete de pan industrial o rascar cinco céntimos a un envase de un kilo de harina de trigo. El cartón de media docena de huevos camperos de gallinas criadas en Cantabria valdrá nueve céntimos menos, que se quedarán en el bolsillo de los ciudadanos en vez de en las arcas públicas. Una pieza de lechuga de Cantabria costará cuatro céntimos menos (de 99 a 95 céntimos), un kilo de plátanos nueve céntimos menos (de 2,35 a 2,26 euros) y el kilo de naranjas de mesa se queda en 1,13 en vez de los actuales 1,18 euros.

Una bolsa de tres kilos de patatas de Valderredible será 14 céntimos más barata y una caja de cereales de maíz tipo Corn Flakes de medio kilo pasará de 2,25 a 2,16 euros. Todo esto teniendo en cuenta el alza de precios del último año: patatas (27%), huevos (25,7%), frutas (11%) y legumbres y hortalizas (15,9%).

Una vez hecho este repaso, solo queda comprobar si en unos días los lineales de las tiendas y supermercados mantienen los precios para alivio de los consumidores y su economía.