Un fin de semana invernal a las puertas de la primavera

El abrigo y el paraguas salieron ayer del armario a pasear en toda Cantabria, coincidiendo en el calendario con lo que popularmente se conoce como el cambio de témporas a primavera. No paró de llover a lo largo de la jornada, y esas precipitaciones se transformaron en nevadas de cierta intensidad, sobre todo en la comarca lebaniega, donde se cumplió la predicción de la alerta amarilla. Pero no fue la única zona afectada, ya que se necesitaron cadenas entre Vega de Pas y Estacas de Trueba, en el Valle de Cabuérniga, Espinilla y Salcedillo y en la N-621 por Vega de Liébana. No hubo que cerrar ninguna carretera, aunque sí continúa cortado al tráfico desde la pasada semana el puerto de Lunada, del kilómetro ocho al catorce de la CA-646 en San Roque de Riomiera. Un corte que es habitual en la zona con la llegada del invierno y que se prolonga durante semanas por el mal estado de esta carretera y la imposibilidad de subir el quitanieves por el riesgo de aludes.

La previsión

Hoy

Los cielos se mantendrán nubosos con lluvias débiles y chubascos más probables en la costa. La cota de nieve se mantendrá entre 500 y 700 metros.

Lunes

Cielos cubiertos evolucionando a nubosos a lo largo del día. La cota de nieve estará por encima de los 800 metros y las temperaturas irán en ascenso.

Martes

Cielos nubosos disminuyendo al final del día a poco nuboso o despejado, con posibilidad de algún chubasco y temperaturas en ascenso.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) hoy se mantienen los cielos nubosos o cubiertos, habrá lluvias débiles y chubascos con posibilidad de tormentas. Unas precipitaciones que serán más intensas en la costa y menos probables en el sur. Además, Liébana seguirá siendo la comarca con más posibilidad de nevadas «significativas» en un porcentaje de predicción del 95%, frente al 45% de Campoo. La cota de nieve se sitúa entre 500 y 700 metros subiendo a 1.000 durante la jornada. Las temperaturas, en ligero descenso.