Secciones
Servicios
Destacamos
Es el punto número uno de un texto que lleva la firma de la socialista Adriana Lastra y del diputado de Compromís Joan Baldoví. La petición más urgente de los valencianos, su demanda histórica. «El Gobierno se compromete a llevar a cabo a lo largo ... de esta legislatura la reforma del Sistema de Financiación Autonómica», dice en el segundo párrafo. Más aún, el compromiso debe materializarse en que «en los ocho primeros meses posteriores a la investidura, el Gobierno de España presentará una propuesta». Sin embargo, la principal amenaza para los intereses de Cantabria está un poco más arriba. En las líneas iniciales. Compromís deja por escrito que el actual modelo «ha resultado especialmente lesivo para la Comunidad Valenciana en términos de financiación media por población ajustada». El criterio. Ahí está la clave. Porque su idea va en contra de la que se defiende desde aquí, menos centrado en el volumen de la población y más en las condiciones concretas de cada territorio. Compromís no es el único. Los independentistas de ERC también han dejado claras sus intenciones. Con alusiones concretas. Para defender que se trata de un sistema «no sostenible» y discriminatorio para Cataluña ponen como ejemplo, precisamente, a Cantabria y Extremadura. Y ese punto no lo han incluido en su pacto con el PSOE, pero no cuesta imaginar el peso de los diputados de Esquerra cuando haya que tomar una decisión.
El de la financiación autonómica es el punto caliente para Cantabria si uno mira de reojo los acuerdos que el PSOE ha firmado con los diferentes partidos para garantizarse la investudira de Sánchez. Sobre todo, los que se refieren a formaciones políticas de ámbito regionalista o nacionalista. Los que dijeron sí, a diferencia del diputado del PRC, José María Mazón, que también tiene un acuerdo, pero acabó votando en contra. ¿Qué tienen esos pactos que pueda influir en Cantabria? Hay cosas. El reparto del dinero entre las comunidades está de forma expresa en el acuerdo con Compromís y quedó claro, más allá de su pacto, en una presentación ante inversores del vicepresidente de la Generalitat y coordinador nacional de ERC, Pere Aragonés. Puso a Cantabria como principal ejemplo de lo que, a su juicio, es injusto. O sea, que la región tendrá enfrente a dos socios de Sánchez cuando el debate se ponga sobre la mesa.
El pacto con Nueva Canarias insiste también en el «cumplimiento de modificación del Régimen Económico y Fiscal» con medidas «relativas a situar a Canarias en la financiación media de las Comunidades Autónomas». Es, de hecho –y con matices relativos a cuestiones concretas–, lo más repetido a lo largo de las trece páginas del documento que firma nuevamente Adriana Lastra por parte socialista y Román Rodríguez, presidente de la formación política de las islas.
Diálogo «efectivo».
El acuerdo se centra en el «reconocimiento del conflicto político» y la apertura de vías «superando la judicialización».
Competencias.
Se traspasarán las que estaban pendientes y se tomarán medidas para el «reconocimiento de las identidades territoriales», con alusiones concretas a Cataluña y al nuevo Estatuto vasco.
«Sentimientos nacionales».
La primera parte del pacto está dedicada al refuerzo del autogobierno gallego.
No es el único asunto que toca de lleno a los discursos permanentes en la actualidad política cántabra. Unos aparecen de forma expresa –la financiación– y otros entran en el análisis, precisamente, por omisión. Porque no están. Ahí sobresale el ejemplo de la conexión ferroviaria entre Santander y Bilbao, una de las demandas del Ejecutivo de Revilla. El presidente regional insiste en que en esa reivindicación va de la mano con el Gobierno vasco (y, por extensión, con el PNV). Sin embargo, en el pacto de los nacionalistas con Sánchez (el propio líder socialista se ocupó del apretón de manos con Andoni Ortuzar, el presidente del partido) no hay mención.
«Apostar de manera urgente, firme y decidida por las infraestructuras correspondientes al Estado con la Comunidad Autónoma Vasca y, especialmente, por lo relativo al Tren de Alta Velocidad, incluido el cronograma de trabajos y los compromisos complementarios ya cerrados con el Gobierno del Estado». Eso es, textualmente, lo que pone (punto cinco). Uno puede pensar que no se hace mención a un proyecto concreto y que la conexión con Santander podría estar en esos «compromisos complementarios». Pero no. Fuentes conocedoras de los entresijos del pacto aseguran que el PNV sí que ve con buenos ojos el proyecto, pero más como para apoyar una reivindicación desde Cantabria que para hacerla suya en Madrid. De hecho, en la Agenda Vasca de la negociación no está. Ellos están centrados en concluir el AVE con Madrid y, en segundo lugar, en la llamada Variante Sur Ferroviaria, que supone dar una nueva salida a su Puerto (otro aspecto que afecta a Cantabria por la competencia que supone para el Puerto de Santander). Más aún, en otro punto del documento se señala que se debe «cumplir con los aspectos pendientes de los acuerdos suscritos por EAJ-PNV con el Gobierno del PP en diferentes ámbitos». No es casual, porque parte de esos compromisos estaban vinculados a estas infraestructuras y se suscribieron en la etapa de Íñigo de la Serna como ministro. Un movimiento de los nacionalistas vascos para que nada se pierda por el camino gobierne quien gobierne.
Financiación
. Cumplimiento de las previsiones «relativas a situar a Canarias en la financiación media de las Comunidades Autónomas». El texto insiste mucho en el desarrollo del Régimen Económico y Fiscal.
Compromiso del Gobierno de reformar el modelo de financiación autonómica «especialmente lesivo para la Comunidad Valenciana en términos de financiación media por población ajustada». En ocho meses debe presentarse una propuesta.
Pacto de Estado
. Por la repoblación, el reequilibrio territorial y ante el reto demográfico.
En cuanto a trenes, hay otras cuestiones puntuales. Que no da para lo que todos quieren es evidente. Y si la lista de espera es grande, más todavía con la firma de estos compromisos. Por ejemplo, el diputado de Teruel Existe tiene firmado el impulso para el Corredor Cantábrico-Mediterráneo. Pero, claro, en el tramo que le toca más cerca (Zaragoza-Teruel-Sagunto). Compromís se garantiza mejoras en la red de Cercanías. Y más ambiciosos son incluso los asuntos que ha arrancado a los socialistas el BNG. En el texto con los nacionalistas gallegos se habla de «modernizar la red interior ferroviaria» de la comunidad gallega, de «actuar» sobre la red de mercancías mejorando la conexión con los puertos o de incidir en la «inclusión del itinerario Coruña-Vigo-Orense-León como ampliación del Corredor Atlántico en Galicia» para que entre en la financiación de la «red transeuropea de transportes». ¿Les suena? (Cantabria pidió lo mismo en su momento a Fomento).
Y hay, claro, más allá de refuerzos de competencias, autogobierno o identidad «nacional» (en Galicia, Cataluña o el País Vasco son una constante en los textos firmados), mucha obra comprometida en los papeles. Si lo de la ampliación del Corredor Atlántico suena familiar, algo similar ocurre al leer lo relativo a «un polígono supracomarcal con todas las infraestructuras necesarias» que aparece como compromiso con Teruel Existe (y que suena parecido a La Pasiega) o a las medidas extraordinarias que se solicitan para zonas afectadas por la descarbonización o los problemas industriales (en el propio documento de Teruel Existe, el PNV o el BNG y que suena parecido a los planes especiales que se piden para el Besaya o Campoo). Incluso, ante la escalada de anuncios negativos en las grandes factorías cántabras en los últimos meses, las medidas que se solicitan desde Galicia en relación a las industrias electrointensivas.
Medidas y proyectos que resultan familiares y que llegan desde otra parte. Desde lugares con partidos que ahora se sientan a la misma mesa que Sánchez. Inversiones parecidas a las que se pidieron desde aquí y que Revilla, pese a que su partido votó «no», exige que no se pierdan si los consejeros del PSOE quieren mantener el puesto.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.